Rivales

12 "Secreto"

-¡Es inútil! –Catarina grito desde el baño.

-¿Por qué no subes tus piernas hasta tu estómago y aplastas, así puede salir?

-¿Crees que soy una consorsionista?

-Es contorsionista.

-¡Lo que sea! –Después de poco ella salio, dejándose caer en la cama a un lado de Magnus. –Odio todo.

-Sabes que no deberías de comer mucha harina. –Ella lo miro mal.

-Era pizza no podía decirle que no. –Magnus se río.

-Toma un laxante.

-No, odio las pastillas.

-Hay un té que mi mamá me hace cuando me duele la panza y te suelta el estómago. Tal vez puedo hacerlo para ti.

-Sí, por favor, que siento que voy a explotar y aun así tengo hambre. –Magnus se levanto riendo.

-Bien vamos.

Ellos salieron del cuarto de Catarina hasta la cocina, mientras ella estaba quejándose. Cuando llegaron, Ragnor estaba ahí, desayunando.

-¿Dónde están mamá y papá?

-Buenos días a los dos. –Ragnor dijo, Magnus se río.

-Buenos días.

-Si si como sea. –Cat se sentó a un lado de su hermano. -¿Dónde están?

-Salieron, no sé a dónde. –Se encogió de hombros.

Magnus puso la tetera en la estufa y comenzó a buscar las cosas para hacer el té.

-¿Tienes entrenamiento? –Cat le pregunto.

-Si. –Magnus se giro hacia ellos.

-Pero si ayer hubo una fiesta ¿Cómo pueden tener entrenamiento?

-Somos responsables. –Ragnor se encogió de hombros, -A parte, esa fiesta se usa para jugar sucio y emborrachar el otro equipo.

-Pues ese plan fallo, porque yo no vi a ni uno del otro equipo borracho, ni al tuyo.-Ragnor rodó los ojos.

-¿Qué es lo que están haciendo? –Le pregunto a Magnus.

-Un té para Cat, porque no puede hacer del baño.

-Genial, Magnus. ¿Por qué no lo publicas en Facebook?–Ella hizo una mueca de enojo hacia él, quien río.

-Ya decía que te ves un poco inflamada. –Ahora la mirada de enojo fue directo a Ragnor.

-Eso es lo que toda chica quiere escuchar, hermano.

Ragnor rodó los ojos y se levanto, agarrando su mochila.

-Me voy, tu mal humor puede ser contagioso. –Y salio rápido de ahí.

Le tetera comenzó a sonar y Magnus se giro para preparar el té.

Cuando estuvo hecho, lo dejo frente a Cat, quien lo agarro, y toma un poco. –Esperaba que tuviera un mal sabor, pero sabe bien. –Magnus sonrio.

-Gracias.

-¿Tienes trabajo hoy?

-Solo iré un rato a la florería. ¿Qué harás tú?