CAPÍTULO VEINTITRÉS: STEPHANIE

485 50 18
                                    


– Mucho gusto, Soy Viktor.

La persona en el trono se presentó.

AL – ¡Su majestad!

Al instante todos se arrodillaron, luego me hizo seña para que yo igual lo hiciera e hice que Yū también lo hiciera.

AL – Nos complace estar ante su presencia, su majestad.

Viktor (V) – Debo suponer que usted es el líder del grupo.

AL – Así es, soy Alexander, líder del grupo Always Forward.

V – Mucho gusto. ¿Quiénes son los demás?

AL – Chicos.

Ah cierto, nos dió instrucciones a la hora de presentarnos.

S – Soy Shino, de clase asesino. Es un honor estar ante se presencia su majestad.

R – Soy Rikka, de clase soporte. Es un honor estar ante se presencia su majestad

T – Soy Toguro, de clase tanque. Es un honor estar ante se presencia su majestad.

Y – Soy Yuuta, clase espadachín mágico. Es un honor estar ante se presencia su majestad.

Yū – Soy Yū. Es un honor… estar… ante su presencia… su majestad…

Parece que le costó decir esa frase.

V – El gusto es mío chicos.

Parece ser un rey amable después de todo.

V – El motivo por el cual les llame fue para agradecerles por la información que nos fue proporcionado por ustedes.

AL – No es nada, hicimos lo que debíamos haber.

V – Aunque estamos agradecido por ello, hay un motivo más por el cual les hice venir. Escuche que ustedes descubrieron y eliminaron a decenas de limos blancos y negros y que vencieron al rey duende.

AL – Así es su majestad.

V – Claro, si hubiese sido solo eso no hubiera sido suficiente pero escuche que también acabaron con un mounstro que ni siquiera yo pude eliminar por su molestosa inmortalidad, por supuesto habló del fenix.

AL – Fue un trabajo en equipo y un duro combate pero pudimos salir con la victoria.

V – Me gustaría probar su fuerza, para eso me gustaría que tuviesen un duelo con mi hija.

AL – Le agradecemos que nos considere dignos de enfrentar a un miembro de su familia pero no es algo que nosotros podamos manejar.

V – Venga, ¿Quién fue el que le dió el golpe final al fénix?

AL – Bueno, después de un arduo combate.

Y – Fuí yo su majestad.

Me estaba empezando aburrir la conversación entre Alexander y el rey.

V – Ya veo, ven, levántate.

Me levanté y lo mire.

V – ¿Crees que podrías aguantar el ritmo de mi hija?

Y – Vale la pena intentarlo.

V – Perfecto, ven aquí.

Me dirigí hacia ellos.

AL – Yuuta, no lo hagas. Podría ser un problema.

Y – No te preocupes jefe, no le haré mucho daño.

AL – No es eso…

Fui sin terminar de escuchar lo que Alexander decía.

V – Yuuta, ¿Cierto?

EL VIAJERO DE MUNDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora