Boy Meets Vampire (TERMINADA)

14: Mordida

Yoongi se encontraba observando desde la ventana de la habitación de la mansión. SeokJin habia entrado y se quedó a observarlo. Tenía el libro de anotaciones en su mano y parecía estar concentrado en algo.
– ¿Qué haces Yoongi?—
El susodicho casi se cae de espaldas del susto.
– ¡¡¿Podrías avisar antes de sorprenderme asi?!!–
– Ahh.. Perdón.. Es que estoy aburrido– suspiró.
– ¿Ya hiciste los deberes de la mansión?–
– Si...–
– Ahh...– contestó Yoongi mientras aún seguía escrbiendo. Jin se rindió y salió de la habitación.
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Mientras en Seúl, Jimin se encontraba en la sala de practicas en la escuela. Se acercaba un examen y pensó que debía practicar un poco. Se encontraba solo pues, Taehyung estaba resolviendo unos asuntos personales y Hoseok se encontraba con su padre. Alguien se fue acercando sin que este se diera cuenta, pues se encontraba muy concentrado en su canto. Hasta que sintió unas manos aferrarse al cuello de él sintiendo como era olfateado brúscamente por alguien.
– Argh.. S...suél...te...me– la persona lo soltó arrojándolo al suelo. Jimin comenzo a toser tomando aire.
– Serás idiota por quedarte solo en este lugar Kim Jimin...–
– ¡¿Y tu que rayos haces aquí?!–
– Quería olerte, tu olor a vainilla es exquisito y tu sangre tan pura lo es muchísimo más– Jungkook sonreía cínicamente. Entendía el porqué de cuidar tanto a ese chico proviniendo de Yoongi. Su sangre era bastante extraña y por eso se sentía tan dulce. Jimin estaba aterrado, y se encontraba temblando del miedo en ese momento. Sudaba frío y se había puesto pálido. A Jungkook eso lo extasiaba más y no pudo aguantar. Jimin intentó correr por aquel lugar hasta llegar a la puerta pero esta se encontraba cerrada, volvió a correr para encontrar una salida de emergencia pero no encontró ninguna. Estaba desesperado, acorralado y justo de un vampiro sediento. Jungkook lo había alcanzado fácilmente. Jimin comenzó a llorar mientras Jungkook se encontraba cegado por el inmenso olor de Jimin. Lo tomó de los hombros y acercó el cuello de este hasta su rostro. Los colmillos se hicieron presentes y mordieron la tersa y suave piel del menor. Jimin gritó del dolor mientras Jungkook tomaba de la sangre del chico. Era exquisita, dulce y adictiva. Estuvo bastante rato bebiendo sin darse cuenta que Jimin iba perdiendo el color y la fuerza. Sus labios se habían vuelto blancos y su vista se estaba poniendo borrosa. Lo único que pensaba era que temía que su vida concluyera allí y en lo último que pensó fue en aquel cuaderno de cuero y el último mensaje o nota que había escrito en él:
"Cúanto quisiera volver a verlo. Él me odia pero yo no a él. Extraño cuando al menos podía espiarlo de lejos y podía luego ir a donde Jin Hyung y contarle. Quizás algún día pueda hablarle y que él me dirija las mejores palabras del mundo..."
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Sus ojos se sentían pesados, cuando al fin pudo abrirlos se encontraba en una habitación bastante familiar. Parece que había llegado a la mansión pero ¿Comó?
Alguien que se encontraba dormido allí se despertó de golpe y abrazó bruscamente a Jimin. Este se asustó pero al darse cuenta que era Taehyung correspondió al abrazo.
– ¡¡¡Pensé que morirías allí mismo Jimin!!! ¿Jungkook te hizo eso verdad?– Jimin asintió, a Taehyung se le cristalizaron los ojos.
– Estabas blanco, co...como un muerto...Fuí a buscarte pero observé como Jungkook salía sigilosamente de aquel lugar con su camiseta de color blanco manchada en sangre, así que temí lo peor y entré rápidamente y allí te encontré en una de las sillas inconsciente. Llamé a Jackson pero no contestaba el teléfono así que llamé a SeokJin y casi se desploma al encontrarte así luego de que le haya contado. Quería llevarte al hospital, pero Jin dijo que no era correcto con la gran mordida que tienes en el cuello... –
Jimin se sorprendió por las palabras de su amigo y suspiró.
– ¿Dónde esta Jin Hyung?–
– ¿Quieres que lo busque? Esta buscándote más sangre junto al médico – Jimin se observó el brazo y efectivamente tenía un suero junto a una bolsa de sangre a su lado. Taehyung salió y en menos de dos minutos apareció Jin junto a ¿Yoongi? Jimin pensó: ¿Qué hacía el allí? Él, eventualmente haría lo mismo que Jungkook...–
pensó desanimado y observando la gran mordida que le había hecho Jungkook cerca del cuello.
-¡¡¡JIMIN!!! ¡¡¡¡PENSÉ QUE TE PERDERIA!!!!– Jin se abalanzó al chico y lo apretó fuertemente entre sus brazos. Jimin extrañaba lo cariñoso que podría llegar a ser Jin en ciertas ocasiones. Yoongi se encontraba a un lado de la habitación, viendo como Jin y Taehyung conversaban felizmente con Jimin. En un momento, Jimin se sintió cansado y los chicos lo dejaron a solas.  Yoongi esperó a que el menor se durmiera y se acercó a su cama. Acarició suavemente su cabello, y luego rozó un poco la mejilla del chico. Sonrió, luego recordó un momento de su vida que jamás olvidaría:

" – Hermanito jamás te enamores de un humano, son seres frágiles y delicados. Si llegas a sentir algo por alguno recuerda que no estarán contigo para siempre...–
– ¡¡Hy...hyung..!! ¡¡N... No lo hagas!!– Un pequeño Yoongi, se encontraba observando como su hermano intentaba arrebatarse la vida luego de que su padre haya asesinado a una chica humana la cúal su hermano había comenzado a amar. Yoongi observaba como habían veces en las que su hermano se escapaba junto a ella y lo miraba feliz y con un brillo especial en sus ojos. Pero ahora, lo había perdido. Su padre había entrado a ese sótano en donde ambos hermanos se encontraban. Yoongi se quedó completamente congelado al observar el rostro tan serio de su padre.
– Yoongi, sube a tu recámara – fueron las palabras que salieron de la boca de este. Yoongi continuaba hipando, pero subió las escaleras dejando a ambos solos allí. Al salir, escuchó como la puerta se cerraba brúscamente y como escuchaba los gritos y reprimendas de allí. Luego solo hubo silencio, uno que hizo estremecer el pequeño cuerpo de Yoongi. El niño había decidido salir corriendo y encerrarse en su habitación, allí se escondió en una esquina de su cama y se quedó con sus rodillas flexionadas y sus brazos apoyados a estas mientras escondía su rostro lleno de lágrimas"

Yoongi había vuelto en sí, recordar como su hermano se había clavado una daga en su corazón mientras discutía con su padre mientras él con solo 8 años no podía hacer nada le hacía sentir tan mal como ver a ese chico lastimado por un vampiro. Se siente tan impotente como aquella vez. Suspiró y decidió levantarse pero una mano sostuvo su chaqueta...