(NARRA JOAQUÍN)
Eso era todo, tenía que irme y hacer como si nada hubiese pasado.
Salí con mi corazón hecho trizas, tener la imagen de Emilio llorando y de rodillas me partía el alma, pero sabía que era lo correcto.
El único lugar que se me ocurría ir era con Andy.
Eran las diez de la noche y me entró una llamada del señor Osorio.
-¿Diga? -respondí confuso-
-¡Joaquín! ¿Dónde estás? -me dijo un tanto enojado-
-Ehh..en casa de una amiga ¿Ocurre algo?
-¿Sabes dónde está Emilio? Se supone que deberían estar aquí hace media hora ¿qué ocurre?
Suspiré -Tuvimos una discusión desde en la tarde y supongo que no tenemos ganas de vernos, pensé que le había dicho.
-Mañana sin falta Joaquín, necesito de favor que le digas a Emilio que me responda y arreglen sus cosas que estarán viviendo juntos nueve meses, porque esto no es un juego.
-Si señor, gracias -dije y colgué la llamada-
Aventé el teléfono y con mis manos tape mi cara, nunca puedo huir de Emilio, pero aun no era tiempo de verlo.
Rato después lo llamé, uno, dos, tres...
-¿Tahi? –contestó Emilio-
¿Tahi? ¿Qué es eso de Tahi?, ayer me lo dijo, pero no sé qué sea.
-Emilio, tu papá te está marcando desde hace rato, dice que le contestes.
-Sí, ya sé, eso no importa ¿Cuándo vas a regresar? ¿Dónde estás? Voy a buscarte.
-N-no....yo llego mañana.
-Voy por ti ¿Estás con Niko verdad? -preguntó-
-¡No! Estoy con una amiga.
-Voy por ti.
-Que no Emilio....
-Por favor, vamos a solucionar esto ¿sí? De todas maneras, mañana temprano tenemos que ensayar para grabar los capítulos -suspiró- ¿Por favor?
-Te veo mañana temprano en el set.
-Joaq...
Y colgué.
Mañana con suerte tendría la mente despejada.
-Joaquín, Joaco...-oía mi nombre a lo lejos- ¡JOAQUÍN!
Desperté, exaltado.
- ¿Que pasó?
-Emilio está afuera, gritando como loco.
- ¿Qué? ¿Qué hora es?
-Son las tres de la mañana -contestó Andy-
-JOAQUÍN YO SÉ QUE ESTÁS AHÍ, SAL POR FAVOR.
-¿C-como lo supo? ¿Le dijiste?
-¡JOAQUÍN!
-Si, pero no pensé que fuera a venir, sal Joaquín, que todos los vecinos están asomados -me dijo Andy desesperada-
Me levanté rápido, me puse mis zapatos y salí, vi a Emilio desesperado como si le hiciera falta algo.
-Aquí estás -sonrió y me abrazó- por favor regresemos al departamento.
-No Emilio, no soy tu juguete al que le puedes hacer y deshacer cuando tu quieras.
Solo me miró y me abrazó de la cintura, esos ojos...me transmitían tanto que no podría descifrar que era, pero me gustaba mucho, sentía su respiración cerca, llevó su mano hacía mi cara y la acarició, amo que haga eso, con su pulgar volvió a acariciar mis labios y susurró.
-Eres precioso Joaquín.
(NARRA EMILIO)
No podía explicar cuántas sensaciones tenía en este momento, el simple hecho de estar aquí, juntos, sin decir nada me tranquilizaba, él era todo lo que necesitaba en este mundo y me di cuenta en el momento que se fue, ya estaba tan acostumbrado a él, que me volvía loco tenerlo tan lejos.
-E-emilio -tartamudeo- no sé qué es lo que pasa, por favor dime, no quiero más confusiones.
-Mi Tahi, perdóname por todo, estoy seguro de lo que quiero y siento hacia ti.
- ¿Qué es? -desvió su mirada, estaba nervioso, lo podía notar-
-Quiero estar contigo Joaquín, mi lugar es contigo, y lo siento por darme cuenta tan tarde, por hacerte llorar, por ser un tonto -me acerqué lentamente y nuestras frentes rozaron- eres increíble y haré todo para conquistarte.
-Emilio, esto es...
-Me gustas Joaquín, y no pienso perderte nunca más.
-Lo siento Emilio pero las cosas no se olvidan tan fácil, sabías mis sentimientos y aun así no te importo, perdóname pero...
-Sí, lo sé y por eso haré todo para conquistarte, déjame sanar tu corazón.
Suspiró -No lo sé, Emilio ¿tu novia? ¿y tu papá? ¿tu mamá? ¿el fandom?
-Si tú estás conmigo nada de eso importa.
-Está bien, pero ahora, regresa al departamento y duerme ¿sí? ya tendremos tiempo de hablar.
-Vamos, es nuestro departamento.
-Bien, déjame le aviso a Andy.
Se volteó, y Andy estaba recargada en el marco de la puerta.
- ¿Seguro Joaquín? -me miró- eres un idiota -y tenía todo el derecho de decirme así- como puedes lastimar a Joaquín así.
-Andy, por favor, tranquila ¿sí? Me voy, mañana vengo por mis cosas -dijo en tono dulce-
-Esta bien, descansa y cualquier cosa me avisas va.
-Si, gracias.
Se dió la vuelta y sonreí, agarré su mano y abrí la puerta del carro.
-Adelante -sonrió, entramos al carro, tomé su mano, y le di un pequeño beso- vamos a casa.
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HASTA QUE ME OLVIDES (EMILIACO).
Fanfiction"-No sabes lo mucho que te quiero Tahi, pero a veces ni yo me entiendo... -¿Emilio?"