See The Lights [Brothers Conflict]

•Capítulo 7•|Momentos|

Atrapado en el laberinto del amor
Agotado en el caos mortal
Intentamos encontra la respuesta correcta
Perdido en el laberinto, en la oscuridad.
—Love Maze, BTS.

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—¿Y como manejas algo tan complicado como el mundo del espectáculo? —preguntó Haruka mientras observaba, bastante admirada pero lo disimulo muy bien, todos los posters con el nombre y la imagen de Asakura Fuuto colgados por todo el lugar.

—Es difícil. —recordó los abucheos de los haters, las veces en lo que lo golpearon por ser reconocido, las veces en las que todos insistían que se rindiera. —Una vez la fama llega, vienen con ella rencores y la envidia de muchas personas que, o querían triunfar en el medio pero perdieron contra ti, o no querían que tu triunfaras siendo cantante. —dijo levemente cansado por eso de que las chicas pusieran excusas y excusas para que el dejara de defender a Haruka. Esa niña que parecía ser un imán de problemas y, al parecer, de personas que la sacaran de ellos. Tristemente para él, ahora era uno de ellos.

—¿Por que la gente es tan envidiosa? —dijo de manera rápida, frustrada, cogió una pluma y comenzó a garabatear cantidad de cosas sobre una hoja que, por la fuerza que empleó, terminó rota en miles de pedacitos. —¡Deberian estar felices por las personas que logran sus sueños! —recordó las muchas veces que su mamá le dijo esas palabras, mejor dicho, las muchas veces que se quejó con esas palabras. Después de todo, sus abuelos no eran las mejores personas de este mundo, de hecho, botaron a su madre de la casa cuando se enteraron que se había casado a escondidas con su padre. Aunque eso también fue culpa de su madre ¡por amor a la humanidad! ¿¡Quien diablos se escapa para casarse!? Ah si, cierto. Su madre. —Además de que la persona que no logra cumplir todas sus metas es porque no lo intento lo suficiente. —sonrió satisfecha cuando vino a su mente su madre diciéndole todas esas cosas que Fuuto parecía entender a la perfección.

—Eso es lo que pensamos todos lo que lo lograron pero las personas que no logran sus objetivos se vuelven viciosas y tratan de hacerlo todo más complicado para los que si se esforzaron. —Fuuto se sintió molesto cuando sus recuerdos le mostraron a las muchas personas que hicieron casi imposible el lograr llegar tan alto. Y al pensar en eso le recordó a Tsubaki molestandolo con que creciera.

—Tienes pensamientos profundos para ser solo un idiota. —sonrió, causando algo dentro del Interior del castaño. Parecía que su corazón estuviera bailando en una fiesta con sus intestinos o algo así. Ignoró eso y puso en su lista de "cosas por hacer en un futuro muy cercano" el ir con su doctor personal y preguntar por una posible arritmia que se le parecía estar presentando.

—¡Tu! —empezó a quejarse —¿¡Te salve de esas estúpidas depravadas llenas de hormonas y así me lo agradeces!? —intento aguantar la risa por el como Fuuto había llamado a las chicas que la habían molestado al descubrir quién era la ciudadana que debutó bajo el nombre de IA —¡Ten respeto! —reclamó como si fuera la gran cosa cuando en verdad, en su interior, tambien se quería reír.

—Eres tan infantil. —terminó riendo muy escandalosamente cuando vio el puchero que hizo el idol. Eso ignorando cualquier latido apresurado de su corazón y, al igual que Fuuto, ir a preguntar cuales eran los síntomas de la arritmia.

—¡No soy infantil! —hizo otro puchero que ella tomó, así como adorable lo cual se limitó a solo pensar, como gracioso.

—Si, lo eres. —sabía que eso llevaría a una pelea similar a la de dos niños de cinco años. Supuso que por eso soltó aquel comentario, sabiendo que enojaria al castaño.

—Lo que sea. —pero el terminó la pelea más rápido de lo que ella esperó, algo decepcionante para la imagen inmadura que tenía de Fuuto.

—Fuuto —lo llamó —¿por que se llama mundo del espectáculo? —cambio el tema con una pregunta que de la nada había cruzado por su cabeza. El chico solo pudo mirarla con una cara de confusión mezclada con sorpresa por la repentina interrogante para la cual no tenía respuesta.

—No lo se. —ella alzó una ceja dando a entender que lo molestaria con ese "no lo se" el resto de su vida. —Supongo que porque siempre hay algo de que comentar, ya sabes, siempre hay espectáculo —comentó riéndose de su propio intento de "chiste".

—¿Tu crees? —soltó con ironía.

—A preguntas estúpidas, respuestas estúpidas. —esa vez ella se mostró como si hubiesen herido algo más que su orgullo.

—¡Callate, pendejo!

—Pendejo Yusuke.

—Lastimosamente no puedo negar eso. —ambos rieron mientras algo crecía en su interior. Es una pena que fueran demasiado jóvenes para saber que era.

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🎼🎼🎼

—Y esta es la fórmula para resolver el problema, ¿verdad? —dijo señalando un ejercicio que estaba en el libro de matemáticas de la chica. Ella afirmó mientras le aplaudía por haber logrado, después de horas practicando, terminar aquel problema —Eres buena explicando. —dijo mientras se acercaba a su rostro y le sonreía. Ella no supo cuando su corazón corrió un maratón porque definitivamente parecía haber corrido uno con tantos latidos.

—Lo se. —dijo para aligerar el ambiente haciendo que Fuuto se aleje de su cara para presentar sus quejas sobre ese comentario.

—No te volveré a alagar ni en mi próxima vida. —dijo notoriamente molesto. Haciendo un puchero que le recordó a la chica el día que la "salvó" de aquellas chicas estúpidas depravadas llenas de hormonas, como el las había bautizado.

—No creo que tu próxima vida sea en la tierra si no es para ser un gusano. —se burló de él para recordar los viejos tiempos, ¿o debería decir los tiempos de siempre? Ellos nunca cambiaban y eso era algo que ella guardaba como un gran tesoro. Solo que no era conciente ni de eso ni de los sentimientos mutuos que estaban desarrollándose.

—¡Estas buscando que te lance de un precipicio, Haruka! —le dijo siendo conciente de que ella no tomaba en serio sus amenazas.

—Yo también te quiero. —soltó divertida sin darse cuenta que había provocado segundos sentimientos. Como un sonrojo de parte de Fuuto, por ejemplo.

Quererse no es malo.

—¿De que forma me quieres? —dijo volviendo a acercar su rostro hasta rozar sus labios con la chica. —¿Como amigo... —comenzo a alejarse para mirarla a los ojos —...o quizás como novio? —ella solo miraba sorprendida las acciones del chico.

Malo es no querer darse cuenta.

—Fuuto, yo... —el no la dejó responder. Quizás por miedo pero no quiso dejarla hablar. El la besó con mas intensidad y sonrió entre los besos al darse cuenta de que ella le correspondía de manera torpe. Su primer beso, supuso. Ambos estaban felices solo que, aún sabiendo que era lo correcto, una pequeña, pero muy diminuta, parte de ellos seguía negándolo. Seguían negando que ese momento era real.

No hay nada mejor que un beso lleno de sentimientos para despertar corazones ciegos. Aunque la verdad es que ellos no querían ver.