Capítulo 3

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Ese día después de clases, mis padres se encontraban esperándome en el salón de la casa

—Creí que llegarían en una semana—
Sonreí

—Sí, pero necesitábamos hablar contigo— Habló mi padre

—Ohhh.... ¿De qué?— Dejé las llaves sobre la mesa y me senté en el sofá, frente a ellos

—Hija, debes casarte— Tomó mi mano

—¿Qué?— Lo miré apenada

—Nuestra empresa, está en bancarrota, y tú eres la única que nos puede ayudar....— Me libré del agarre de mi padre

—¿Con quién me casaré?— Evité que mis lágrimas salieran. Amaba mucho a mi familia, por eso no quería darles más preocupaciones

—Con el hijo de un empresario— Suspiró —Sé que es difícil, pero es la única manera de salvar la empresa—

—Entiendo— Bajé la mirada
—Iré a mi habitación—

—Mañana no irás a la escuela—
Habló mi madre. No pregunté el motivo, pues ya lo sabía. Mañana conocería a mi prometido.

A la mañana siguiente

Desperté con los ojos hinchados, de tanto llorar. Yon y Hoseok no tenían intenciones de irse a la escuela sin mí, así que me coloqué una bata, y bajé hasta su coche

—¿Y tú?, ¿Por qué no te has vestido?—Preguntó Yon

—Hoy...no iré a clases— Sollocé

—¿Pero qué te ocurre?, mira tu rostro, estás demacrada— Tocó mi mejilla

—Chicos— Suspiré —Me voy a casar—

—¿¡Qué?!— Gritaron

—La empresa de mi padre está en bancarrota y la única forma de salvarla, es casandome con el hijo de un empresario millonario— Bajé la mirada

—¿Y..... aceptarás?— Yon intentó mantener la calma, para que yo pudiera explicarles la situación

—Sí, no quiero decepcionar a mi familia—

—Bueno, te servirá para olvidar a Jungkook—

—¡Hobi!—Yon, golpeó su antebrazo

—Pero es cierto— Habló, mientras acariciaba el sitio golpeado

—Yo.....no quiero olvidarlo—
Las lágrimas amenazaban por salir
—Eso es lo que más me duele—

—Traquila, ya pasará— Hoseok intentó abrazarme, pero lo aparté

—Es horrible casarte con alguien que no amas— Sollocé.
Yon me rodeó con sus brazos

—Te apoyaremos en todo— Musitó levemente.
Tomé mi celular y vi la hora

—Ya deben irse o llegarán tarde—

—Pero...aún no nos dices porque no irás a clases— Preguntó Hobi

—Hoy conoceré a mi prometido—

—Uhhh... Ya veo— Habló

—Adios, cuídate y llámanos cualquier cosa— Mi amiga, besó mi frente, al igual que lo hizo Hoseok.
Los vi alejarse, mientras las lágrimas caían por mis mejillas. Caminé al interior de mi casa, encontrándome con mi madre

—Vístete, tú prometido vendrá dentro de una hora— Sonrió.
Subí a mi habitación y encontré unas prendas sobre mi cama, que no me gustaron para nada, así que busqué entre mi ropa algo que usar.

—Señorita, ya llegó el joven—La sirvienta, golpeó nuestra puerta

—Gracias, Eun-Mi—Sentí como ella se retiró. Estuve al menos 10 minutos, pensando en mi vida, después de ver a mi prometido. No sería la misma, ya no podría ver a Jungkook ni mucho menos seguirlo. Me sentiría como una persona nueva y no sabía si eso era lo que yo quería para mi vida. Pero después, mi familia invadió mi mente; Ellos habían dado toda su vida por mí, ¿Qué clase de hija defraudaría a sus padres de esa forma?. Hundí mi cabeza en la almohada, y di un gritó en ella. Cuando ya me sentí desahogada, decidí ir a la sala, lista para enfrentar mi responsabilidad. Allí vi a mis padres, sentados en el sofá, hablando con un hombre. Respiré profundo y entré

—Hija— Mi madre tomó mi mano
—Él es el señor Jeon— Al verlo, hice una leve reverencia

—Mi hijo fue al baño, pero debe estar por regresar— Asentí.
Esperé por unos 5 minutos, hasta que escuché unos pasos acercarse a nosotros —Hasta que llegas— Sonrió el señor Jeon —Bueno, él es...— Levanté mi rostro y no podía creer lo que veía. Era más increíble que cualquier sueño que haya tenido antes.

Heart of rock -Jungkook-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora