*La chipa del destino –"El principio del final" *
*Sophie narrando*
Casi sin darme cuenta termine siendo prisionera de mi propia mente. Un sinfín de ideas me invadieron, pero solamente fui capaz de hilvanar algunas de ellas mientras intentaba visualizar en mi cabeza todos aquellos posibles escenarios que llevarían a mi papá y a mi mejor amiga a decidir esconder u omitir información que parecía ser muy importante, porque seamos honestos, nadie iba a estar tan estresado por algo insignificante.
Creía estar al borde de la conclusión, era como si en cualquier segundo la luz se iba a hacer presente e iba a poder ser capaz de unir todas esas ideas que parecían ser pequeñas piezas de un gran rompecabezas dentro de mi cerebro. Pero cuando estaba en el punto álgido, cuando estaba por rozar con mis dedos un segundo de claridad, el irritante sonido que emitía el celular de Hayley cada vez que sonaba me saco abruptamente de mi prisión imaginaria y me obligo a volver a la realidad. Suspire frustrada, todo parecía indicar que mis ideas conspirativas se frenaron, o al menos por ahora.
Odiaba el maldito ringtone de su celular, y estaba completamente segura de que ella llevaba años usándolo porque sabía lo mucho que me irritaba cada vez que lo escuchaba. Hayley noto mi mirada de odio y me sonrió satisfecha de sí misma mientras atendía su celular, la infeliz se ponía tan feliz cada vez que conseguía molestarme.
En fin, la persona que llamaba era su mamá, y parecía que era importante, porque la mirada de Hayley cambio después de hablar con ella durante unos pocos minutos. Para cuando la llamada termino, le pregunte si había pasado algo o si necesitaba ayuda, pero se limito a decirme que no era nada importante y que no hacía falta que me preocupe. Obviamente su respuesta no me convenció ni por un segundo, pero la muy cobarde pareció presentir que no le creí y que un interrogatorio se acercaba, así que de que yo pudiese decir algo me dijo que tenía que irse. Beso mi mejilla y mientras salía por la puerta me prometió que más tarde iba a volver.
Yo estaba atónita, ¿era la segunda vez en el día que mi mejor amiga de toda la vida decidía no contarme algo? ¿Qué mierda estaba pasando? Decidí que era más fácil dejar de hacerme preguntas a mi misma y empezar a dirigirlas a las fuentes de mis dudas, como Hayley se fue, solo me quedaba atacar a mi papá.
-¿Papá?-
-¿Qué pasa Soso?, ¿necesitas algo?
-¿Hay...algo que no me estén diciendo?, todos parecen estar tan...tensos-
-¿Qué?, no...por supuesto que nadie esta ocultándote nada corazón, supongo que todos estamos tensos porque es mucho para asimilar en tan poco tiempo- Casi le creí, digo casi porque por un instante parecía ser simplemente mi papá, pero la sonrisa nerviosa que esbozo ni bien termino de responder me hizo sentir que le preocupaba que yo no me creyera esa respuesta. Pero decidí no insistir, no parecía dispuesto a decirme que pasaba y no quería estresarlo más de lo que ya estaba.
- Esta bien, ¿qué vamos a hacer ahora?-
- Yo necesito comprar nuestros pasajes y terminar con unos detalles que son necesarios para la confirmación de compra de la casa nueva-
-¿Va a estar listo para cuando estemos allá?-
- Si, le pedí a una amiga que me dé una mano supervisando el amueblamiento de cosas básicas, después supongo que vamos a ir comprando cosas según lo que nos guste-
-¿Una amiga?...no sabía que tenías amigas ahí-
- Nos conocimos cuando yo estaba estudiando- se le notaba la incomodad, se notaba como rogaba en su interior para que yo dejase ese tema.
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La chispa del destino
BeletrieCuando en cuestión de segundos, su vida entera empieza a desmoronarse y arder frente a sus ojos, lo único que Sophie supo hacer, fue luchar con todas sus fuerzas en contra de esa corriente que amenazaba con arrastrarla hacia aquel remolino de destru...