Love Me Again ||| [RSxT/N]

•⇨XXXIII⇦•

Reiji toma al chico de la camisa y lo separa de mi lanzándolo con fuerza contra un árbol, me extiende la mano y me ayuda a ponerme de pie.
—Cariño ¿estás bien? ¿Te ha lastimado? —con una sonrisa le doy a entender a Reiji que todo está bien y él me besa —quiero que te alejes de nosotros todo lo que puedas, corre a la mansión y quédate con los chicos, me encargaré de él lo más rápido posible
—Reiji, porfavor ten mucho cuidado —él asiente y me da un beso para luego empujarme cuidadosamente y salgo corriendo
Comienzo a correr sin dejar de mirar hacia atrás y noto que el tipo se pone de pie con la intención de seguirne pero Reiji lo agarra y lo pega contra el suelo. Los pierdo de vista cuando estoy muy lejos de ellos y me detengo un momento para pensar en dónde estoy, creo que me he perdido. Decido sentarme y tomar aire, me da tanta lástima que este vestido se haya ensuciado estando completamente nuevo, también perdí un zapato.
Una luz blanca comienza acercarse a mi y antes de que me ponga de pie ya la tengo al frente, una mujer de cabello rubio y largo, sonríe y me toma de la mano con suavidad. Intento soltarme pero algo me lo impide. La mujer me pone de pie y comienza a jalar de mi brazo y caminamos por el bosque, algo en ella me genera tranquilidad y confianza.
—Quién eres? ¿adónde piensas llevarme?
La mujer no responde a mis preguntas y continuamos caminando, nunca la había visto.
—Yo te protegeré —es lo único que dice y continuamos hasta llegar a una clase de escondite, es como una cueva oscura hecha de piedra —Nos quedaremos aquí hasta que Reiji venga por ti
—Quién eres? ¿por qué me estás protegiendo?
—Él no puede sufrir más, tu pérdida sería el peor de sus sufrimientos y su muerte segura

Kino se lanza sobre mi y golpea mi cabeza contra el suelo con fuerza, logro ponerme sobre él y repito su acción para luego golpearlo con mis puños repetidas veces y lanzarlo contra un árbol.
—Acéptalo, Reiji, yo me quedaré con esa chica
Lo que el chico dice hace que me moleste más  me acerco a él y tomo su cabeza entre mis manos presionando fuertemente pero él logra soltarse
—Le haré tantas cosas que va a disfrutar

—Cómo conoces a Reiji? ¿cómo te llamas tu?
A juzgar por la expresión de la mujer, ella ha decidido no contestar a ninguna de mis preguntas