Regresar A Ti

Capítulo 59.

Pov Roberta

El lunes llego y con el Alma Rey, había querido evitarla pero aún tenía ciertas dudas que deseaba resolver anoche habíamos decidido que regresariamos a Nueva York y desde ahí podíamos empezar a buscar a la mamá de Vico, además de eso podría retomar mi carrera al igual que ella y en cuento ya estuviera recuperada de la pierna o tuviera noticias de Mabel regresaría.

Aún no sabía si me quedaría allí para siempre o vendría a vivir con papá, aun estaba indecisa con respecto a eso y es que a pesar de amar la ciudad y la vida de allí el estar aquí con mi familia y en el lugar en el que crecí me llenaba de tanta paz. El único pero era el, siempre Diego, durante todo este tiempo nos evitamos pero desde ayer lo noto diferente y hasta he llegado a ver que sonríe con lo que digo incluso estuvo en los lugares a los que yo iba y no insulto a Mauro hasta se ofreció a darle clases de equitacion a Ari, claro cuando regresemos, aun no le decimos a ella que nos vamos ya que aún no tenemos una fecha pero lo más seguro es que nos vayamos antes de este fin de semana.

Estoy en la sala cuando tocan la puerta, en realidad la están somatando tanto como para derribarla y creo saber que es ella, mi papa ya se ha trasladado a la otra casa y mis hermanos han decidido que no quieren hablar con ella, Mauro esta por bajar con Ari para que podamos desayunar los tres y luego nos iremos de paseo, al regresar Ari se quedara con mía y solo mi nana nos atenderá a mi y a Mauro, voy a abrir y suspiro. Es hora de enfrentar a mi madre...

Alma: hasta que al fin alguien. -se queda callada al verme- tu eres

Rob: Roberta, la hija de Martín

Alma: eres mi hija - se intenta acercar a mi pero como puedo retrocedo-,

Rob: no señora, se equivoca yo no soy su hija, para mi madre murió un par de días después de que cumpliera yo dos años

Alma: eso no es cierto hija, tu papá me corrió de la hacienda obligandome a dejarte aquí con ellos, pero debes reconocer que fue lo mejor, mirate estas hermosa y ahora que te veo bien tu cara se me hace conocida

Rob: de seguro, pero no importa como fue el pasado si me dejo obligada o no, pase que se queda en su casa

Alma: y no le podrías pedir a alguien que me ayude con mi maleta es que pesa

Rob: lo siento señora pero como vera me es imposible ayudarla y la única que esta en casa es mi nana y tampoco puede cargar sus maletas, entre que no tengo tiempo para atenderla voy a salir con mi prometido y mi hija pero quiero mostrarle su habitación - empiezo a caminar sin voltear a verla, y puedo escuchar que esta refunfuñando en el camino nos encontramos con Mauro y Ari y el si se ofrece a ayudarla mientras Ari toma mi mano y nos acompaña a dejarla a su habitación -

Rob: está es su parte de la casa, podrá encontrar su habitación y baño respectivo ya sabe donde esta la cocina si tiene hambre puede bajar a prepararse lo que necesite, tendrá que hacer la limpieza de su área y si utiliza algún instrumento en la cocina deberá de lavarlo. Yo no regresaré hasta la noche y cada quien vive por su propia regla, si necesita algo consigalo usted misma y si fuera una emergencia llame a donde corresponda

Alma: pero hijita en esta casa tan grande no creo que no haya alguien que haga todo eso por mi

Rob: lo lamento, pero aqui son las cosas así, si usa algo debe de lavarlo al igual que su ropa, alimentos  o cualquier otra cosa y con permiso se nos hace tarde

Ari: adiós señora

Mauro: con permiso señora

- los tres salimos de la casa y suelto el aire que estaba reteniendo, es mi primer encuentro con ella pero aun no estoy lista para hablar así que nos vamos los tres al pueblito con el chófer, desayunamos y vamos a pasear, a la hora de la comida regresamos a casa ya que esta vez se hará en casa de santos y los demás días se turnarán, terminamos de planear el viaje, y hablamos con el abogado quien nos da el visto bueno, decidimos irnos el miércoles así tengo tiempo para hablar con ella y hacer las maletas llega la noche y luego de cenar Mauro va a dejar a Ari a casa de Miguel y para darme tiempo de hablar con ella se quedara viendo un partido de fútbol.

Ha llegado la hora de hablar con ella. Con mi madre