Capítulo 26

111 19 21
                                    

Mi boca se entreabrió ligeramente, mis ojos se abrieron del asombro y el vaso de la mesa casi se cae estrepitosamente.

Sus ojos azules no vacilaron ni un segundo en mantener contacto con los míos e incluso su boca seguía curvada hacía arriba ¿Le divertiría la situación?.

Mis manos comenzaron a sudar cuando vi los segundos correr. Tenia que decir algo, articular algún minúsculo monosílabo al menos pero mi garganta se cerro de tal manera que no sabía como se hablaba.

—Eh..-silencio—yo esto..—desvié mi vista hacia algún punto de la cocina.

¿Podría alguien ser más torpe en estás situaciones que yo? No lo creo.

—¿Estás de broma?—pregunté.

Fue lo único que se me pasó por la cabeza, no me podía creer esas palabras procedentes de él. Su boca dejó de curvarse hacía arriba y era algo demasiado normal porque ¡Joder! de todas las cosas que se pueden decir digo las gilipolleces.

—¡No quise decir eso!—exclamé cerrando los ojos con fuerza por la vergüenza.

Volví a abrir mis ojos lentamente para observar que otra vez me sonreía, me estaba sintiendo demasiado estúpida.

—Yo solo quiero decir que bueno —silencio—que yo no esperaba eso...ya sabes.

—Leire..—escuché y me di cuenta que no le había dejado hablar todavía.

—Esta bueno el zumo de naranja ¿verdad?—volví a abrir mi estúpida boca.

¡Oh dios mio! debería de aprender a manejar situaciones así con la edad que tengo porque lo único que hago es meter la pata.

Rió y al ver que se reía me reí con él, no se si fue por el momento tan extraño o bien producido por los nervios pero solo se que mi motivo era distinto al suyo.

—Debería de aprender a mantener mi boca cerrada—dije dejando de reír—lo siento.

—Yo debería de aprender a no ser tan directo a veces—reveló.

—¿Lo decías completamente enserio?—pregunté seria esta vez.

Se puso de pie para ir hacía mi dirección y no pude evitar ponerme más nerviosa.

—Si—apoyó sus codos en la encimera.—pero relájate que parece que te he confesado que he matado a alguien.

—No estoy acostumbrada a este tipo de conversaciones —me sinceré.

—No creo ser el primer chico que te confiesa algo así—agregó.

—Pero tu no eres cualquier chico—le miré fijamente y vi como esa revelación marcó un brillo especial en sus ojos.

—Según tu cabeza soy tu mejor amigo—dijo por mi.

Asentí sin poder llegar a decir nada más debido a su cercanía. Debería alejarme pero mis piernas ni responden.

—Pero a lo mejor puedo cambiar esa idea ¿No te parece?— dijo acechando la distancia que nos quedaba.—Se que puedo hacerte sentir otras cosas por mi.

Mi sonrojé por la forma de hablarme, no estaba acostumbrada a que Dani se dirigiera a mi de esa forma .

—Dani yo..—tenia que decirle que no estaba bien lo que decía, que no podía ser.

Me beso la frente delicadamente,agradecí enormemente que hubiera decidido ese lugar y no otro.

—Debo irme —dijo.—En cuanto cruce esa puerta me habré arrepentido de ser siempre tan espontaneo.

Como conocer a una chica ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora