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Capítulo 62

Pov Diego

Todos han acordado que el día miércoles se irán de nuevo mi hermana, el patancito, la niña y mi Roberta tengo a penas un par de horas para saber si aun tengo una oportunidad con ella.

Cada que la veo con el quiero ir y separarlos pero no lo puedo hacer no solo porque estoy seguro que eso la alejaría más de mi sino que además aun no me siento preparado para pedirle perdón y es que a pesar de lo que escuche aun tengo que tener las pruebas del daño que le causaron a mi niña.

Y cuando pida perdón quiero hacerlo de rodillas si es necesario y sobre todo quiero que ese momento llegue cuando ya todos hayan pagado por lo que nos hicieron  además necesito estar seguro que tendré el perdón de mi niña por eso estas horas las aprovecharé para ganar terreno.

Se que se levanta tarde así que iré a verla un momento como en estos días a través de la ventana de su habitación, se que parece actitud de psicópata acosador pero ha sido la única forma de verla sin que ella me rechace o el patancito este a su alrededor, voy de camino al jardín para poder subir cuando la veo sentada en una de las mesas, sonrió es que se ve hermosa y me armo de valor para ir a hablarle, todo me tiembla y no tengo valor para hacerlo, la observó un momento mientras trato de poner en orden todos mis pensamientos quiero decirle que ya se toda la verdad para que juntos hagamos pagar a esas brujas por lo que le hicieron pero creo que soy yo quien debe de hacerlo, de repente veo como se voltea a verme y todo lo que pude estar pensando ha desaparecido de mi mente, solo me queda acercarme a ella.

Varias veces le digo mi amor y sus ojos me muestran lo mismo que hace años, no sabía que decirle por lo que tome el camino más seguro y fue hablarle de Vico y así pasamos horas sin darnos cuenta hasta que su estómago hizo ruidos demostrando que tenía hambre me ofrecí a acompañarla para pasar aunque sea unos minutos más con ella, para mi sorpresa tanto el patancito como la niña se van del pueblo al menos unas horas que por supuesto aprovecharé y aunque mi instinto me diga que golpee al idiota este por besar a mi niña  me contengo y soy más listo y aprovecho esto para invitarla a desayunar fuera así le evito el tener que estar con Alma.

Afortunadamente acepta mi invitación y por primera vez en ocho años salimos solos los dos juntos como en los viejos tiempos, me obligo a mi mismo el ver el camino ya que lo único que deseo es verla todo el tiempo, ver su sonrisa, sus ojos cuando brillan por la emoción de algo, muero por tocar su piel, besar sus labios.

Decido llevarla a uno de los pocos restaurantes que aún existen de la época en que fuimos pareja, los dos solíamos venir aquí a comer y siempre dijimos que era el mejor lugar de waffles y helados que existía.

Tiene las mismas diez mesas al lado de la ventana y la barra enfrente, los mismos reservados que te alejaban de miradas curiosas, los mismos posters de heladería y de una vieja película, una rocola y sus meseras siguen vistiendo igual que hace ocho años vestidos rosados y delantales blancos, pelo suelto y una cofea blanca sobre la cabeza.

La ayudó a bajarse del auto y cuando está fuera su risa es música a mis oídos

Rob: es en serio?? Aun existe este lugar??

Diego: y sigue idéntico, por aquí no ha pasado el tiempo lo único que cambió fueron las meseras, oye, tu vienes vestida hsciendo juego con ellas sino estuvieras con muletas fácilmente te confundían

Rob: no es cierto -me saca la lengua y me da un manotazo- aun preparan los waffles con helado?

Diego: y mejoraron la receta

Rob: no lo creo, eran los mejores no pudieron superar eso

Diego: claro que si, entremos para que lo compruebes -le ayudo a abrir la puerta del lugar y entramos, una de las meseras nos lleva a la mesa, es linda pero mi Robi es mucho más y solo tengo ojos para ella, ordenamos nuestro desayuno lo mismo que hace ocho años, volteo a ver a mi niña y ella me esta sonriendo - que? Tengo monos en la cara o es que soy irresistible

Rob: no hay monos y mucho menos eres irresistible, pero no puedo creer que recuerdes mis sabores favoritos

Diego: y recuerdo mucho más, como la forma en la que sonríes cuando ves a las personas alimentar a las aves, o tu risa al perseguir a alguno de los animales de la hacienda, la forma en la que tu cabello se agitaba con el viento cuando cabalgabas, tus pucheros cuando no salían las cosas como querías o cuando tus hermanos no te hacían caso, recuerdo tu adicción a las series de investigación criminal, o la forma en que te mordidas el labio cuando estabas estudiando, también recuerdo que te gustaba sentarte a ver como todos trabajaban en la hacienda y decías que nunca querías salir de aquí. Pero más recuerdo tu mirada cuando hacíamos el amor, tus sonidos y gemidos que aumentaban mi placer, la forma tan especial que tenías para verme, la forma en que susurrabas mi nombre al llegar a tu placer

Rob: y también recuerdas como me trataste y me enviaste al demonio cuando te enteraste que tenía varios amantes

Diego: lastimosamente si, lo recuerdo perfectamente y no sabes lo arrepentido que estoy y se que no tengo palabras ni actos para pedirte que me perdones es más se que no merezco ni tu perdón -quiero decirle tantas cosas pero la mesera ha decidido interrumpir justo en ese momento, nos entrega el pedido y los dos nos quedamos en silencio mientras comemos -

Rob: por que??

Diego: por que que??

Rob: por que hasta ahora me lo pides hasta ahora?? Que te hizo cambiar de opinión con respecto a mi, recuerdo perfectamente que me dijiste que jamás me pedirías disculpas que cuando llegara ese día el cielo se abriría

Diego: yo estaba equivocado, no debí tratarte como lo hice ni siquiera debí de escuchar y creer todo lo que dijeron eres el amor de mi vida y debi protegerte y evitar lastimarte y que te lastimaran debi de hacer tantas cosas para que tu nunca salieras de tu hogar y siguieras viviendo con tu familia. Debí darme cuenta de que sin ti no podría ser feliz porque creeme he sido el hombre más infeliz de este mundo. Tu no sabes todo lo que tuve que vivir y se que no se compara con lo que tu viviste, quiero que me acompañes a un lugar

Rob: no

Diego: tienes miedo?

Rob: no pero no quiero ir

Diego: por favor vamos mi amor, quiero enseñarte algo - pido la cuenta y espero a que ella se decida, veo su inseguridad en sus ojos pero su curiosidad es más por lo que termina aceptando acompañarme, subimos a la camioneta y la llevó a aque lugar en donde tantas veces soñamos con formar una familia-

Gracias a todas las que leen esta historia, por sus votos y comentarios.

@Joelandrmswife muchas felicidades, espero te la hayas pasado increíble y que cumplas muchos años más.