Epilogo

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Un suceso impactante sucedió en Londres durante el año 1897, la noticia se esparció en todos los periódicos del país.

La noticia narraba el suceso en el cual una gran cantidad de nobles habían muerto calcinados, aun que extrañamente solo 3 cuerpos había sido encontrados casi intactos. Lo cuerpos correspondían a los gemelos Phantomhive y al conde Trancy.

Otra misteriosa noticia de aquel día fue la desaparición del eredero del conde. Tal suceso hasta el día de hoy seguía siendo un misterio y la mansión perteneciente al príncipe una Mancha de aquel día. El día que la nobleza del mal término devastada.


122 años después

Año 2019, afueras de la antigua mansión Phantomhive.

Hacia años que nadie residía en ese embrujado lugar el cual, apesar de estar desavitada hace más de un siglo seguía intacta y sus jardines y construcciones tan hermosas como en un principio, siendo haci rodeadas por la ciudad la cual había llegado a la construcción sin dar intervención en ella.

Un galante hombre de cabello negro, piel palida, ojos rojos y ropa que resaltaba su figuraba bajaba de un vehículo estacionado frente a la residencia en compañia de un niño que aparentaba los 7 años, el niño tenía una piel palida, un cabello azul obscuro y ojos rojos al igual que su padre.

Ellos dos eran de las únicas personas que entraba hay, pero a diferencia de los curiosos ellos tenía sus razones por las que cada semana viajaban un largo camino solo para entrar a ese lugar.

Ya dentro se dirigieron a la zona donde los cuerpos de las antiguas generaciones Phantomhive residian. Ellos tenían una atención en específico y esa atención era la tumba que tenía gravado el nombre

Astre Phantomhive


En ese lugar residía el cuerpo del amado y el padre de los resien llegados.

—Debo de admitir que empiezo a sentir que Undertaker nos timo... Pero aún haci no pierdo la esperanza de volver a verte -dijo con una sonrisa arrodillandose frente a la tumba acción que imitó su hijo- ¿Sabes? Sebiel a demostrado un gran coeficiente intelectual, además que a aprendido a tocar algunos instrumentos y es alguien sobresaliente en sus clases -miro a su hijo con una sonrisa cálida mientras acariciaba su cabello- ¿Te gustaría tocar para papa?

—Si... -el pequeño niño saco de una mochila a sus espaldas un pequeño violín, después de acomodar lo empezó a tocar soltando una melodía tranquila, aún que expresaba algo de melancolía y nostalgia a su vez-

—¿A que se deben tus lágrimas? -pregunto después de unos momentos que la tonada se detuvo y con su dedo limpio las pequeñas gotas que asomaban por los ojos del niño-

—M-Me... Me gustaría tener aquí a papa.. -dijo para después abrazar a su padre "con vida" Mientras soltaba pequeños sollozos- Quiero tocar para el... No para sus restos...

—Seb...

—Jijiji, ¿acaso ninguno de los 2 confía en mi palabra? -interrogó una aguda voz con la que habían tenido conexión durante el último siglo- Les aseguró que al dejar libre al alma esta re encarnará

-el demonio se levantó tomando a su hijo en brazos- No es una sorpresa verte aquí, Undertaker. La verdad es que mi paciencia se empieza a colmar y cada vez los humanos piden cosas más basura y mundanas. Apesar de que puedo asimilarlo como un segundo la verdad es que me empieza a ser aburrido todo esto -admitió sonriente- Por tu propio bien espero que no mientas.

—No sería capaz de hacerlo. Mayord... Sebastian, después de todo me estaría engañando a mi mismo


Observo como las tumbas de algunos de los miembros cercanos al shinigami tenían Rosas en su lápida, era obvio que el shinigami tenía una extraña atracción a esa familia la cual no le interesaba descubrir a menos que su amor resultara perjudicado.

Después de unos momentos en los que siguió hablando con la lápida los dos hombres y el niño salieron por fin de aquel lugar embrujado mientras charlatán entre sí.

—¿Que te parece si vamos por algún bocadillo -sugirio el shinigami-

Antes de obtener una respuesta clara un grito de horror intervino su conversación.

Cualquier humano acudiría por simple moral pero ese demonio no. La voz le era distinguible entre cualquier ser que pudiera existir en la tierra.

Pronto una sonrisa victoriosa pinto su rostro y con total calma respondió:

—¿Que tal si van tu y Sebiel? Creo que tengo asuntos que arreglar -dicho eso y después de despedirse de su amado hijo se dirigió a un callejón obscuro de donde provenía el grito.-

En ese horrendo lugar se encontraba en una esquina un chico de 13 años, tenía un hermoso cabello azulino, ojos color cielo aún que uno con un tono morado y una piel clara. El pobre chico estaba siendo amenazado con una pistola dada su apariencia noblitaria la cual no era pura decoración. La ingenuidad de los humanos que tomaban el papel de atacante y agredido no se imaginaba lo que estaba punto de pasar.

—Vaya vaya.. Parece que alguien ocupa ayuda -dicho eso arrebató hábilmente la arma de la mano del agresor mientras que en un simpre movimiento terminaba por romperla por completo con total limpieza y extraña elegancia, continuamente se acercó a el chico el cual apesar de lo que acababa de pasar por alguna extra razón se sentía salvado- Parece que estaba en un gran aprieto, mi nombre es Sebastián Michaelis ¿Podira saber su nombre?

—Yo soy... Astre

Ese conde.... Embarazado?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora