《Capítulo 6》

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Diría que comprar ropa es mi actividad favorita, claro, como toda chica normal.

Pero... NO.

Odio comprar ropa, claro que me gusta tener ropa nueva, pero no tener que ir yo misma a comprarla. Siempre veo a chicas alborotadas porque no le queda bien, no está el color que quieren, no juega con su figura.

Ropa es ropa, yo me pondría hasta ropa de hombre,  que por cierto me han dicho que es mucho más cómoda.

— Camina más lejos, hueles a mierda. — digo empujando a Mikael pero él se acerca, soba su cuerpo en todo mi pequeño cuerpo haciendo que el olor de alcohol de la ropa entre en mis fosas nasales con más intensidad. — Eres un cerdo. —  lo empujo pero él sonríe y me guiña un ojo.

— Deberías agradecer que estoy aquí, lo que darían las escritoras para que su personaje principal favorito salga de la novela.

— Exacto, personaje principal FAVORITO. — recalco la última palabra. — y tú no eres mi favorito.

Finge que alguien le disparó en el corazón, es tan dramático.

 —¿Entonces quién es?—  pregunta mientras cruzamos la autopista. — No creo que sean Trent o Javier.

Trent y Javier son los mejores amigos de Mikael, son casi su misma copia de él ya que también están involucrados en la apuesta. Pero Mikael se lleva mucho más con Trent porque se conocen desde pequeños, a Javier lo conocen hace un año y solo es un idiota.

— Todavía no aparece. — miento, no tenía pensado poner un nuevo personaje.

Me sorprende que este mintiendo tan bien, suelo ser muy mala con las mentiras, simplemente no se me dan. Me delato muy rápido.

— ¿Qué papel va cumplir?

— No es asunto tuyo. — digo mientras entramos a la tienda de ropa.

Hay unas chicas con sus novios comprando, pero cuándo ven a Mikael no les importa su acompañante. Están babeando por Mikael y él solo sonríe en dirección a las chicas que se emocionan como quinceañeras. Que vergüenza. 

— Solo entra y coge unas prendas para irnos de una vez. — él me hace caso entrando para ver si hay algo que le guste.

Adiós dinero.

— Iré a comprar algo para tomar, ya regreso. — digo y él asiente.

Salgo de la tienda que solo tiene aires de chicas desesperadas para que Mikael les sonría.

A veces pienso que soy un poco mala... solo a veces, pero recuerdo que todos somos malos ya que nadie nace siendo bueno.

Subo las escaleras y veo la tienda de Starbucks, estoy por entrar cuándo siento que alguien me coge del brazo, yo me giro para ver quien es y como desearía haberme quedado en la tienda de ropa viendo a chicas babeando.

 — Mikela.  — esa voz la he escuchado muchas veces, esa voz tan dulce.

Se ve mucho mejor que la última vez, ya no tiene ojeras, no está delgada, dejó de estar pálida y se ve... feliz.

— Señora Moore.—  digo incómodamente mientras ella me da un abrazo y yo me quedo sin responder.

— Cuanto tiempo hija, creo que ha pasado ¿un año? — me pregunta y me da mi espacio personal.

— Sí, pasó un año. — me aclaro la garganta y miro a los lados esperando que esté sola pero...

 —Joshua, ven a saludar. — La señora Moore mira hacía atrás y llama a su hijo que está con unas bolsas en las manos. Tiene una camiseta negra, unos pantalones oscuros, zapatillas blancas y un gorro de lana negro.

Mi novio salido de Wattpad (Quédate Para Siempre)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora