𝓑𝓪𝓭 𝓑𝓸𝔂𝓯𝓻𝓲𝓮𝓷𝓭 [Freddedy]

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Tus amigos te dicen que me dejes porque estoy loco.

Era viernes en la noche.

Freddy estaba en una sala con los demás "animatrónicos", todos tocando sus instrumentos con pasión, sí, incluso Fox con su triángulo. Y es que el castaño continuaba en la banda que Chica había creado en la preparatoria.

Todos sabían que ahora que estaban en la universidad, tenían vidas ocupadas y diferentes, y no estaban tan disponibles como antes para hacer esta clase de actividades, pero llegaron a un acuerdo en que cada mes harían por lo menos 1 ensayo.

A Freddy le encantaba ir porque era una manera de desestresarse y de volver a reunirse con sus amigos.

Ya estaban guardando sus cosas porque ya habían terminado su ensayo, pero había una pequeña espina en el corazón de la única mujer del grupo, que la hizo soltar un comentario totalmente fuera de lugar.

—Freddy, enserio deberías considerar buscar a alguien más.— comentó la chica rubia con terminaciones verdes mientras guardaba su bajo en su estuche correspondiente.

Freddy limpiaba su frente ya que se había llenado un poco de sudor, pero al escuchar a la rubia, se giró para verla a los ojos con una ceja arqueada. —¿Por qué debería?— preguntó confundido el ojiazul guardando de igual manera su guitarra en su estuche.— Soy feliz con Fred.— todos los presentes, excepto Bonnie que ni atención estaba prestando, hicieron una mueca de inconformidad.

—Verás, Fred no es el príncipe azul que piensas... Digo, mereces a alguien mejor. — comentó rascando su nuca con incomodidad.

—Lo que Chica dice es verdad Freddy, en serio que tu eres alguien maravilloso como para estar con alguien... Así...— comentó igualmente el rubio, llamado Golden, con una mueca en el rostro. Él era al que menos me agradaba Fred.

—¿"Así" cómo, chicos?— seguía confundido el castaño.

—Así de hijo de puta.— dijo fríamente el de cabello rojizo ganándose un codazo en su abdomen por parte de Chica y una mala mirada por parte de Golden.

—¡Fox!— reclamó la rubia.

—¿¡Qué!? ¿Me vas a decir que no es verdad?— preguntó exaltado y sobando el área en donde fue golpeado por la muchacha.

—Tiene razón. — comentó el de pelo morado de manera suave y baja, haciendo a Foxy rodar los ojos.

—Bonnie, tu cállate.— escupió el pelirrojo.— Ni siquiera sabes de que estamos hablando, ¿verdad?

—No, la verdad no.— dijo con honestidad, alzando ambos hombros desinteresado.

—¿Ves? Deja te pongo en contexto.— le dijo este, rodeando el cuello del de baja estatura con uno de sus brazos, comenzando a contarle todo mientras que Bonnie se limitaba a poner sus labios en forma de "O".

—El punto Freddy es... — Chica retomó el tema.

—Déjalo.— interrumpió el otro rubio.

—¿Qué? ¡No lo voy a dejar! Chicos vamos, él no es como ustedes creen.— justificó el de ojos azules mientras daba una pequeña sonrisa, como tratando de hacer que los demás entendiesen.

—Freddy, está loco. — ese comentario hizo que la sonrisa del menor decayera. Golden inhaló con fuerza y prosiguió. — Hace cosas imperdonables y tu...

—Golden...— interrumpió Freddy alzando de igual manera su mano en dirección a sus amigos. — No quiero escuchar más. Es mi maldita decisión si estoy con él o no.— dijo el castaño con fastidio en su voz.

El silencio se hizo presente al igual que la incomodidad. La rubia aclaró su garganta y volvió a hablar.

—Como quieras. — se escuchaba el cansancio en su voz.— Solo no queremos verte mal por un...

—Por un idiota como Fred.— volvió a interrumpir el pelirrojo a la rubia al mismo tiempo que mantenía su conversación con Bonnie. Foxy podía llegar a poner atención a más de una cosa cuando era chisme.

—Bien.— dijo Freddy como punto final. Comenzó a dirigirse a la salida con sub guitarra en mano, pero se detuvo en el marco de la puerta y se giró para soltar un último comentario.— Oigan.— todos los demás presentes voltearon a ver al castaño.— Agradezco que se preocupen por mi, pero tienen que confiar en mi.

—¡Confiamos en ti!— respondió Golden con obviedad.— Pero no confiamos en él.— escupió cruzándose de brazos.

Freddy apretó sus puños.— Él no es malo, solo... complicado.— todos, incluido Bonnie, rodaron los ojos. Todos sabían claramente que no era bueno para Freddy, pero a un enamorado no se le puede quitar la venda de los ojos tan fácilmente.

—Solo cuídate.— comentó de repente Bonnie.

Freddy asintió.— Voy a estar bien.— dijo este con seguridad, dándoles una última sonrisa a los de su banda.

—Eso esperamos.— dijo en rubio en un susurro para sí mismo pero que se alcanzó a escuchar.

El castaño salió del aula en donde se encontraban anteriormente los animatrónicos, dejándolos con una mala sensación.

—Chicos, ¿creen que Freddy sepa todo lo que Fred hace a sus espaldas?— preguntó el rubio a sus compañeros.

—Siéndote sincera creo que si se hace la idea pero, pero no quiere aceptarlo...— dijo la rubia.

—Tantos peces en el mar y este se quedó con un mugroso pez de estanque.— dijo Foxy, teniendo un aura filosófica a su alrededor, sorprendiendo a ambos rubios.— ¿Suena cabrón, verdad? Aunque pude haber dicho "Hay más culos que estrellas".

—No tienes remedio.— se quejó la rubia pero con una pequeña sonrisa en su rostro.

Mientras tanto el azabache se encontraba escuchando toda la conversación desde el otro lado de la puerta, sin embargo su novio no lo notó al salir, y obviamente, ninguno de las animatrónicos lo había visto.

El azabache torció la boca y sintió su corazón encogerse, y es que en cierto punto de la vida, esos "animatrónicos" también habían sido sus amigos... Y le dolía que desconfiaran tanto de él. Pero lo peor de todo, es que el muchacho de cabello azabache, sabía que tenían razón. No era bueno para Freddy, pero tampoco lo iba a dejar ir...