Extraña maldición

CAPITULO 11

Comimos entre risas, por parte nuestra porque mi hermano permanecia en silencio y escuchando. Después de comer decidimos jugar un mono-poli. Las cinco. Indira se tenia que ir, no me dijo el motivo solo que a las cinco dijo que iba a llegar tarde y se marchó corriendo de mi casa. Pues nos volvemos a quedar solos, mi hermano, mi pijama verde clarito con una gran ranita en medio y yo. Suena el móvil. “saca la basura gracia, que anoche no la sacaste” que pereza. Me dirigí a la cocina cogí la bolsa y salí a la calle. Tengo el contenedor al lado de mi casa así que no voy cambiarme el pijama para andar dos pasos. Arroje la basura al gran cubo. ¡Joder odio tirar la basura! Me fije en que el día estaba soleado, ¿tengo que estar un sábado metida en casa? Hace frío pero se aguanta y encima hace un poco de sol, ¿porque no salir? Se me ocurrió que podría dar una vuelta con mi hermano que hace ya que no sale. Cuando entre se lo propuse, el acepto después de un rato insistiendo aceptó. Los dos nos arreglamos y salimos.

-¿has cogido las llaves? -preguntó tras a ver cerrado la puerta

-no, ¿y tu?

-no

En ese momento vi a mi hermano muy serio y me alarmé, creí que nos quedábamos en la calle hasta que mi madre viniera. Enseguida mi hermano sonrió con picardía. Broma. Íbamos caminando por la calle, hablábamos del instituto, de como le iba a el y a mi, le pregunte que quien le gustaba y con mucho esfuerzo me dijo que si, que había alguien.

-¿que si? ¿quien es?

-no te lo voy a decir Gracia

-venga, ¿no se lo vas a contar a tu hermanita?

-no

-veng.....

en ese momento escuche un piano, me que quieta y mi hermano me preguntaba que me pasaba pero yo solo le hacia un gesto de silencio, la melodía venia de una de estas casa, de esa calle, empecé a caminar poco a poco para dar con la casa de la que venia ese maravilloso sonido. De repente el piano se paró y yo me pare también, pero no tardo en volver a sonar, casi al final de la calle di con la casa de la que venia el sonido, me coloque al lado de una ventana, escuchando la melodía, no sabia de quien se trataba pero era tan bonita que era imposible resistirse a escucharla. La musica se paró y se escucharon papeles moviéndose no tardo mucho cuando empezó a sonar otra vez, pero ahora no solo era un piano, era una voz que lo acompañaba.

“cuenta bien cada vez que te miro,

cada vez que, te sufro en silencio

Dime si, si soy yo tu romeo,

quien más te gusta de

todo este cuento

y yo no se si lo piensas

en serio

que no habrá gloria, sin

sufrimiento

Esta bien no me

cuentes historias,

entiendo todo pero no

quiero...”

me quede estupefacta, como una piedra, era la canción mas bonita que había escuchado nunca y eso que no la e escuchado entera, que voz que forma de tocar el piano, ¡es increíble! Hasta mi hermano se había quedado alucinado de lo bien que cantaba aquel muchacho, ¿quien será? El piano no tardo otra vez en sonar y otra vez se escuchaba esta voz tan bonita saque el móvil y rápidamente lo grabé todo, y nos alejamos mi hermano y yo para seguir con el paseo. No Paraba de hablar de esa musica, cuando algo me ha gustado soy incapaz de dejar de hablar de eso, como aquella ve que fui al bufe libre que pusieron allí al lado del erosky, gustó tanto comer allí que estuve hablando de el y dando la vara para que me llevaran otra vez, pues ahora quiero escuchar esa canción entera y conocer a quien la canta, desde luego seria todo un ídolo para mi. Se me ocurrió una idea, ¿porque no enviarle lo grabado a Indira? Seguro a ella también le gusta, cogí el móvil y le pregunte si estaba libre, me dijo que si y pensé que seria mejor que se lo enseñara en persona, le dije que estaba en plaza del pino y que viniera ¡YA! Ella accedió y en mas o menos diez minutos ya estaba en PP

-¡tia no sabes lo que me ha pasado!

-espero que sea importante

-mira escucha -dije a la vez que ponía el audio -.iba paseando con mi hermano y venia de una casa me quede escuchando el piano y de buenas a primeras empezó a cantar y me quede como estas tu ahora

-pues si que canta bien el jodio, ¿no?

Propuse de ir otra vez, a ver si seguía cantando, Indira acepto, pero mi hermano se negó y se marcho para casa, nosotras nos encogimos de hombros y fuimos a paso ligero hacia aquella casa. Llagamos en menos de cinco minutos, y si efectivamente el piano continuaba sonando, y el continuaba cantando, ambas sacamos los móviles y comenzamos a grabar...

“Esta extraña maldición

Esta arrancándome el

corazón

me esta llevando poco a

poco,

donde estamos tu y yo

No se si sera por amor,

por sentir miedo como

yo

o bien por ser te sincero

esta es mi extraña

maldición

es mi extraña maldición...”

Era increíble, nos sonaba muchísimo la voz, de alguien muy conocido pero al estar cantando no lo distinguíamos puede que sea alguien conocido, o alguien totalmente desconocido, lo único que sabíamos era que cantaba súper bien y que sea quien sea lo íbamos a descubrir, pero no hoy.

Íbamos por la calle tarareando la canción, era preciosa incluso grabada, ya era una necesidad escucharlo.

Cuando llegamos a mi casa Indira se quedo en el salo escuchando una y otra vez lo que teníamos grabado mientras yo subí a la planta de arriba para ir al baño, pase por al lado del cuarto de mi hermano y escuche como un llanto, ¿estaba llorando? Abrí la puerta de su habitación y efectivamente estaba llorando.

-¿que te pasa Ángel? Dije sentándome a su lado y pasándole el brazo el me miro se seco las lágrimas y sonrió

-nada

-entonces porque lloras

-nada

-¿cuéntamelo no?

-que no me pasa nada

-¿no sera por esa muchacha que te gusta?

-que no me pasa nada joder, que te vallas

sin decir nada mas salí de su cuarto, entre al baño y después baje al salón donde me esperaba Indira.