Capítulo 3- Carlos

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Que no, que no y que no! te digo yo que eso es imposible. No existe el plan perfecto. No existe nada 100% seguro, como los hechizos. Ni si quiera el más poderoso es irrompible. Por eso sería interesante poder rearmar tu plan.

Necesitamos destruir nuestra más inminente amenaza y no dejaré que...

+ Pero que ganamos dejando que tú hagas un doble plan a partir de nuestro plan inicial.- Le cortó bruscamente el ex-líder

Lo miró con furia y lo estampó contra la pared solo con un simple gesto.

- Ahora yo soy vuestro líder ¿no?

Pues procura no volver a cortarme mientras hablo, y mucho menos llevarme la contraria. Todo aquel que ose levantarse contra mi, será destruido. Me pedisteis sabiduría, y me ofrecisteis el puesto. Ahora limitaros a callar y a obedecer la maldición que vosotros mismos os habéis puesto encima.

El ex-líder de los Mixtreillers empezó a gritar de dolor. Su cuerpo se deshacía a causa de un ácido que Fruskor le había escupido. Era tarde para él. Y todos lo sabían. Un estremecimiento de miedo les recorrió el cuerpo.

-Esto es lo que le pasará al que se levante contra mí.

Destruiremos a los Nustreblitas, a la Tierra y a todo lo que suponga un peligro, aunque sea lo último que hagamos. No dejaré que la gran amenaza que nos tiene ahogados consiga su victoria.

Ya os adelantaré cosas del plan. Lo primero que haremos será despertar a los 3 magistrales de las torres para que todo se ponga en marcha. Acercaos, el fin de la era de la humanidad se aproxima.

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Carlos

El golpe pudo haberlo matado en el acto, había estado a punto de tener un gran derrame cerebral. Esos chicos se empeñaban en estropearle la vida.

El bip, bip, bip de la maquina que controlaba sus pulsaciones sonaba a su lado. Su fiel acompañante, junto al suero. Siempre acababa en los mismos líos.

De repente se acordó. ¡Katherine! intentó levantarse, pero su cuerpo no le respondió.

La enfermera paso corriendo junto al doctor.

-Mire, al fin, despertó hace media hora.

Le hablaban, pero por el contexto de la conversación había algo que no le cuadraba.

Los dos médicos le miraban, con ternura.

+ ¿Alguien me va a decir que está pasando?

-Chico verás, todavía no hemos identificado quien eres. Tenemos que contactar con tus padres, llevas en coma 6 meses y nadie ha preguntado nada por ti. Excepto una chica de tu edad a la que de vez en cuando hemos dejado pasar. Dice conocerte.

Carlos la miró desconcertado.

+ ¿Qué?

- Es el momento de guardar la calma.

+ ¡PERO CÓMO PRETENDES QUE GUARDE LA CALMA!

Intentó levantarse pero solo consiguió caer al suelo.

Los médicos le tumbaron rápidamente y volvieron a poner todo en su sitio.

- A ver, por favor, guarde la calma. Comprendo que no es fácil lo que acabas de oír, pero es la realidad.

En ese momento Katherine pasó por la puerta.

-Señorita, no es momento de que usted esté aquí, por favor salga.

Ella al ver a Carlos le dio igual lo que le dijeran. Se lanzó y le dio un abrazo. Se miraron. Sus miradas fueron muy significativas, el dolor que se podía leer en ellas era terrible. Muy terrible si tenemos en cuenta de que eran críos de 15 y 16 años.

Katherine salió de allí, y Carlos no pudo hacer nada al respecto, aparte de desprender lagrimas llenas de dolor.

-Por favor chico, escúcheme. Es algo importante lo que tengo que decirle.

El golpe que recibiste hizo que una parte de tu cerebro fuera afectada. No puedes mover nada de cintura para abajo.

Perfecto, ahora sí que era perfecto. Hoy no era su día.

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*Mientras en otra parte del mundo*

El dulce ambiente de la mañana rodeaba el entorno. La suave brisa era perfecta para acompañar aquella mañana de casi verano, que poco a poco iba convirtiéndose en una mañana calurosa, a pesar del frío de la noche, y de las grandes lluvias. El tiempo se estaba volviendo loco.

Los árboles crecían frondosos y los pájaros revoloteaban por encima de su cabeza.

Ese lugar era perfecto.

Miró a su alrededor, y empezó a recitar el llamamiento, era la hora de que alguien hiciera algo al respecto. Él iba a ser ese alguien.

Crónicas de la LuzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora