aftertaste

11 | Something is going to happen

[ Capítulo once ]
Algo va a pasar.

  Los pies descalzos de Emma caminan por el pasillo de la casa en dirección a la cocina, acomoda su cabello tras su espalda entrando a la habitación, recibiendo como primera vista la musculosa espalda de Jacob, sonríe inconscientemente al verlo preparar el almuerzo con total atención, cuidando cada detalle de la presentación.
  Camina hacia él enrollando sus brazos alrededor de su cintura, dejando su mejilla apoyada en su desnuda espalda, sintiendo al momento su cálida temperatura combinarse con la suya.

— ¿Cómo es que despertaste primero que yo?—se coloca de puntitas, asomándose sobre su hombro.

—Soy muy sigiloso—gira sobre sus pies quedando frente a ella, rodea su cintura con delicadeza observando sus ojos en ese momento dorados, haciendo resaltar su fina piel blanca, acomoda un mechón de su cabello chocolate tras su oreja, dejando un suave y tierno beso en su frente.

—Tus ojos están dorados—dice acunando su rostro entre sus manos.

   La híbrida cierra los ojos un momento, desviando la mirada de Jacob.

—Son hermosos—levanta su mentón haciendo nuevamente contacto visual.

— Debo ir a cazar—da un paso hacia atrás, quitando las manos de Jacob sobre su cintura.

— Te acompañaré.

—Pensaba ir con Bella, me ha pedido ir con ella. No está siendo fácil, especialmente porque verá a su padre esta tarde.

   Se excusa al momento

— ¿No se fueron siempre?—pregunta con el ceño fruncido, cruzando sus brazos, apoyándose en la barra de la cocina.

—No tuvo valor para dejar a Charlie.

— ¿Segura que no quieres que te acompañe?—niega con la cabeza y avanza hacia el, rodea su cuello con ambas manos, dejando un largo beso en sus labios, siendo correspondida al momento.
  Las manos de Jacob se colocan con lentitud dentro de su playera, las yemas de sus dedos recorrían con lentitud cada centímetro de su cintura, provocando un estremecimiento en su piel, baja las manos a la cadera de Emma, sintiendo el contacto con su piel al solo traer las bragas, sacando un suave gemido de su chica que logro desestabilizar a su lobo, la coloca sobre la barra de la cocina, colocándose entre sus piernas, acercándola a él, liberando gemidos de parte de ambos.
   La boca del lobo baja al cuello de su impronta sintiendo los dedos de la castaña enredarse en su cabeza, sintiendo su piel hervir.
   Sin embargo la presencia del timbre se hizo presente Jacob captura sus labios nuevamente y rodea con fuerza su cintura acercándola con brusquedad a él.

— Debo irme—se aleja de él unos centímetros, a escasos centímetros de sus labios tras sentir la presencia de Bella en el exterior.

  Maldice mentalmente