Eres algo más que mi droga

Capítulo 1. Me das tranquilidad

Ella permanecía dormida entre las sedosas sábanas blancas, testigos de una plena noche desenfrenada de pasión. Su cuerpo pálido y desnudo se revolvía por todo el colchón, bajo la atenta mirada de un peli rojo que la observaba sentado en el borde de la cama. 

La muchacha parpadeó un par de veces para acostumbrarse a la claridad de un nuevo día. Apartó los mechones rosados de su cara que cubrían sus brillantes ojos jade y se quedó mirando la musculosa espalda del muchacho, que en ese momento terminaba de vestirse. El joven se volteó y se tumbó a la par de la muchacha para luego plantarle un intenso beso de su boca. Ella respondió rodeándolo con uno de sus brazos para acercarlo más a ella, pero este ya había roto el contacto. 

-Hum... Tengo que irme... - pronunció el joven. 

-Otra vez... - susurró con aire de resignación la muchacha. 

-Tenemos que ensayar con la banda o la actuación de esta noche será un fracaso - intentó disculparse el peli rojo mientras acariciaba una mejilla de la muchacha con delicadeza. 

-Siempre tienes ensayo con la banda... -  protestó la joven apartando la mano del muchacho de su cara. - Solo estamos juntos por las noches... 

-Lo sé y lo siento... - el peli rojo se levantó y se encaminó a la puerta - ¿Vendrás esta noche a verme tocar? - la joven ladeó la cabeza un tanto enfadada - Sakura... 

-Me lo pensaré... - tras esto el joven desapareció con el sonido de la puerta al cerrarse. 

Dos muchachas permanecían en la misma habitación esperando a que su amiga terminara de arreglarse. 

-Sakura, ¡cómo no te des prisa no llegaremos nunca! - pronunció una de ellas. Ino Yamanaka, una de las mejores amigas de la oji jade. Vestía atrevidamente, como era de habitual en ella, con una mini falda blanca, y un top dorado con alguna lentejuela salpicada por la tela, el conjunto lo terminaba con unos zapatos de tacón alto. De seguro, como siempre, Ino se acabaría llevando otro rollo de una noche a la cama, pensó para sí Sakura, cuando vio entrar a su amiga por la puerta. De eso hacía como hace una hora. 

-Ya voy, ya voy - decía mientras la peli rosa salía del baño ya completamente arreglada. Al contrario que Ino, Sakura siempre vestía más sport. Llevaba unos shorts vaqueros rasgados y una camiseta de tirantes negra ceñida al cuerpo que remarcaba lo mejor de su figura. Mientras se calzaba unas cuñas negras, le echaba el sermón de siempre a su amiga peli azul - Hinata... Es una noche de fiesta, ¿por qué no te pones un vestido corto o un short?  Si quieres te presto yo algo. 

-Gracias Sakura-chan, pero estoy más cómoda así - pronunció con voz baja y sonrojada. Llevaba unos pantalones vaqueros que le llegaban a la altura del tobillo, la blusa blanca y la americana azul marino le daba un toque muy formal.  

-Cariño... Así nunca conseguirás que un chico se acerque a ti... - contestó la peli rubia. 

-Déjala Ino, no podemos obligarla. - miro el reloj que estaba colgado en la pared. Marcaba las 20:45. - Vámonos ya. 

El olor a bebida y a humo estaba presente en el ambiente. Montones de jóvenes se reunían allí todos los viernes noche. Unos para simplemente para pasar un buen rato, otros para pillarse una borrachera y algunos nuevos que se pasaban por allí para integrarse. 

En cuanto entraron en el Soho Pub, Ino arrastró a Hinata hacia la barra para pedir un par de chupitos. Mientras tanto Sakura se escurrió entre la gente hacia una puerta en la que ponía "solo personal autorizado". Pero ella estaba más que autorizada, pues allí se encontraba su "novio", sí, entre comillas, porque ni la misma oji jade a estas alturas, después de casi dos años acostándose con Sasori, todavía no tenía claro que era lo que había entre ellos dos.