ELEVEN

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Ando inspirada hoy, porque estoy escuchando a Marc Anthony en viña y me encanta 💕

★★★★★★★★★

— ¿Qué pasó?

Estábamos en su patio trasero, yo trataba de no hacer demasiado contacto visual porque me ponía cada vez más nerviosa. Pero estaba decida y cuando me decidía, lo hacía.

— No sé cómo decir esto.— ahora sí lo miré a los ojos.— Yo de verdad que he intentado hacerlo hace tiempo pero las palabras culiás no me salen.

— Marcela, habla ya. Que me preocupas.

— Me gustai

Sentí que un gran peso encima mío se iba, sentí que por fin había soltado lo que tenía atascado en la boca y en el alma.

— De hecho no solo me gustai.— me armé más de valor.— me encantai, estoy enamorada de ti Isaías, estoy enamorada de ti hace más de diez años.

Me quedó mirando como por dos minutos, su cara cambiaba a una de asombro a una de «no te creo» cada cinco segundos.

— Yo... No sé qué decir.

¿Me estai hueando? Le hice la media declaración, le dije que estaba enamorada de él hace 10 años, me armé de valor para contarle que estaba enamorada después de guardarme tantos años lo que sentía. Y me dice "no sé qué decir".

— Claro, entiendo, comprendo.— sonreí cínicamente mientras procesaba lo que iba a decirle.— No sabes que decir, de hecho nunca sabes que decir ahueonao.

Me estaba poniendo morá del enojo, tantos sentimientos guardados por fin estaban saliendo a flote.

— Chelita, es que volví con la Michi y...— cortó la palabra por qué era obvio el porque no me podía dar una respuesta razonable.

Lo que más rabia me dió de todo es que era un cobarde de  mierda. Entendía que no lo podía obligar a quererme, jamás lo obligaría a algo que el no quiere. Pero era un cobarde, porque después de escuchar que estaba enamorada de él hace diez años, me dice «no sé que decir». Y más encima se escuda con que volvió con su ex, en vez de rechazarme en la cara. En vez de decirme, no me gustai.

Y de pasá me dice Chelita que me carga que me digan así por la reconchatumare.

— Sabí que cobarde culiao.— lo miré con rabia.— métete a tu Michi y tus chocolates favoritos por la raja, por el hoyo o mejor, por dónde más te duela la hueá. Pensé que me había enamorado de un hueón bacán, cariñoso, sincero. Pero me doy cuenta que estaba cegada, cegada por un hueón cobarde que ni siquiera es capaz de rechazar correctamente.

Le tiré los chocolates en la pichula y me di vuelta con un nudo en la garganta, no iba a llorar en frente de él ni mucho menos de su polola culiá.

Respiré profundamente mientras salía de la casa y llegaba a la calle. Miré al cielo y me pregunté que había hecho mal para haberme enamorado de un hueón así por más de diez años. Por amarlo tan incondicionalmente y que me pagará así.

Sabía que no había que dar para recibir, pero mínimo un rechazo digno de diez años de haber estado enamorada de él. Haría lo que siempre odié, sería perra. Si, perra. Pero no con los demás, solo con el. No sé merecía mi amor y mi admiración, no más.

Me encontraba con los cabros de la banda y la Maca tomando en la casa del Mauri mientras escuchábamos canciones de Reik.

Voy a olvidarte...
Voy a borrarte...
Ya no pierdo más mi tiempo, ya no pienso estar sufriendo, desviviendome por ti el ser perfecto... Voy a olvidarte...

Me tomé la chela culiá al seco y la dejé en la mesa con fuerza llamando la atención de los cabros. Ya me encontraba curá, me importaba un pico, nunca me curaba y hoy necesita olvidarme un poco del Isaías, pero creo que el copete no ayudaba mucho, menos las canciones de Reik.

— Ya Chela, ¡Basta!, Nada más de tomar.— intentó quitarme mi lata pero no la dejé.

— Déjame por favor, quiero tomar para olvidar a la cagá de tu hermano, déjame tomar por esta vez Maca.

La Maca increíblemente me dejó, creo que lo dije con tono realmente triste porque la Maca nunca me dejaría tomar más de la cuenta.

Había pensado toda la noche, aunque estuviera copetiá, podía pensar aún. Decidí tratar de olvidar al Isaías, sabía que no era algo que puedese decidir, el corazón manda, pero iba a intentarlo. Dejaría de ir tanto a la casa de la Maca, iría solo lo necesario, no miraría, ni acosaría más al Isaías. Era lo mejor, para el y para mí.

★★★
Sinceramente me dió mucha pena hacer este capítulo, creo que de alguna forma me siento identificada en mis tiempos en los que me gustaba un culiao.

Espero que les haya gustado y hayan llorado más que la perra.

By: ChicaOMGat 💕

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