Capitulo 11

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Un mes después, los dos jóvenes se encontraban en la habitación de la castaña en el hospital, Asahi había estado recibiendo la quimioterapia para que su cuerpo resistiera un poco más.

Asahi: Espera... Hiei... espera... detente...

Pedía con dificultad la chica con los ojos cerrados y con algunas lágrimas saliendo de sus ellos.

Hiei: ¿Por qué?

Asahi: Así no... para... para...

Hiei: Pero tu me dijiste que lo hiciera.

Asahi: Si lo sé... pero... pero...

Hiei: ¿Quieres que me detenga si o no?

Antes de que la chica respondiera algo la puerta fue abierta interrumpiendo la escena.

Dr.Mabo: Aquí tengo los últimos exámenes de...

Miro a ambos chicos impactado.

Dr.Mabo: ¿Pero que están haciendo?

Hiei: ¿Que no es obvio?

Dijo molesto mirando al anciano.

Dr.Mabo: Pero no es correcto que...

La chica estalló de la risa, interrumpiendo al doctor, debido a que el korime le hacía cosquillas en la cabeza, la cual ya no tenía ningún cabello cubriéndola, tenía cerrado los ojos y con sus manos limpiaba las lágrimas que de estos salían.

Asahi: No se molesté doctor *vuelve a reír* Yo le dije que lo hiciera.

La chica seguía riendo, el doctor suspiró resignado.

Hiei: ¿Con eso estarás mejor?

Ella asintió sonriendo, el anciano los miró con tristeza pero no dijo nada.

Dr.Mabo: Hiei dame unos momentos a solas con Asahi ¿bien?

Él chico asintió y salió de la habitación.

Dr.Mabo: Asahi verás tus exámenes dicen... dicen...

No quería decirle, el no solía tener ese tipo de actitud frente aún paciente pero en ciertas ocasiones no podía evitarlo y esta era una de esas ocasiones.

Asahi: Ya dígalo... No... no se preocupe... Es inevitable ¿no?... Estoy a punto de estirar la pata ¿verdad?

Sonríe mientras unas cuantas lágrimas salían de sus ojos.

Dr.Mabo: Quisiera no darte la razón pero la tienes.

Dijo triste y sorprendido por la reacción de ella.

Asahi: Doctor... podría hacerme un favor.

Dr.Mabo: Por supuesto ¿Que necesitas?

Asahi: Pues verá...

***

Asahi: No así no es, que idiota eres.

Le reclamo al pelinegro quien estaba sentado frente a ella.

Hiei: ¡¿Idiota yo?! ¡Desde un principio te dije que no le entendía a este maldito juego!

Asahi: Lo se por eso te dije que jugaras a las cartas conmigo, nunca había ganado tantas veces en mi vida.

Hiei: Maldita.

Asahi: Pero se volvió aburrido después de diez victorias consecutivas.

Infló sus mejillas molesta.

Aceptarme como soyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora