Desconocidos

Llego el día

La semana había transcurrido de forma normal, ayude a mamá a cambiar el estilo de la sala principal, para ella es importante los diseños y siempre estar en tendencia en el hogar.

Hoy era la fiesta y no sabía que iba a usar, era un sábado muy soleado, pero no tenía una idea clara de que podía ponerme. Imaginen una fiesta en la piscina es demasiado para mi gusto, saber que tengo que usar unos shorts tal vez o algo que no sean mis pantalones deportivos me asustaba un poco. Nunca me ha gustado mostrar mis piernas, por eso es que creo que soy más blanca de lo normal.

Comencé el día con un desayuno familiar, decidí volver a hablar con mi hermano y entendimos que nada de lo que había pasado era culpa de nosotros y quedo el problema resuelto... Bueno medio resuelto porque él quería comprender porque me llamaban de ese modo, siempre le dije que era un tema complicado.

Eran las tres cuando el timbre de la casa sonó, como era de esperar era Alaia y su gran outfit que combinaba directo con el sol, eran como rayos directo hacia mis ojos. Mi mejor amiga era hermosa pero ese día estaba mejor que nunca, llevaba unos Shorts blancos alto y un crop top de color salmón, y en el pelo una media coleta que caía en mechones hacia su hombro.

-Puedes quitar esa cara de impresión, me asusta verte así. Dice Alaia mientras subía las escaleras a mi habitación.

-Perdón es que no puedo tener otra expresión, estas hermosa. Mi cara de asombro lo decía todo. Pareces que vas a una gala o algo así.

-Khalani puedes dejar eso para después y vamos a ver que te vas a poner.

Comenzamos a buscar en mi armario, no es que tenga tantas opciones, al menos tenía shorts que parecían de mi abuela, pero iban acorde con la temperatura. Tome mis favoritos y una camiseta azul pastel que iba perfecto y no podía evitar reír con la cara de desacuerdo de Alaia.

-Sabes creo que el problema es el short, mi mejor amiga tomo unas tijeras y le comenzó a dar una forma muy peculiar, luego tomo mi camiseta y le hizo un nudo detrás y me los paso para que me lo probara y a decir la verdad creo que me gusto, aunque demasiado provocativo, pero se veía bien. Decidí no llevar traje de baño porque no me gusta mostrar mi cuerpo creo que es lo que nunca haría en mi vida, y menos con personas que no conozco.

Tome mi cartera y dinero de mi mesita de noche y comenzamos a bajar las escaleras y escuche a mamá desde la cocina.

- ¿A qué hora llegan niñas?

-No sabemos mamá, pero te mantendré informada de cualquier cosa y descuida que ando en buena compañía. Miraba a Alaia que estaba detrás de mí.

-Si señora, prometo cuidarla, ya nos vamos porque se nos hace lo tarde.

Cerramos la puerta a toda prisa, porque ya el taxi estaba en la entrada, mi hermano no podía llevarnos ya que tenía algunas cosas pendientes de resolver. Llegamos a la casa de West, era una casa maravillosa y delicada, quedaba a las afuera de la ciudad, era más bien su casa de fines de semana o de vacaciones porque el apenas vivía a unas cuadras de la mía. Caminamos por la entrada que estaba llena de coches deportivos y personas dándole con todo a la fiesta. Su casa era totalmente blanca con decorados azules que daban la sensación de estar en las nubes.

Alaia desde que entramos comenzó a saludar a los de su salón, era de esperarse que nadie me haya saludado, creo que ni siquiera notaron mi presencia, entramos al jardín donde se encontraban todos, nunca había visto tantas chicas atractivas en un mismo lugar. Todas tenían excelentes trajes de baños y cuerpos envidiables, combinados con el ambiente era perfecto. Mi cara de asombro no se pudo esconder Maddie que era la más popular de la escuela se nos acercó.