Hҽყ ɳҽɳα.

Hey nena - Capítulo 1.

Y allí estaba yo, tan solo trabajando en una cafetería no muy conocida de la ciudad ¿Por qué? Porque la gente que viene aquí son puros tipos borrachos, malandras que buscan pleito cuando están subidos de tono. Por la noche este lugar se vuelve todo lo contrario a lo que es de día, el jefe al descubrir que tiene más "reconocimiento" optó por ello.
-Que asco-me queje y con un trapo limpiaba una copa viendo como  un hombre trataba de seducir a una de las prostitutas que trabajaba aquí.
Así es, de noche se transformaba en un lugar no muy de mi agrado. Mucho alcohol, juegos de poker y si que se mueve mucho dinero, prostitutas con muy poca ropa las cuales arriba de aquí hay varias habitaciones para cogerselas. Nunca trabaje en este turno pero hoy me tocó, el que trabajaba a estas horas se había enfermado y el jefe es tan tacaño que no le va a pagar a otro en su lugar.
-Hey linda-oí la voz de un hombre, como respuesta alcé los ojos para verlo. Era uno con traje, al parecer trabajaba en alguna agencia ¿Quién sabe? No era feo, debo admitirlo pero en el estado que estaba era degradante.
-¿Qué necesitas?-pregunté tratando de ser cortés.
-¿No te gustaría estar conmigo?.
Alcé una ceja mientras detenía mi labor.
-No gracias-agradecí forzando una sonrisa.
-Vamos linda, tengo mucho dinero-sonrió desagradablemente, se acercó a la barra, el hedor a alcohol que cargaba era horrible.
-Te he dicho que no-lo observé firme y con el mentón señalé hacia las prostitutas que estaban cerca de las escaleras-a ellas si les importarían tu dinero.
Negó tércamente apoyando los brazos sobre la barra y se acercó más, por suerte la poca distancia que había era gracias a la barra.
-Tú eres realmente hermosa, mucho mejor que esas mujeres-dijo eso último haciendo un gesto de deshagrado-tienes un cuerpo de infarto mujer, me encantaría hacerte gritar en la cama.
-Escúchame-hablé ya irritada hasta el culo, me incliné en la barra haciéndole frente-vuelves a pasarte de la raya y te reviento este vaso en la cabeza-agregué mostrando con advertencia el vaso que cargaba en una mano. El hombre sonrió de lado ¿Acaso me estaba retando?
-Que feroz que eres... no me imagino como debes ser en la cama.
Iba a lanzarle el vaso al rostro pero en aquel momento una mano se apoyó en su hombro.
-¿No has oído lo que te ha dicho?
Alce los ojos y vi a aquel hombre. Lo primero que me llamó la atención fue su cabello blanco y ojos celestes pálidos.
-¿Qué crees que estas haciendo?-gruño el borracho volteando, un puñetazo en el rostro fue suficiente para hacerlo dormir en el suelo. 
-A una mujer no se le falta el respeto-dijo y se sentó en el lugar que antes había estado aquel tipo.
-Gracias-agradecí viendo sus ojos celestes-lo salvaste de que le reviente este vaso en el rostro-agregué divertida, sonrió de lado.
-Dame un whisky por favor-pidió, asentí suavemente y se lo armé.
Lo observé de reojo, de seguro tenía unos 35 años por el porte adulto, melena blanca, ojos celestes pálidos un tono bastante llamativo, ropas extrañas pero también bonitas ¿Quién era?
-Nunca te vi por aquí-comenté en cuanto le entregué el vaso con la bebida.
-Es la primera vez que vengo-contó el peliblanco que de un saque se tomó el whisky-y veo que no es un lugar muy agradable para ti-desvió los ojos hacia el borracho que aún seguía en el suelo.
-Trabajo a la mañana. Aunque no lo creas es diferente en esas horas.
-Mmm... interesante-inspeccionó con la mirada todo el entorno-no quiero que me revientes la cabeza con un vaso-agregó divertido.
No pude evitar reír, era un hombre muy llamativo, debía admitirlo. 
-¿Cuál es tu nombre?.
-____-respondí-¿Y el tuyo?
-Dante-respondió apoyando los brazos sobre la barra-es un placer conocerte.
Dante, un nombre muy bonito como él mismo.

¡Buenas! Traigo una historia para todas las fans de Dante, el sugar daddy de Devil May Cry ❤ ya que hice una historia de Vergil, una de Nero y me pregunte ¿Por qué no una de Dante? Espero que les guste ❤ un abrazo y beso enorme ☺️❤