Todos los personajes pertenecen a la obra de Sailor Moon e Naoko Takeuchi.
Esta historia la escribí hace años, todo lo escrito es producto de mi imaginación.
Contiene lemon fuerte.
En mi mano tenia un relicario en forma del planeta tierra con la foto de Serena. Me sonreí. El teléfono llama, pero nadie atiende. "Por fin pude cumplir mi mayor deseo, es tener sexo con mi mejor amiga Serena Tsukino. Menos mal que ella no lo sabe. Reconozco que estoy enamorado de ella, desde el primer de clases del colegio primario, cuando la vi llorando porque Rubeus le robo sus caramelos, yo se los recupere y me beso en mi mejilla. A pesar de que estoy enamorado de ella desde el primer momento en que la vi, me hubiera gustado haber sido su primer amante, para si, poder ser el hombre de su vida ", suspiro "¿Qué voy hacer?, te amo, Serena, si tan solo me hubieras correspondido. Seria capaz de romper mi casamiento con Beryl. Pensar que mi amigo Andrew, dice que esta conmigo por mi herencia. Era imposible que lo sepa. No lo sabe Serena que nos conocemos del primario. Solo lo sabemos él, Rei y yo. Serena como la amo. Es la luz de mi ojos. Ella alumbra mi vida, da alegría a mi corazón. Cada vez que la veo siento mariposas en le estomago. Si un hombre la mira veo todo rojo, como si fuera un toro que clava la vista en la bandera roja. Siento que yo soy soy dueño y nadie más que yo puede tocar. Cuando se puso de novia con Seiya fue los peores años de mi vida, verla abrazada a él, sus sonrisas y miradas, sentía que me clavaba un puñal en mi corazón. Me encantaría ser su marido, pero me prometi que solo me casaría con la mujer que me diera su virginidad". Toc, toc, toc. Golpean la puerta.
-Darien, un tal señor llamado Malachite, te busca.
-Gracias, serena. No me esperes esta noche.
Enconge de hombros, saliendo de la habitación.-Si, Rei. Pero no creas lo que dice esa bruja. Necesita que la vacuna de tu hermano. El puritano de tu primo.
-Ja, ja, ja. Bueno nos vemos mañana a la tarde.
-Hasta mañana.
Me tiro a la cama quedando dormida al instante.- Ay... ay... ay...
Era el grito de una mujer, que gime de dolor. Oigo llantos de muchas mujeres. Trato de desatar el nudo sobre mis muñecas, más no puedo. La oscuridad me envuelve dándome escalofrío, pasa el tiempo, cansada de luchar me dejó caer al frío piso de mi cautiverio. No sé en que momento me quedo dormida, pero hay silencio.
Mi corazón comienza a latir fuerte como si quisiera salir de mi cuerpo, el miedo se adueña de mi.
-ay...- algo agarra mi tobillo derecho arrastrándome por el suelo boca abajo. Retorciendo trato de liberar, pero no puedo. Al detenerse mi cara se golpea. Mis manos atadas me impiden levantarme.
Al tratar de arrodillarme siento una presencia entre mis piernas a la altura de mis muslos.
-ay...-grito de dolor, cuando siento algo duro entra en mi interior de un golpe. Agarra mis caderas levantándolas un poco más del piso, con un golpe seco empujó algo duro que llegue a sentir en el cuello de mi trompa de falopio esa estocada.
-ay...-grite como un alarido, mis lágrimas caían sobre mis rostro de dolor. Me taladra de una manera tan salvaje que cada va más rápido, llegando a notar que su miembro se hundía más en mi. Lloraba y gritaba de dolor. El aceleró el ritmo. Se detiene sacando su tranca, para meterla de una estocada tan fuerte que pegue un grito de dolor, siento como me llena el fondo de la matriz. De mi interior salía una catarata de líquidos. No sé cuánto tiempo me estuvo bombeando pero cuando salió de mi, quede tirada boca abajo en el frío piso, me había destrozado. Exhaustiva, llena de transpiración trato con mis últimas fuerzas levantarme pero mis piernas temblorosas no me responden y encima mis manos siguen atadas. Algo agarra de nuevo mis pies una manos grandes. Que me arrastra como si nada, aparecía una pluma que volaba con el viento. Cuando mis pies caen al suelo. Con un susurró digo:
-por favor suelta me. No te denunció. No esto es un sueño voy a despertar ya.
Trato de abrir los ojos, pero sigo con la venda puesta. Algo pasa alrededor de mis manos atadas, me levantan por el aire quedando colgada, como si fuera una bolsa de boxeo.
Una mano comienza acariciar un pecho suavemente, saliendo de mi un suspiro, una boca succiona el otro. Me arranca gemidos de placer siento como en mi interior sale mis jugos, unos dedos comienza a darle placer en mi perla provoca unos escalofríos en todo mi cuerpo, puedo oír como nuestros gemidos resonaban con eco en donde estaba. Para. Colgada en el aire mis brazos ya empezaba a doler. Una mano recorrer mi pierna derecha del talón hasta la cadera donde se detiene. Levanta la pierna. Mi corazón late fuerte como los tambores, siento algo suave cerca de mi entrepiernas.
-Ay...-grito de dolor.
Al sentir algo duro en mi interior. Quedándose unos segundos adentro mío.
Sale de mi sin soltar mi pierna derecha, quedan mi otra pierna en el aire inerte. Con su mano libre magreo fuertemente mi pecho izquierdo. Entonces su mano derecha me empuja hacia él que con un golpe certero me lo clavo su miembro duro como garrote. Me taladra sin compasión, mis gritos de dolor le provocaba que me diera más fuerte, siento como su liquido caliente se derrama en mi interior llevándome toda. Con su última estocada me provoca una corriente eléctrica en todo mi cuerpo. Suelta mi pierna derecha que cae inerte, de mi interior sale nuestros jugos. Cayendo de mi interior pasando por mis piernas hasta el suelo. Mi cabeza cae rendida por cansancio y dolor.
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El Matasfan
FanfictionSerena Tsukino una simple empleada, por las noches tiene pesadillas con el Matasfan, y encima el amor de su vida se casa con otra.