Ally
Despierto cuando la puerta se abre y deja entrar la luz brillante del pasillo, alzó la mirada y me encuentro con mi padre.
-Mírate, das pena-comenta acariciando mi cabello.
-Acaba con tu estupida venganza ahora- comento cansada mirándolo fijamente.
-No, eso ya no es porque te quiero-comenta serio y frío mirándome.
-¿Que mierda estás diciendo?-pregunto confundida.
-Necesito poder y lo sabes y tú tienes dos pollas poderosas entre tus piernas-comenta sonriendo frío.
-No te entiendo-comento confundida, me mira cabreado y me toma fuertemente del cabello.
-Seré bueno por primera vez contigo, se que te estás revolcando con esos hijos de puta y son poderosos los dos, y yo necesito el poder de uno de ellos-comenta frío mirándome fijamente.
-No te atrevas a tocarlos-comento con odio mirándolo.
-Ya es tarde, seré bueno contigo porque tú elegirás a quien matare- comenta sonriendo maliciosamente.
-Me dirás a quien amas menos de ellos y lo matare para quedarme con su poder- me toma del mentón y me mira fijamente-Así que decide .
-Ni loca-comento escupiendo con odio su rostro.
-Mira estupida- me toma fuertemente del mentón haciendo que mi rostro duela- Te conviene, se inteligente una puta vez y decide, porque después de que hayas elegido te podrás largar con el que ha quedado y no sabrás de mi
O quieres morir tu? - Se aleja de mi y de nuevo el odio y coraje lo consume haciendo que me de fuertes golpes en el rostro, en el abdomen y llegue a escupir sangre-Piénsalo bien hijita-comenta alejándose de mi.Han pasado varias horas y mi estupido padre no ha vuelto, el temor me ha invadido, tengo miedo de que ese hijo de puta lastime a alguno de los dos. Trato de zafarme de las estupidas cadenas de metal con las que estoy atada pero es inútil, dejo de hacerlo cuando dos hombres entran a la habitación.
Se acercan a mi, haciendo que me ponga alerta, quitan las cadenas, me esposan y amarran un pañuelo en mi boca, y me cubren el rostro con una bolsa negra, me toman fuertemente y me sacan de la habitación, trato de zafarme pero es inútil su agarre es demasiado fuerte en mis brazos.
- Muy bien maricas es hora de despertar-escucho la voz fría de mi padre y después los gritos desgarradores y gruñidos de Ethan y Dem, trato de ver algo pero es inútil, sus gritos me ponen alerta y temerosa, forcejeo y grito a los hombres que me tienen.
-Sueltenme-digo llorando de angustia por sus gritos.
Escucho los pasos que se acercan a mi y después siento como la bolsa es quitada de mi cara haciendo que la luz cale en mi vista, cuando me recobró puedo verlos, lloro al verlos lastimados y torturados.
-No, no- grito pero la venda que está en mi boca hace que suene poco.
Ethan enfoca su mirada cansada en mi, noto su rostro lastimado y herido, con sangre seca, lloro al verlo, él no merece esto, después giro a ver a Dem, me mira fijamente con su mirada cansada y trata de regalarme una sonrisa.
Dejo de mirarlos cuando mi padre se acerca a mi y acaricia con su mano mi rostro.
-No, no te atrevas a tocarla hijo de puta- grita Ethan al ver tan cerca a mi padre.
-No la toques gilipollas-grita cabreado Dem.
-Cállalos Chad- comenta frío mi padre, giro a mirarlos y veo a Chad con un látigo lleno de sangre pero dejo de hacerlo al cerrar mis ojos cuando escucho el golpe del látigo sobre las espaldas de Ethan y Dem, niego al escuchar sus gruñidos de dolor.
Abro los ojos al sentir como mi padre quita la venda de mi boca, permitiéndome hablar.
-Por favor, no les hagas nada- suplico llorando mirándolo.
-Oh tranquila hijita, yo no lo haré, lo harás tú-comenta mirándome frío y serio, hace que tome a fuerzas una pistola y me gira, quedando enfrente de ellos.
-Toma tu decisión ahora- comenta autoritario y frío- O si no ambos morirían- me amenaza fríamente y después hace que mi vista se dirigían a las personas que amo tanto, sus miradas cansadas me examinan y me miran preocupados y confusos, pero cuando escuchan a mi padre, bajan la mirada, esto no puede estar pasando.Maratón 1/2
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Mi ángel (2da TEMP MD)
Roman pour Adolescents-Por que si, no quiero estar aquí, quiero irme-dice mientras algunas lágrimas se deslizan por su rostro-Disparame por favor-suplica llorando. -Ángel, no puedes pagarme así-digo triste mirándola fijamente, no puedo creer que me este pidiendo esto. -A...