|| Tan Cerca Y Tan Lejos || Christopher y Tú || Terminada ||

💫4: No la estoy mirando.

Narra Christopher :

Continúo golpeando mi cabeza en la pared mientras mi madre sigue hablando por teléfono, para confirmar mi llegada a la preparatoria.

Eso también es algo que no me gusta mucho, debido a que no podré hacer amigos, y creo que apenas alcanzaré a ir a una fiesta, o no vaya a ninguna porque ya están a mitad del año y yo llegaré como un bicho raro.

Otra vez.

-Se lo agradezco mucho, tenga un buen día, adiós.

Suelto un soplido y bajo mi gorra hasta cubrir mis ojos porque su sonrisa significa buenas noticias. Hubiera deseado que no me acepten porque de todas maneras no voy a quedarme permanentemente en esta ciudad.

-Todo listo para mañana, el director dijo que va a recibirte pero con una condición.

-No creo que pueda ser peor que esto.

Mi madre resopla, pero no me dice nada.

-Dijo que el viernes van a tomarte una prueba de diagnóstico de todas las materias. Tendrás que quedarte luego de clases. Asi que ahora deja de estar como loco golpeando tu cabeza -quita la gorra de mis ojos -Y ve a estudiar.

-¿Puedo hacerlo después? -pregunto -Al menos quiero conocer un poco el barrio que será mi infierno por unos meses.

-Pero regresa pronto, el camión de mudanza no debe tardar. Ahora iré a sacar a tu hermano de su habitación, porque también tengo que inscribirlo.

Me despido de ella y salgo de la casa para tomar mi patineta que he dejado bajo el porche, asi que la coloco en el suelo para subir a esta, y empezar a observar el lugar.

Antes que nada, tengo un dolor increíblemente legendario en mi espalda debido a mi mala noche de ayer, gracias la maldita pérdida del camión de mudanza.

Si haber encontrado un ratón muerto fue algo feo, dormir casi cerca a él, fue peor.

Fue horrendo.

Desagradable también.

Para ser sincero, el vencindario es algo similar a los otros vecindarios en los que he vivido en anteriores ciudades.

Tiene casi todo parecido: niños jugando, entrega del correo con el típico cartero con cara de lento, mascotas en el jardín delantero, señoras rejando sus flores y obviamente la vecina curiosa de enfrente de mi casa.

Niego con mi cabeza cuando paso frente a su casa con mi patineta y cruzó en la esquina.

La manzana no es muy grande, porque a unas cuadras puedo ver la via que me lleva al centro de la ciudad, y supongo que a la preparatoria también.

Cruzo de nuevo, bajando de la acera saltando con la patineta, y opto por volver a casa porque ya no encuentro nada divertido que hacer.

Vuelvo a pasar en frente de aquella vecina curiosa, pero giro mi rostro hasta aquella gran ventana, que me deja ver a una chica lanzar una bola de papel.

-¡Christopher, cuidado! -exclama mi madre logrando asustarme, asi que por reacción me hago a un lado cayendo al césped de forma torpe y humillante; salvando mi cabeza de haber sido golpeada con aquel mueble que mi hermano está cargando.

Maravilloso, casi muero.

-¿Estás bien cariño? -cuestiona mi madre acercándose asi que asiento poniéndome de pie mientras sacudo mi ropa, y reviro los ojos cuando aquella vecina se está riendo de mí.-Debes tener más cuidado

-Lo sé. No lo vi.

-¿Encontraste algo interesante en el piso, hermanito? -pregunta mi hermano obviamente burlándose mientras toma una mesa de centro.

-Cállate, Jonathan. Te atravesaste en mi camino cabezón -respondo -Si quieres matarme, solo dímelo.

-No fue mi culpa que estes despistado. Ayúdame, no podré bajar todo eso solo. Y mamá tampoco puede.

-Si, si, ya voy, ya voy

Murmuro tomando un mueble, cuando mi hermano ha regresado; y por impulso miro nuevamente a la ventana, pero ella ya no se encuentra en ese lugar.

-¡¿Puedes moverte?!, mis brazos ya no soportan el peso de esta cosa -dice mi hermano, asi que reacciono empezando a caminar de espaldas. Tratando de caer y morir aplastado por un mueble.-Te quejas de la vecina curiosa de enfrente, y tú eres otro, al mirar a la vecina.

-No estoy curioseando. Y no la estoy mirando.

-Entonces te caíste porque es una costumbre tuya, distraerse.

-Quizá. Idiota -murmuro lo último.