CAPÍTULO 3

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Mi nombre es J, y soy el mafioso más poderoso de toda Europa. Nadie se atreve a faltarme el respeto. Y sino me creen, preguntarselo a el.

- no no no!.por favor ya no!!!- suplicó el maldito idiota que intento burlarse de mi.

Estaba atado en una silla de manos y pies, mientras me desquitaba una y otra vez con su rostro.

-donde está mi maldita mercancia?!!!- le grité.

Estos tipo me hacían hervir la sangre.

-yo.. yo....- intento hablar mientras sus manos temblaban del miedo - mis hombres la tienen,déjame hablar con ellos,yo te devolveré todo...- empezó a llorar.

Típico.

Todos lloran suplicando por sus vidas.... o por la vida de sus familias.... pero una de las cosas que me caracteriza, es que no soy débil, me importa una mierda sus vidas. Ellos me traicionaron y con su sangre me la pagarán.

-señor....- se acercó uno de mis hombres.

Lo mire.

-mas te vale que sea algo importante....- le dije apretando mi puño lleno de la sangre... del traidor.

-es su novia, señor- me tendió el celular.

Tome el celular tapando el parlante.

-termina con él y trae mi mecancia- le ordene, señalando con mi cabeza al idiota.

El grandulon asintió mientras se acercaba al pobre idiota que no paraban de llorar. Ya era demasiado tarde para suplicar por su vida.

Si hay otra cosa que me caracteriza, es que no perdono.

- no! Por favor no!!- empezó a suplicar el idiota mientras el grandulon sacaba su arma.

-hola?- conteste la llamada.

-amor! Donde estas??!!!- habló la rubia del otro lado.

-estoy trabajando cariño....- le dije algo cortante.

Es que odio que me molesten cuando estoy trabajando. Odio que me desobedezcan. Odio que roben mi maldita mercancia.

-amor... mi padre quiere conocerte....- informó.

Suspire.

Lo único que me faltaba.

-cuando?- le pregunté, sin mucha importancia.

-tú sólo dime cuando puedes...- respondió.

- de acuerdo,yo te aviso- afirme.

Y Colgué.

Mi novia,era sólo una pase para expandir mi poder. Ella estaba muerta por mi y yo... bueno,tiene buen cuerpo, lindas piernas...

-señor....- me interrumpió otra vez.

Lo mire.

- El tipo no quiere morirse tan fácilmente....- informó

Suspire cansado.... tenía los asesinos y guardaespaldas más idiotas del mundo!.

Saque mi arma y le dispare justo en la cabeza al idiota atado.

- no era tan difícil...- le dije.

Y salí del galpón abandonado. Aquí la policía no estorbara con sus estúpidas leyes.

Marque el número de "8", uno de mis mejores amigos.

Nosotros nos guiamos por números y letras, para mantener nuestra identidad lo más protegida posible.

CAERÁS, MI MAFIOSADonde viven las historias. Descúbrelo ahora