Ni aunque el destino así lo diga

PROLOGO

Furihata es un estudiante de instituto de 3 año con las mismas preocupaciones que cualquier otro, familia, amigos, escuela y porque no amor, Furi siempre había sido un chico tímido no era la persona mas sociable del mundo al menos que se tratase de sus amigos y solo después de tomarles confianza, a pesar de ser alguien tímido tenía una personalidad bastante fuerte y de convicciones firmes, realmente detestaba a las persona arrogantes y orgullosas solo por el hecho de ser Alfa, venir de buena familia o tener dinero todo eso no era pretexto para ser así y tratar a los demás despectivamente.

Siendo Omega Kouki muchas veces era molestado por el hecho de su inexperiencia en el sexo o por ni siquiera a ver conseguido una pareja ya que la mayoría de su grado en el instituto ya tenía pareja, el buscaba algo más allá de una simple pareja solo porque él era Omega no era que le desagradara la idea del romanticismo de echo estaba enamorado desde hace mucho de su sempai Kiyoshi Tepei y ahora entrenador del club de básquet. Desde que lo conoció quedo encantado era una persona maravillosa a ojos de Kouki siempre había sido una persona amable y amistosa nunca mostro esos típicos comportamientos de arrogancia por ser Alfa todo lo contrario siempre fue amable y eso así siempre suspirar a kouki.

A diferencia de otros omegas su mayor aspiración en la vida no era ser marcado por un alfa o encontrar a su destinado y vivir felices por siempre, no él quería más quería ingresar a la universidad estudiar literatura y al graduarse ser un escritor tenia sueños y lo lograría sin importar que y si alguna vez se llegara a enlazar con alguien lo aria por amor no porque algo llamado destino dictaminara con quien tenías que estar toda tu vida esto último aunque siempre decía que no le interesaba si causaba cierta inquietud en él.

Kuroko Tetsuya era su mejor amigo a pesar de haberlo conocido en su primer año de instituto estos se hicieron muy cercanos, se entendían y apoyaban mutuamente kuroko durante al secundaria había pertenecido a la Generación de los Milagros y siempre le contaba sus anécdotas si bien antes tenían problemas actualmente se llevaban todos muy bien y se reunían frecuentemente para juagar básquet o simplemente conversar y ponerse al día de todo siempre que lo escuchaba hablar de sus amigos se emocionaba ya que se veía que tenían una bonita amistad y le daban ganas de conocer a tan buenos amigos.

Akashi Seijuro estudiante de segundo año de la carrera de administración de empresas, es un Alfa de gran linaje proveniente de una familia prestigiosa siendo esta de las más influyentes en todo Japón, desde pequeño fue criado en las mejores instituciones y los mejores tutores preparándolo para ser el mejor en todo lo que hiciera al ser el primogénito del linaje Akashi era lo mínimo que se esperaba de él. Creció siendo alguien educado elegante y perfecto, siendo un alfa siempre tenía consigo un aura diferente a los demás que te imponía respeto y sumisión para cualquiera que lo conociera. Debido a como había sido educado era una persona orgullosa de sí mismo a veces un tanto arrogante y te daba una impresión de perfección y este mismo sabia de cierta manera que era perfecto, era rico, apuesto, inteligente, dotado de muchas cualidades que cualquiera querría, tenía todo lo que él quería así que porque no creerse perfecto.

A pesar de estas actitudes Akashi no era mala persona todo lo contrario era amable, respetuoso, solidario y muy leal; desgraciadamente muchas veces estas cualidades eran opacadas por su actitud orgullosa y absoluta, en parte no era su culpa ya que desde pequeño había sido educado para ser perfecto y estar orgulloso de eso. Su padre siempre había sido estricto con él en todo tanto en el estudio como en conducta, llenándolo de diversas lecciones y clases extras para mejorar su persona y proclamarse siempre como el número uno en todo lo que se propusiera; no fue hasta que su madre durante un embarazo casi muere esto cuando el tenía 10 años, este hecho le abrió los ojos a su padre entendiendo que esa no la manera de educar a su hijo, actualmente era un padre amoroso pero aun estricto que de la mano de su esposa sabia mediar las cosas además de que no se quería volver a equivocar con su hijo menor Ritsu el cual Akashi adora.

Si bien Akashi ya no era presionado constantemente por su padre si lo era por si mismo, estaba consiente que era el primogénito y había expectativas que tenía que cumplir, sabía que todo el impero de su padre pasaría pronto a sus manos y tendría que hacerse cargo como se debe eso incluía formar una familia en su momento, además de que sus padres fantaseaban con tener nietos corriendo por la mansión, siendo un alfa tan reconocido tenía que cumplir las expectativas y tener un omega digno para ser su esposa.

Aunque siendo sinceros esto de tener una pareja era la menor de las preocupaciones, no le interesaba en absoluto el romanticismo, sí que había tenido parejas antes pero nada serio solo era para pasar el rato entretenerse y tener sexo, no es que necesitara pareja para esto, o sea el es Akashi Seijuro

Actualmente llevaba una vida como cualquier universitario aunque siendo quien es el nada en su vida sería ordinario, estudiaba en la mejor universidad de Tokio junto con su mejor amigo Midorima Shintaro, con el cual desde la secundaria de toda la generación de los milagros había creado una confianza absoluta con él y viceversa.

Este es mi primer Fanfic espero les guste, ya llevo algo de la historia avanzada asi que subiré muy seguido capítulos, entiendo perfectamente lo que es tener que esperar por otro capítulo así que no dejare pasar mucho tiempo para subir un capitulo.

Espero lo disfruten :)