-¡Mierda! –Magnus maldijo cuando la puerta que había abierto se regreso y lo golpeo justo en la cara.
-¡Magnus! –Su mamá lo regaño.
-¡Lo siento! –Entro al cuarto, recogiendo los papeles que había olvidado, los metió en la mochila. Pero antes de salir, se detuvo el espejo, frunciendo el ceño.
El golpe se estaba comenzando a notar, Magnus se sintió un poco confundido, era muy rápido para que el golpe se notara. Suspiro y salio de ahí.
-¿Qué fue lo que paso? –Su mamá pregunto sin mirarlo, Magnus se sentó en la mesa.
-Me pegue con la puerta. –Su mamá se giro a mirarlo, alzado las cejas.
-El golpe se te ha marcado muy rápido. –Le toco a un lado de la frente, Magnus hizo una mueca de dolor.
Ella se encamino y puso hielo en la pequeña bolsa, pasándosela a Magnus. Magnus la agarro, sonriendo.
-Gracias.
-¿A dónde fuiste ayer? No me dijiste.
-Hum, fui a ver aun amigo.
-¿Qué amigo? –Magnus suspiro, él no podía ocultarle cosas a su mamá.
-Alec –Ella asintió, sentándose frente a Magnus y poniendo un plato de avena frente a él.
-¿Y como esta?
-Bien. Se ha lastimado un poco el tobillo pero sobrevivirá. –Su madre río.
-Me alegra. Ahora, apúrate porque se te hará tarde.
(...)
-Hola. –Magnus se sentó frente a Maia, ella levanto la mirada de su comida hacia Magnus.
-Hola. –Le sonrió.
-¿Puede sentarme? Bueno ya lo hice, ¿pero eso está bien? –Maia se río.
-Sí, está bien. ¿Qué fue lo que te paso? –Señalo su mejilla.
-Oh, me pegué con la puerta de mi cuarto, estúpido, pero cierto.
-Hola chicos. –Cat se sentó a un lado de Magnus.
Más chicos se acercaron, Ragnor, Rapahel y más chicos del equipo de fútbol, junto con otras chicas.
Andrew se sentó a un lado de Cat, pasando uno de sus brazos por sus hombros, ella se río, dándole una de sus papas fritas. Magnus sonrió, y cuando miro a Ragnor el rodaba los ojos.
Evan se sentó a un lado de Maia. –Soy Evan. –Ella lo miro.
-Maia.
-Lo sé. Haces las mejores bebidas. –Maia sonrió.
-Gracias.
-Escuche que Alec Lightwood se lesiono en un entrenamiento y no jugara en el siguiente partido. –Uno de los chicos dijo.
-Imbécil. –Ragnor sacudió la cabeza con una sonrisa de burla.
-Fue un accidente, a cualquiera puede pasarle. –Magnus dijo, sin pensarlo. Maldijo internamente, todos lo miraron.
-¿Estas defendiéndolo? –Ragnor le pregunto.
-No, solo decía. –Se encogió de hombros.
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Rivales
Random"Amémonos a escondidas, estemos donde nadie este. Hagamos de nuestro amor el secreto más profundo"