RECHAZADA.

Cap. 5

Narra Christian.

- Lo siento Marlen, no sabía que ella te golpearía. - Fui sincero, le pedí perdón de corazón.

- Tranquilo Chris, no tengo nada. - Sky rodó los ojos y bufó. Se levanto indignada y salió de la cocina, yo la seguí. 

- Sky...- Intente tomar su brazo pero ella lo apartó. 

- Ahora no, Christian. - Mi nombre salió con furia de sus labios, entendí que debía dejarla sola. Salió por la puerta principal y hasta la noche no apareció, pero al cruzar la puerta no venía sola.

Narra Skyler.

Salí de la casa y gracias a la Diosa que Christian no me siguió porque no respondería. Me indigno que Marlen hiciera ver las cosas como si no fueran nada cuando ella recibió un golpe por parte de esa zorra. Recorrí toda la manada de arriba a abajo y de un lado a otro. No sabía que hacer por lo que me interne en el bosque, la paz me invadió al instante, tan de golpe que me maree un poco. Saqué a mi loba y corrí, hasta llegar a un prado lleno de jazmines. Me destransforme viendo la oportunidad perfecta para practicar con mis poderes. Me toque el cuello y, mierda, olvide el collar. Será que... 

Con miedo estire mi mano. Una especie de humo blanco apareció en mi mano y al disiparse pude ver mi collar, rápidamente me lo coloque. 

-Bien, veamos... - Intente de mil formas hacer que mi magia saliera pero nada. Mire al cielo frustrada. - Ya se. - Tome el collar con mi mano y cerré fuertemente los ojos. Al abrirlos enfrente de mi apareció mi madre. -Mama...- Susurré. 

- Cariño, ¿porque me invocaste?- Rodé los ojos.

- ¿Como estas hija? Bien mama, gracias por preguntar, ¿y tu? bien hija, ¿porque me invocaste.- simule una conversación con ella, para luego rodar los ojos.

- Ya, lo siento. Pero, enserio, ¿porque me invocaste? No tengo mucho tiempo.- Bufe.

-Estuve intentando usar mis poderes pero... no puedo. Simplemente no salen. ¿Que hago?- Ella sonrió de lado. 

-Si puedes imaginarlo, puedes lograrlo. Sino ¿como hiciste aparecer tu collar? Imaginándolo en tu mano. Debo irme hija, cuídate.- Así como apareció desapareció, en un pestañeo.

- Bien... entonces ¿que hago?

Cerré los ojos y estiré mi mano, imagine que florecía una rosa negra entre los jazmines. Al abrir los ojos poco a poco uno rosa negra fue creciendo, mis labios formaron una sonrisa. Una idea cruzo por mi mente. Estiré mi mano hacia el cielo imaginando que lanzaba al aire una bola de brillo y luego del cielo caían cientos de estos como si fuera lluvia. Al abrir los ojos fue tal cual paso. Sentí mis ojos cambiar de color, hice apareces un pequeño espejo en mi mano y me mire, efectivamente, mis ojos están de color dorado. 

Miles de ideas se me ocurrieron de golpe, pero me estanque en una. ¿Y si pudiera teletransportar? Me imagine en mi habitación, con mi mano hice como si me echara aire en el rostro como había visto en películas y un humo blanco me envolvió, al disiparse aparecí en mi habitación. Me sorprendí al ver a Chris sentado en mi cama, y su cara era de pura sorpresa al verme aparecer envuelta en humo blanco y de la nada.

-¿Que haces aquí? - El pareció salir de su shock y me miró a los ojos.

- Eh... yo... venía... y...- Fruncí el ceño y el suspiro. - Venía a disculparme por traer a Sacha anoche.- Levante una ceja y sonreí burlona.

- Así que la perra tiene nombre. - Me dirigí a la puerta al lado del baño, la cual lleva a un vestido vació, porque no tengo ropa. Con un movimiento de mano todo se lleno de ropa, calzado y accesorios. La mesa de maquillaje que se encuentra en el fondo del vestidor se lleno de maquillaje. 

-Wow.- Al voltear vi a un Chris muy impresionado. 

- Cierra la boca que te entran moscas. - Al instante lo hizo. - ¿Como? - Me miro confundido.

- Ventajas de ser hija de la Diosa Luna. - Me encogí de hombros. A Lu le encantara todo el maquillaje. Mierda, Lu, lo olvide. Tome mi teléfono y la llame. Uno, dos, contestadora.

-Hola Lu, no te enojes, respondeme la llamada por favor. Te amo. - Colgué. Y la volví a llamar tantas veces que perdí la cuenta. Me empece a preocupar, ella responde siempre, nunca deja que la llamen más de tres veces. Uno, dos, contestadora de nuevo. -Mierda Lu, responde por favor, estoy preocupada. - Colgué. - Mierda, mierda mierda. - Debo ir a verla, tome las llaves de mi moto, mi casco y salí corriendo de la habitación olvidándome totalmente de Chris, pensando solo en Lu. 

Es media noche y ya llevo una hora de viaje, faltan dos. Acelere más y en cuarenta minutos estaba en la entrada a la manada. Unos guardias me detuvieron, pero no tengo tiempo para esto. Simplemente acelere a fondo, hasta llegar a casa de Lu. Me pareció raro ver la puerta entre abierta, la abrí por completo y entre a paso lento. Todo esta completamente destrozado. Revisé cada habitación del piso de abajo, cabe recalcar que la casa de Lu es grande. Fui al segundo piso e hice lo mismo. Solo falta la habitación de Lu, al entrar me encontré a Lu tirada en el piso llorando y a su lado los cuerpos sin vida de sus padres. Lucy en sus brazos tiene a su pequeño hermano, Marcus, de apenas dos meses. 

-Lu...- Susurré, ella me miró y lloró más. Me acerque a ella y la abrace, cuando se calmó me separe de ella y tome al pequeño en brazos, la ayude a levantarse y tomándola de la mano la conduje hasta la cocina, le di un vaso con una pastilla para dormir. - Sube a la camioneta de tus padres, yo iré luego, tu solo duerme, estarán bien. - Ella asintió, se tomo la pastilla y la mitad del agua y se fue a la cochera. Las llaves de la camioneta están en la mesa de la entrada, las tome y las guarde en mi bolsillo. Subí a la habitación del bebe y en un bolso metí lo necesario, ropa, leche, biberón, pañales, y más. Me lo colgué al hombro y con mi brazo libre sostuve al bebe, tome la silla para el coche de Marcus. Entre en la cochera y puse la silla en el asiento y deje a un dormido Marcus dentro, envuelto en mantas. 

Abrí el portón del garage con el control y saque la camioneta, en la parte de la caja subí la moto, la asegure. En el asiento del copiloto Lu dormía plácidamente. Emprendí viaje a mi manada. 

Al llegar, con mi magia teletransporte a Lu a mi habitación, luego tome al pequeño entre brazos y lo acosté en el sofá con almohadas a su alrededor para que no se caiga. Subí a mi habitación y arrope a Lu, luego tome unas mantas y una almohada de mi vestidos y la lleve abajo. Me acosté en el sofá con el pequeño Marcus y me dormí, a las horas su llanto me despertó, por lo que le prepare un biberón y lo mecí en mis brazos, luego le quite los gases y le cambie el pañal. Lo tome en brazo y lo mecí nuevamente hasta que se durmió y lo acosté en el sofá, me acosté al lado del pequeño y volví a dormirme. 

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¡Hola! ¿Cómo están? Les quería comentar la dinámica de los capítulos. Subiré uno cada vez que pueda, no creo que pase más de tres días entre capítulos. 

Sin más que decir, hasta el próximo capítulo.

Bye.