Algo tan simple | TodoMomo

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Algo tan simple como la primera cita.

...Porque una sesión de estudio en la Sala común sin nada de privacidad ¿cuenta cómo cita, verdad?

—Son muy aburridos —balbuceó Ashido con la mandíbula sobre la mesa. Era claro que Momo tenía conceptos diferentes sobre las citas.

—No dije que fuera una cita en verdad, Ashido-san —respondió Momo tranquilamente mientras seguía resolviendo los ejercicios. A su lado, Todoroki le seguía el paso a su novia. Mina tan solo los miraba, tenían que ser de otro mundo esos dos porqué estaba realmente convencida de que, aun el más ingenuo del mundo sabría qué hacer en una cita. Aunque quizás estaba exagerando.

—¿Así, cierto?  —Todoroki le mostró su ejercicio a Momo y después de que ella lo analizara, asintió mostrando una sonrisa.

—¡Perfecto!

Y así seguían hablando de historia de héroes, que fundamentos del heroísmo, que sí la siguiente semana debían esforzarse en el entrenamiento que tendrían contra los de la clase B. Hasta que Ashido estalló molesta.

—¡Así no tiene que ser! —agitó sus brazos disgustada atrayendo la atención de ambos chicos, Kirishima se acercó rápidamente hasta ella.

—Oee Ashido calma, cada quien hace lo que desee en sus citas ¿no crees? —Kirishima la tomó por los hombro para relajarla.

—Yo... Lo siento Yaomomo, Todoroki, no debí entrometerme lo siento —Mina se disculpó, obviamente ambos chicos aceptaron la disculpa de la rosada chica. Esta fue llevada a otro lugar por Kirishima mientras seguía hablándole el porqué de los diferentes gustos.

Sin embargo, Todoroki lo pensó bien ¿Y sí ella tenía razón?

—Yaoyorozu.

—¿Sí?

—¿Te hubiese gustado una primera cita diferente? —indagó sin mirarla, sólo viendo las variables en su cuaderno. Momo giró su cabeza para verlo, su cabello estaba suelto lo que la hizo llevar un mechón atrás de su oreja para pensar.

—Pues no, en realidad no, estoy bien si estoy contigo.

—¿De verdad? —inquirió Shouto.

—Sí, pero si le molesta, podemos descartar esto como la primera cita y la tenemos más adelante, aunque pienso que... Las citas pueden tratarse de lo que sea mientras se esté a gusto con la otra persona —Momo sonrió para luego tomar la mano de él— Y yo estoy bien aquí.

Él asiente y apreta levemente la suave mano de ella.