30 Dɪ́ᴀs Sɪᴇɴᴅᴏ Pᴀʀᴇᴊᴀ ♡︎

« Especial;; ¡Mejores amigos!»

Luka & Marc

— E-Es que no lo entiendes. El es muy lindo, es guapo, es talentoso, es el chico perfecto. — Hablaba aquel joven aspirante a escritor.

— Ya ya, lo se. Te gusta mucho entonces, ¿no? Dime ¿le hablas? ¿Es tu amigo? — Pregunto Luka.

Luka Couffine y Marc Anciel se conocieron por mera casualidad, han extraña casualidad a decir verdad.

Ambos recordaban perfectamente bien ese día, era un viernes después de clase, Marc había decidido pasar al centro comercial, le faltaba su muy preciado esmalte negro para uñas.

Luka había acompañado a su hermana de igual manera al centro comercial, pues se acercaba el cumpleaños de Rose y quería regalarle algo especial. Era su mejor amiga y amor platónico.

Mientras Juleka entraba a una tienda por el regalo deseado, Luka entro a otra.

Una de esas tiendas para chicas, de maquillaje y accesorios.
No era la primera vez que iba ahí, frecuentaba esos lugares, y nadie "sospechaba" pues creían que seria para la chica de puntas violetas.

Claramente Luka era el centro de atención entre las chicas de ahí, había que aceptarlo, Luka es muy atractivo.

Ese día ambos coincidieron, ambos estaban en el área de los esmaltes.

Entre intercambio de palabras tuvieron una agradable conversación de 15 minutos.

La de ojos colorados volvió, Juleka conocía a Marc, así que le presento como se debía a su hermano.
Terminaron intercambiado números y después cada uno tomo su camino.

Mensajeaban constantemente, y con el paso del tiempo Marc veía a Luka como un mejor amigo, un confidente o su hermano mayor incluso.

Cada que podían solían verse, ya sea para ponerse al tanto del tiempo o cosas nuevas que les ocurrían. Como ahora.

Ambos en la habitación del mayor, sentados en el suelo sobre algunas almohadas, Luka se encargaba de pintas las uñas del escritor, quien le contaba de su mas reciente y profundo enamoramiento, un pelirrojo de orbes azules cual agua de océano, con un gran talento para el dibujo y una personalidad única.

— No le hablo... — Admitió Anciel, un suspiro profundo y entrecortado escapo de su boca. — E-El... Es demasiado para mi, es alguien increíble... ¡Y-Yo nunca me había sentido así! — Exclamo, casi como si se lamentara. El de ojos celeste le miro de mala manera.

— Dos cosas, Marc. — Hablo el guitarrista — Uno... No muevas la mano, por favor— Dijo intentando sonar calmado, no quería estresarse por eso, logrando sacar una risa de parte de su contrario. — Y dos, eres un chico increíble, nunca te hagas sentir menos frente a alguien mas, es lo mismo que le digo a Jule, eres genial tal como eres. — Afirmo, el oji-verde sonrió confortado, asintiendo ante sus palabras.

— Gracias... — Murmuró Marc. — Su nombre es Nathaniel. — Dijo por fin.

— Oh, se quien es. A venido aquí por proyectos con mi hermana — Aclaró. — Entonces ¿ese pelirrojo te gusta? Yo enserio creo que deberías hablar con el. — Afirmo confiado. — No se, siento que podrían llevarse bien. ¿Y quien sabe? Hasta podrías terminar casándote con el. — Aclaro el de puntas celestes, sonriendo de manera ligeramente ladeada.

El simple hecho de pensar en casarse, e incluso formar una familia con el artista, hicieron que el azabache formara una pequeña sonrisa tonta en sus labios, acompañado de un leve pero notorio rubor en sus mejillas.

— Marc... Deja de mover la mano. — Volvió a quejarse el mayor.

— Ah si si. Perdón. Sabes... Seguiré tu consejo... Ahora... ¿Por que no me hablas de la chica que te gusta? — Aclaro Marc, así era siempre, primero uno contaba todo de su semana -pues solían verse una vez a la semana por lo regular- y después el otro hablaba.

— Bueno... Ella es muy linda, es tierna, carismática, amable, pero... Creo que gusta de alguien mas. —

Marc y Luka eran mejores amigos. Aunque no lo pareciera.
No tenían gusto en común, y había una diferencia de edad entre ambos, pero siempre tenían algo de que hablar, y la confianza que tenían con el otro era única.

♦♦♦

Parte uno;; Marc y Luka.

Parte dos;; Nathaniel y Alix.