Capitulo 4

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Intentando animarlo, nos hicimos aún más cercanos de lo que ya éramos y para entonces ya me había empezado a enamorar.

No pasó mucho para saber que él me correspondía así que iniciamos una relación. A mí no me importaba que fuera delgado o pequeño, me enamoro su forma de ser y con eso me bastaba.

Pasó el tiempo y la noticia más sonada era el inicio de una guerra.

Steve y Bucky se enlistaron pero solo Bucky fue admitido, por lo que tuvo que irse; sin embargo, eso no detuvo a Steve, lo intento de todo hasta mentir pero siempre fue rechazado hasta que conocío a alguien.

-te lo juro Nat, ese cientifico me prometió hacer que entrara al ejército.- me dijo cuando llegó a su casa. Más pasaba tiempo ahí en la mía.

-Steve, puede que sea mentira- la idea de que así como si nada, un científico experimentará con él solo por una buena obra, me parecía sospechosa.

-y si no?- me miró serio- no desaprovechare esta oportunidad, quiero cumplir con mi país-

-tú no eres hombre de guerra, no matas gente-

-pero intentaría evitar que más lo hicieran-

-no vayas Steve- suplique- no me dejes sola.

-Nat, sabes que eres mi chica especial y que jamás haría algo que tú no aprobaras, pero esto va más allá de una pelea callejera-

-Steve- seguí suplicando.

-Apóyame- ahora me suplicó él.

-bien, entonces sí lo logras nos casamos- le dije decidida. Tenía tiempo que él mencionó casamiento pero yo lo evadí, entonces al decirlo esperaba que pensara un poco más la cosas.

-en verdad te amo- me dijo emocionado pero no estaba dispuesto a dejar la idea.

-Steve no me hagas esto, no me lo digas si prácticamente me estás diciendo que me dejaras para irte a la guerra-

-yo no te dejaré- algo me decía que sus palabras no eran del todo ciertas. Incluso sin que él lo supiera.

-entonces casémonos ya, no pienso perder más tiempo- le dije firme.

Eso lo tomo por sorpresa- pero no te compre el anillo y Bucky no está, debo de pedirle permiso a tu padre-

-pues que esperamos, no te dejaré ir hasta que nos casemos-

Él sonrió.

-Bueno en ese caso, Natalia Romanova ¿te casarías conmigo?-

-claro que si- lo abrace emocionada para luego robarle un beso. Él se sonrojó hasta las orejas.

Besos en Guerra (Romanogers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora