《Capítulo 40》

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Las lágrimas salían con mucha intensidad y rapidez, a medida que sus palabras leía el dolor aumentaba y me hacía sentir como la misma basura que fui y soy. Mis manos temblorosas dejan la carta en la cama y empiezo a sollozar como nunca antes, boto todo lo que siento en este instante y de lo mucho que deseo olvidarla de una vez por todas.

-¡¿En serio crees que no lo he intentado?! – Grito a nada pensando que ella puede ver lo miserable que soy ahora.- ¡Lo que más quiero es por fin dejarte ir pero no puedo, eres me jodida mejor amiga y ni siquiera puedo creer que pensaras que iba a encontrar a alguien mejor que tú!

Mi respiración se empieza a acelerar con mi cuerpo temblando y los ojos derramando lágrimas dolorosas. Pensé que ella me iba a decir que no la olvide, pensé que ella querría que siempre la recordara. Lo intente, intente dejarla atrás pero no puedo porque siempre pienso que vendrás a decirme que todo estar bien, que todo es una jodida pesadilla y que saldremos a comprar ropa mientras yo compro libros. Siento tanto enojo e ira ahora, mis manos toman el control y tiran las almohadas al suelo al igual que el espejo que está en la mesa de noche. Veo como las cosas caen y empiezan a hacerse añicos a medida que mis manos lo cogen y los tiran con mucha brusquedad tratando de calmar el dolor que siento, el dolor de pensar que Ariana no volverá nunca más y que solo soy una tonta que piensa que ella solo está de viaje.

NO.

Ella está muerta, ya no vive y no la volverás a ver nunca más.

-¡No es fácil Ariana, no es fácil despertar y ya no ir a tu casa para ir al Instituto, no es fácil tener que ver a tu madre, no es fácil ver a tu padre, no es fácil ver a todos recordándome a ti, no es fácil tener que cargar con tu muerte todos los días! – mis gritos aumentan y las ganas de lastimarme vuelven a cruzar por mi cabeza, debo calmarme, esa no es la solución.

La ansiedad volvió, mis manos empiezan a temblar y en movimientos suaves empiezan a rascar mis muñecas haciendo que duelan.

NO, YO NO QUIERO SER UNA CHICA CON CICATRICES, DEBO DEJAR DE HACERME DAÑO Y PENSAR EN MI, PENSAR QUE PRONTO TODO ESTO SERA SOLO UN RECUERDO MALO DEL PASADO.

Tomo el peluche de la cama y lo guardo en la caja al igual que la carta, mis pies empiezan a temblar y siento que voy a caer en cualquier momento. Tomo fuerzas y bajo las escaleras, con movimientos débiles y sin fuerzas me sujeto del barandal para no caer, bajo despacio y con las lágrimas nublando mi vista y haciéndome sollozar. Al llegar abajo veo que los demás están sentados en el sofá, Zeus empieza a ladrar y ellos voltean a verme, no puedo aguantar más y caigo al suelo de rodillas sintiendo como mi cuerpo pide descansar y como mi mente solo pide llorar y seguir llorando hasta quedarme dormida y torturarme. Mikael me coge en brazos y me echa en el sofá, Nicole me coge de la mano y dice algo que no escucho. Ahora solo pienso en como Ariana escribió esa carta, como lloraba en silencio y como se aguantaba el dolor para no preocupar a los demás, pienso en cómo me pidió que haga otras amigas y que la olvide, pienso en cuanto le dolió dejarme ir.

-¡Eres tan egoísta!- grito y siento como mis parpados empiezan a pesarme.

-Shhh.- Mikael me abraza y mi cabeza descansa en su pecho, empiezo a llorar de nuevo, me cuesta dejar mis ojos abiertos y de pronto siento como me duermo.

***

Abro los ojos sintiendo como alguien me soba el cabello, cuando la figura se aclara no puedo creerlo, su cabello rubio está a los costados de su rostro, lleva un vestido blanco y el collar que yo le regale en su cumpleaños. Me siento en la cama y veo como ella me sonríe.

-¿Ariana?- pregunto con un nudo en la garganta, ella me sonríe.

-Te extrañe, Mikela.- dice y la envuelvo en mis brazos, lleva el mismo perfume que la última vez y su cabello rubio esta igual de suave que siempre. Suelto un sollozo y la abrazo con todas mis fuerzas.- Tranquila, ya estoy aquí ahora.

Mi novio salido de Wattpad (Quédate Para Siempre)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora