See The Lights [Brothers Conflict]

•Capítulo 5•|Pena|

Me diste confianza en mí mismo
Eso es todo lo que quería
Puede que no haya reglas entre nosotros,
pero el camino hacia el amor existe
—Best Of Me, BTS.

—¡Asakura Fuuto! —esa era Haruka que, después de los vanos intentos de Masaomi por detenerla, había entrado corriendo a la residencia por culpa de un idol que, hasta la hora, no se aparecía. Y es que Haruka enojada tenía un aura tan oscura que hasta el sartén de Ukyo se escondió —¡Aparecete en este mismísimo instante! —con eso dicho, pateó la puerta de la habitación de Fuuto y, con esa "simple" patada, ésta cedió.

—¿Por que gritas? —claro que él no estaba contento con todo ese escándalo en plena mañana. El tenía muchas cosas importantes que hacer. Un ejemplo, dormir.

—Por tu culpa estamos atrasados. —dijo mientras señalaba la hora en la pantalla de su celular y recibiendo una mirada confusa del castaño —Tu sabes que el mánager es muy capaz de dejarnos e irse solo. —apenas ella le vió la cara supo que el realmente no sabía de que chingos estaba hablando.

—¿Ir a donde? —porque Fuuto estaba más perdido que cuando escuchaba a sus hermanos mayores comentar su día. A fin de cuentas el no entendía lo que eran la hepatitis, o enriquecimiento ilícito y mucho menos lo que sea que hacia Buda. Después de todo, del trabajo de Masaomi solo sabía lo que era la fiebre: cuando no tienes ganas de nada y te sientes cansado, con eso podía decir que Yusuke tenía fiebre todos los días; del de Ukyo solo sabía la definición de cadena perpetua: la pena que le deberían dar a Yusuke por exceso de estupidez ¡eso era un delito muy grave!; y del de Kaname..., en el de Kaname... ahí si no entendía nada, excepto que no hay que pasar ninguna prueba sobre ser pervertidos.

—No me digas que no te dijo... —el suspenso que estaba poniendo Haruka lo estaba dejando sin paciencia.

—¿Decirme que? —preguntó bastante irritado.

—Me las va a pagar ese intento de humano. —¿estaba hablando de su mánager? Suponía que si, ya que ese mánager era una prueba fallida de lo que era la idea de un humano.

—¿Que hizo ahora? —dijo mientras revisaba si la puerta de su habitación tenía alguna forma de arreglarse, más solo confirmó que estaba hecha un desastre en ambos lados.

—Solo cambiate y baja. —¿cambiarse? Ahora tendría que hacer eso en el baño. No se cambiaría en una habitación sin puerta y, para terminar, una Haruka merodeando cual león a punto de atrapar a su presa —Yo me encargaré de hacerle el interrogatorio. —Sin decir más, ella desapareció de su vista, aunque eso no cambiaba el hecho de que se cambiaría en el baño.

—¿Haruka? —dijo alguien al otro lado de la línea —¿Como así llamas? —y su simple voz le estaba despertando a ella su instinto asesino —Oh, ya se ¿Vas a explicar el por que todavía no estás aquí cuando acordamos que sería a las diez y ya son las diez y media? —¿no era él el que tenía que explicar algo?

—¡Tu jodete! —y aunque eso no bastó para que se liberara, por lo menos soltó un poco de estrés —¡El que va a a explicar aquí eres tú! —recriminó.

—¿Yo? —el sonaba bastante sorprendido por la acusación, y como no, si resulta que se olvidaba hasta de su nombre, solo en ciertas ocasiones.

—¿Vas a explicar el por que Asakura Fuuto no sabía de esto cuando acordamos que tu se lo dirías? —además, donde el le respondía con algo ridículo ella sería capaz de lanzarlo por el inodoro a buscar a Dori.

—Oh, me olvide. —ya faltaba menos de media hora para que su querido manager sienta lo que sintió Nemo cuando tuvo que buscar a ese pescado.

—¿¡Como carajos te olvidas de algo tan importante y fundamental para nuestra carrera!? ¡Pedazo de mierda! —pero eso no quitaba que le dijera una cuantas palabras de odio especialmente hechas para ser dirigidas a el.

—Soy humano ¿sabes? —eres un intento de humano, solo que no lo quieres admitir —¡Y ni se te ocurra volverme a llamar pedazo de mierda! —el debía agradecer que ella no le dijo el diccionario de las malas palabras que había aprendido a lo largo de su vida.

—Te convertire en un cadáver ¿sabes? —lo amenazó bastante molesta.

—Voy a recogerlos —el creía que con eso podría calmar un poco a la chica —¿estas bien con eso?

—Quizás así considere perdonarte. —bufo molesta por todo eso. —¡pero ni se te ocurra venir tarde ¿me escuchaste?!

—Agresiva. —cortó la llamada. Ese día iba bien hasta que esa llamada lo dañó y eso que debía agradecer que Haruka no le haya dicho más de diez malas palabras, porque, de haber sido así, su día se habría desperdiciado.

—Listo, Fuuto. —sonrió mientras él miraba, completamente incrédulo, el repentino cambio de humor de la chica. Que bipolar.

—Tu... —¿que era lo que iba a preguntar? Ah, eso. —¿ya me vas a decir a donde mierda vamos?

—Vamos a una entrevista. —sintió un poco de pena por el chico, parecía que lo único que el había decidido por si mismo era el ser idol. Era triste. Era extraño que ella sintiera pena por alguien, aún así ¿como no sentirla por la persona que la defendió en los tiempos después de que se hiciera pública su identidad? Hasta la fecha, ella no dejaba de maldecir a los paparazzi camuflados que la encontraron e hicieron viral el nombre real de la idol que debutó como IA.

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—Si, si. Solo eres una niña con un sueño que apesta. —la empujaron —No te creas más que los demás porque eres un fracaso como idol. —tenía catorce años. ¿Como se debía defender? —Ni siquiera mereces el puesto a lado de Fuuto. —eso si dolió porque nadie sabía todo lo que tuvo que pasar para llegar a donde estaba ahora.

—¡Si lo merezco! —una de las chicas el sujetó el cabello para después comenzarlos a jalar constantemente. —Déjame, por favor. —había comenzado a llorar hasta que escuchó la voz de un chico.

—Déjala.

—Pero Fuuto-san...—intentó detenerlo.

—Asahina-san. —corrigió —ella se ganó el puesto a mi lado, ustedes no le llegan ni a los pies.

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Claro que esa no fue la única vez, habían muchas haters de IA por la cercanía que ella tenía con el idol del momento. Sin embargo, fue temporal.

¿Como no sentir aprecio por la persona
que la ayudó a avanzar cuando estuvo a punto de detenerse?