-CAMI.
-LUCI.
Salgo corriendo a donde se encuentra mi amiga, veo como ella me abraza fuerte y me es inevitable no llorar.
-Amiga ¿qué tienes? Oye primero ¿Cómo te fue? ¿Quieres ir a comer algo o prefieres ir a la casa?
-Vamos a comer, tengo antojo de hamburguesa, papas, pizza, de todo.
-Óyeme hace cuanto que no comes mujer.- Yo le sonrío a medida que subimos a su carro
-Pues…- No le digo nada porque de manera inconsciente me estaba acariciando la barriga, gesto que no se le pasa por alto a ella.
-Lucia no me digas que vas a ser mamá.
-Pues sí, te lo digo, voy a ser mamá. – Creo que ha sido la primera vez que de manera consciente digo lo que seré en unos 8 meses.
-¿Cómo reaccionó Pablo?
- No se.- Veo que me mira confundida y hasta yo si alguien más estuviera en mi caso también lo haría, Camila aunque no somos las amigas más unidas en el sentido de estar cerca siempre nos hemos contado la mayoría de las cosas de nuestras vidas, ella es de esas amigas que por más lejos que se encuentre, sé que podré contar con ella para lo que yo necesite. – Es que llegué al concierto que iba para yo darle la sorpresa pero la sorprendida fui yo al ver que se estaba besando con su ex.
-Lo mato.
-No, fresca, creo que Valeria ya lo habrá hecho, además creo que sabía bien a que me iba a meter con él.
-Pero Lucí primero eso no me parece, porque de igual forma ustedes ya habían hablado ese tema y pensé que todo ya se encontraba arreglado además de él no me suena eso, sabes que no lo conozco y las dos veces que lo vi fue en las videollamadas que hicimos y se veía muy enamorado de ti.
-Pues para que veas que no todo es como parece ser.
-Eso a mí no me suena realmente y además no te quería decir porque quería que me dijeras primero que pasó pero Pablo se ha comunicado con varios de tus amigos en Colombia.
-¿Qué Pablo hizo qué?
-Sí, así como tú lo oyes, pero bueno, mejor bajemos a alimentarte a ti y a ese sobrinito o sobrinita.-Veo como acerca su mano a mi barriga y me tenso, pero creo que es por no estar acostumbrada a que me estén tocando y menos esa parte.
Al bajar, me doy cuenta que es un McDonald's y mi boca se hace agua, al sentarnos en una mesa, saco otra vez el celular, pero recuerdo que lo apague y prefiero que así sea por el tiempo que yo vea propicio.
-Cami te puedo pedir otro favor,
-Claro, decime.
-Me puedes prestar tu celular, es que no quiero prender el mío.- Ella me lo extiende y yo agrego los dos números que por ahora serán mi contacto con España.
Después de comer y yo haber pedido casi todo lo que había en el menú, me doy cuenta que Camila vive casi cerca de los centros comerciales, así que decido ir un rato a distraerme y le pido a ella que me acompañe, lo primero que hago es buscar un lugar para comprar un celular y una vez lo tengo en mis manos agrego a Vale y a Ignacio, aunque sé que ellos ya deben de estar en el quinto sueño, yo les dejo a cada uno el mensaje de que soy yo y que esta será la nueva línea por la cual vamos a hablar.
Estos días he pasado por tanto que no se ni en donde estoy parada, ya ha pasado un mes del cual llegue a Chile y solamente hoy decidí prender el celular, me doy cuenta que una vez que ingreso a el, mis nervios van creciendo y me van creando expectativas de tener mensajes de Pablo, yo sé que tal vez puede ser eso masoquista pero estas semanas sin él, si que lo he extrañado. Al conectarme al Wifi me comienzan a llegar las notificaciones pero no se me pasa por alto el hecho de que Pablo es el que más mensajes me ha enviado, una vez me cercioro de que llegan todos, apago la opción de Wifi y me dispongo a leer cada uno de ellos.
-“Lucia, mi amor, no sé en donde estas, no he querido hacer nada si tú no estás conmigo, si yo sé que nunca he actuado de esta forma y he tratado de ser el hombre maduro pero si tú no estás de verdad que no sé qué hacer. Mi princesa hablemos por favor, dime en donde estas que yo voy por ti ya, necesito tenerte a ti y a mi hijo o hija cerca, por favor, ustedes dos son mi vida.”
- “Amor, oye ya ha pasado dos semanas y sigo contando los minutos, las horas y los días y tú no das señales de vida, por favor, déjame saber de ti, como estas, como esta nuestro bebé, Lucia te amo y amaré a ese niño o niña, viviré solo por ustedes dos, pero por favor déjame estará tú lado, podemos salir de esta juntos.”
Y así y más mensajes estaba leyendo de Pablo, cada vez se hacía más difícil leerlos por mis lágrimas y lo que más me mataba era oír su voz. Decidí volver a apagar el celular y ver la tele, que por cierto llevan ya dos días enteros hablando del regreso de Pablo López a este país, de verdad que deseo con todo mi corazón volverlo a ver, pero me es difícil sabiendo que me ha engañado, que no me habló con la verdad, aún recuerdo como Laura y él se besaban y me parte el alma.
Mes cuatro y mis nervios están a flor de piel, hoy podré saber si es niño o niña, cuanto desearía que Pablo estuviera a mi lado en este momento, me lo imagino a él mucho más nervioso que yo y siendo hasta más dramático. Que han pasado en estos 3 meses, fácil, cuando pensé que Pablo iba a estar en el mismo país y hasta en la misma ciudad, de la noche a la mañana canceló el Tour, cosa que me dejó sorprendida, no sé qué le está pasando a este hombre o bueno sí, he cogido cada mes de prender mi celular antiguo para ver que ha mandado él, porque le he pedido a Valeria y a Ignacio de que no le pasen mayor información de mí y más que manejo otra línea para comunicarme con ellos. Pablo cada día manda una canción o un mensaje y yo no he dudado en escuchar las canciones que él graba y sé que él se da cuenta que aparte de que las escucho, también leo sus mensajes aunque tenga desactivado la confirmación de lectura y me reenvié los audios para no dejarlos en escuchado.
Estoy pensando en esto, cuando siento como mi celular suena y es Valeria haciéndome una videollamada.
-SISTA.
-SISTA.
-¿COMO VÁS? ¿COMO ESTÁ MI AHIJADO O AHIJADA?, HOY SABREMOS QUE ÉS, QUE EMOCIÓN. – Escucho como Alborán se ríe al fondo.
-Todo va muy bien, ya se está haciendo notar un poco más y si amiga, hoy sabremos que será, estoy muerta de los nervios y ah hola Alborán.- Veo como él se acerca y se sienta al lado de Vale, de verdad que me hace mucha ilusión y me da una alegría enorme el hecho de que ellos dos se encuentren juntos y se vean tan bien, lo último que pudimos hablar Vale y yo es de que ella ya lleva tiempo viviendo con Pablo y que las cosas han mejorado de una manera impresionante.
-Bueno amiga y qué? ¿De que has tenido antojos?
- De todo sista, desde el helado más dulce hasta la cosa más picante. Oye amiga ¿cómo van las cosas por allá?
-Lucí pues tú hermano trabajando, saliendo con Sofía, creemos que esa relación va pa’ largo, ehh y pues…- Sé que me quiere hablar de López.- Lucí, López ha cancelado cuanto concierto y entrevista tenga que ver con él.
Me quedo en silencio pero pienso en que él también es el papá de este bebé.
-Vale no te preocupes porque me hablaste de Pablo, antes bien, hoy después de que me hagan la ecografía voy a hacerle algo a él con cosas de su hijo o hija y te la envío a ti para que se la des, ¿podrías hacerme ese favor?.
-Eh bueno, dale, sabes que igual contas conmigo.
-Y conmigo.- Veo como Valeria mira a Pablo y se sonríen.
-Bueno personitas, esta mujer tiene que irse, estoy aquí tocando violín así que adiós, los quiero y por favor no me vayan a hacer tía que con este que viene en camino es más que suficiente.- Veo como los dos se ríen y nos despedimos no sin antes hacerme prometer que les iba a decir si era niño o niña apenas saliera de la clínica.
Una vez en la clínica, me entran los nervios y aunque nadie lo sepa, la única forma de calmar mis nervios cada vez que vengo a este lugar es escuchar dímelo tú, una canción que fue mi todo y sé que lo seguirá siendo siempre a pesar de las cosas que pasen.
-Lucía Tafur.- Escucho como me llaman y ahí están mis nervios otra vez aunque entro tarareando un poco de la canción.
-Hola Lucía ¿Cómo has estado?
-Bien doctora, he estado ya sin nauseas aunque con muchos antojos.- Las dos nos reímos y ella me dice que me acueste para revisar cómo va el bebé.
-Bueno Lucía, ¿preparada para saber qué será?
-Sí, bueno no, bueno si, ay perdón es que son los nervios.
- No te preocupes, además que tú eres muy fuerte y más con este regalo de la vida.- Yo le sonreí y me quedé mirando el monitor.
-Bueno Lucía tendrás una niña.
-¿Una niña?
-Si una princesa que se ve muy sana, quieres oír sus latidos.
-Claro que si.- Coloca sonido a lo que estoy viendo y ahora sí que lloro hasta más no poder.
-¿Deseas que grabe con tu celular el monitor y los latidos?
-Ay doctora me da pena.
- Nada de pena Lucí, ya me has contado todo así que lo que menos debes de tener conmigo es pena.- Yo le sonrío y le entrego mi celular, ella graba y me lo devuelve.
-Bueno futura mamá de una princesa, nos vemos dentro de un mes, ya sabes que si pasa algo me llamas.
-Gracias Ana de verdad que has sido una maravillosa amiga en estos meses.
-Lucí no me digas eso que me vas a hacer llorar, hablamos más tarde.
Ana ha sido aparte de mi ginecóloga estos meses, ha sido una maravillosa amiga, ella es la cuñada de Cami y un día que estaba mal le conté toda mi historia aunque todos han llegado a la misma conclusión, que debería dejar a Pablo explicarme que pasó pero yo aún no me siento capaz para mirarlo a los ojos y que me diga que pasó en verdad.
Al llegar al apartamento que comparto con Camila, llamo a Vale y me doy cuenta que ella no me contesta, cosa que me parece rara porque me dijo que iba a estar pendiente, pero todo tiene razón de ser cuando me dice que López se encuentra en la casa hablando con Alborán y no paso por alto que me dice que eso ha sido un milagro, me entra mi duda del porque me dice eso cuando me envía una foto que ella tomó de lejos y veo como López no es ni la cuarta parte del hombre que vi esa última vez antes de montarme al taxi, se ve delgado y aunque nunca ha sido de peinarse o mejor dicho tiene ese estilo de peinado despeinado, veo como su cabello está peor y tiene un aspecto descuidado.
No miro más y decido salir de este lugar que aunque es espacioso, el simple hecho de verlo a él así me va quitando el aire.
Al llegar al centro comercial, me acerco a una tienda de cosas de bebé y me pongo a ver algunos juguetes, sé que quiero que Pablo sepa de su hija y de verdad que no es como hacer para que él se entere, pero quería que fuera algo especial, al ir caminando veo un estilo de álbum y sé que es el indicado, porque apenas lo tomo en mis manos, mi hija patea.
-Mi princesa ¿te agrada este para que tu papi vea cómo estás de grande?- Coloco mi mano en mi barriga que ya se hace más visible y en cuanto ella patea otra vez, se que no es necesario buscar más.
Al pagar y devolverme al apartamento, me doy cuenta que había dejado el celular porque apenas estaba abriendo la puerta escucho como suena. Como abro la puerta de una me acerco a el y veo que es Valeria.
-Hola Vale.
-Mujer ¿dónde estabas? Te he llamado hace media hora y nada, estaba preocupada
-Amiga tranquila, salí a tomar un poco de aire y a comprar algo para Pablo.
-Oí bien? Tú comprándole algo a Pablo?
-Bueno, yo no, su hija.
-QUE? O SEA HIJA? NIÑA? ALBORÁN VEN RAPIDO…- veo como Vale se aleja de la cámara y me percato de que trae casi arrastrado a Pablo.- Ahora si, me estabas diciendo.
-Jajaja que usted señorita Valería Santamaría será madrina de una hermosa niña.
-SI! YO LO SABÍA, SABIA QUE IBA A SER NIÑA.
-Jajaja ahora me salió bruja mi mejor amiga?
-Cuando no.- Dice Alborán y nos soltamos a reír mientras vemos como Vale hace cara de enojada pero estaba que se reía.
-Bueno ahora si, como va eso de López y que le vas a mandar algo?.- Veo como Alborán me queda mirando confundido pero yo le resto importancia, no quiero decirle a todos que lo que más quiero es contactarme con él, pero creo que esta es la mejor excusa.
-Es que deseo que él sepa cómo va la niña, quiero que vaya haciéndose parte de esta historia.
-Me parece Lucí, me parece y cuando vas a volver? Me haces falta sista.
-Vale no sé cuándo, espero que pronto, pero si espero volver pronto.
-Sabes que para lo que necesites acá estoy.- Ella acaba de decir eso cuando oímos Alborán grita “NOS TIENES LUCI”, nos reímos todos y seguimos hablando un rato más y nos despedimos.
Tres semanas después por fin me decidí en hacerle el envió a Pablo del álbum, no sin antes haber puesto una nota “no te hagas ilusión, tú eres el papá y mereces conocer por lo menos este proceso”, espero que le quede claro, aunque bien sé que lo que más deseo es que esté a mi lado viviendo cada momento, aun no me siento preparada.
Ya estoy en los cinco meses y de un momento a otro la barriga ha crecido un montón, lo último que hable con Vale es que ya le entregó a Pablo la caja y que de verdad tenía mucha ilusión y aunque sé que ella me quería decir otra cosa, no me la dio y sé que así es mejor, dejar de lado a Pablo y estar al margen.
El día de Mañana es la cita con Ana pero hoy estamos almorzando con Cami y ella en el apartamento y tenemos La 1 y si, aunque no estamos en España, nos gusta saber qué pasa con todo lo del lado de allá además que Cami es fiel seguidora de OT y por más que pasen los días, ella no se pierde nada y mientras esperamos a que comience, están pasando algunas noticias de artistas, cuando oímos
-Y si tenemos la primicia de que el cantante español Pablo López se retira de los escenarios, como lo oyen. El cantante malagueño Pablo López después de haber consolidado una gran carrera artística se retira del mundo de la música, después de haber cancelado las entrevistas y su Tour CFL, nos ha llegado el comunicado oficial de su representante en donde informa que nuestro niño raro se va dejando grandes éxitos como El patio, Lo saben mis zapatos, entre otros.
-DIOS!
-Lucia, estas bien?
-No, no estoy bien, que le pasa a Pablo, ha dejado su carrera? O sea, muchas veces me mando mensajes como esos pero no, esto es toda su vida, él no puede…- No puedo seguir hablando cuando me pongo a llorar.
-Lucí por favor cálmate.- Escucho como Ana me habla tratando de calmarme pero me es casi imposible, esto me afecta porque a pesar de todo somos él y yo y siento que es mi culpa.
-Ana puedo viajar?
-Pero Lucí…
-Ana, entiéndanme quiero estar al lado de él, por favor, yo sé que dije que no quería saber nada pero es que Dios…esto es mucho.- Veo como Ana saca su portátil y escribe algo, escucho la impresora y después veo como ella se aleja y al regresar trae un sobre, al extendérmelo y mirar que es, me doy cuenta que es un permiso para viajar, ya que en muchas aerolíneas colocan problema, las miro a las dos y ellas me sonríen, yo sin dudar voy al que ha sido mi cuarto por estos casi cinco meses y comienzo a organizar todo lo que tengo en las maletas.
Vamos camino al aeropuerto y no le he querido decir ni a Vale que viajo para España, de verdad que quiero primero llegar a donde Pablo. Al entrar Cami se acerca a su novio que nos esperaba a la entrada y sí, me faltó decir que él novio de ella, hermano de Ana es piloto, al saludarnos, me avisa que en 40 minutos sale mi vuelo para España, veo la hora y me doy cuenta que son las once de la noche, así que él me hace la mayoría de los papeleos y cuando ya es hora de despedirme, abrazo a estas mujeres que fueron mi compañía y me encamino al avión, una vez sentada y despegando me doy cuenta que si esto no es que lo amo demasiado, de verdad que no sé qué podrá ser.
Al llegar a Madrid y tener mis maletas, me doy cuenta que ya son las 2 de la tarde, el vuelo se demoró un poco en aterrizar, pero eso no me importa, salgo y ya he pedido un Uber, así que ya se encuentra afuera, el conductor me ayuda a subir las maletas y yo le sonrió. Cada vez que nos íbamos acercando a la casa de Pablo iba sintiendo más náuseas y nervios, de verdad que no sé cómo voy a reaccionar o él como lo hará. Tengo miedo pero ya no hay vuelta atrás.
Me bajo y el conductor me ayuda a bajar las maletas, le cancelo el viaje y nos despedimos con una sonrisa, cada vez que me acerco más a la puerta siento que mis piernas van a dejar de funcionar y la respiración se me va a ir, ay Lucia, linda hora para que te de ataque de pánico. Al estar cerca al timbre respiro hondo y lo toco, escucho varias voces y en eso caigo en cuenta de los carros que se encuentran afuera pero ya no puedo huir o bueno tal vez sí, pero esta barriga no me lo permitiría.
Al abrir la puerta y ver a Pablo ahora sí que el tiempo se ha detenido aunque se ve más descuidado de lo que se veía en la foto que me envió Vale, yo lo veo el hombre más hermoso del mundo.
Veo cómo va a llorar pero aclara su garganta.
-Tú.
-Ehh si yo, ¿puedo pasar?.- Pablo me queda mirando y solo se hace a un lado, cuando voy a cruzar la puerta, él me abraza y veo como se pone a llorar, nunca lo había visto así y me mata saber que yo he sido la causante de que él se encuentre en esta condición, pero no me dejo derrumbar, mi orgullo es mayor.
-Lucia, mi amor, yo… amor yo…- No puede seguir hablando porque ha terminado casi arrodillado tocando la barriga y como si nuestra hija supiera de quien se trata, patea justo donde Pablo había colocado su mano y claro que reconoce su voz, Pablo mando infinidad de audios y todo se los ponía a oír a ella. Veo la cara de ilusión que pone y mientras nosotros seguimos en esa burbuja, donde solo somos nosotros tres, escucho como doña Lola avisa que la que ha llegado he sido yo y lo que pensé que iba solo a ser una visita de entrada por salida, se va a convertir en una estadía mucho más larga.
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Hola!!!
Muchas sabían que la que regresaba era nuestra Lucía, pero ¿ahora que va a pasar con esta pareja? ¿volverán a estar juntos?
Gracias por el apoyo que me han dado, un abrazo enorme y espero leerlxs ❤
