One-shots ¡Saiouma!

Sin importar.

Pedido de: AtuaIsBehindYou53

Primera vez que hago algo de especies.

Era un lindo lugar donde varias criaturas convivían en paz, aunque era difícil, ya que no se veía muy bien el romance entre otras especies, menos de su mismo sexo, pero para Kokichi Ouma y Shuichi Saihara que eran diferentes; tenían un romance que nadie sabía.

Saihara: ¡O-ouma-kun! Deja de acariciarlas... —Decía sonrojado mientras se tapaba la cara. —

Ouma: ¡No puedo evitarlo! Son tan suaves.

Era una de las miles de veces que ellos se reunían en la casa de Saihara, siendo un zorro de nueve colas vivía sólo y no se le complicaba invitar a su novio.

Ouma: ¿Nadie te ha dicho nada?

Saihara: ¿Sobre?

Ouma: Ya sabes, los demonios no somos tan queridos en este lugar.

Saihara: Si dejaran de hacer travesuras...

Ouma: ¿Oh? ¿No te gustan las travesuras que te hago?

Saihara: B-bueno... Eso no tiene nada que ver...

Ouma: Sabes que no me importa lo que digan los demás, te amo.

Saihara: Y yo a ti.

Se acercaron hasta juntar sus labios y besarse para después separarse para que Ouma siguiera acariciando una de las colas de Saihara.

Saihara: ¡N-no Ouma-kun!

Ouma: ¡Son tan suaves!

Saihara tomó a Ouma por los cuernos y este empezó a chillar.

Ouma: ¡S-saihara-chan!

Saihara: Tú empezaste...

Ouma: Y tú acabaste...

Saihara lo soltó empezando a reír, Kokichi se molestó tanto que nuevamente tomó las colas de Saihara y las jaló.

Saihara se echó al suelo a llorar pero Ouma se acercó a él para abrazarlo. Esa noche ambos durmieron en el suelo.

Al siguiente día salieron a caminar por el lugar, estaba lleno de flores y parecía que el cielo era naranja, hacía un día bello para caminar, pero las demás especies se les quedaron viendo, algunos con asombro y otros con algo de desprecio.

Kokichi se le quedó viendo a Shuichi el cual se mantuvo serio toda la caminata.

Cuando regresaron Kokichi empezó a llorar, rápidamente Shuichi lo abrazó, parecía no ser una de sus travesuras.

Saihara: ¿Qué ocurre?

Kokichi: Parece que nunca podremos estar en paz... Por mi especie...

Saihara tomó la cara de Ouma para besarlo rápidamente, cuando se separó acarició su mejilla.

Saihara: Sin importar lo que digan; yo seguiré amándote.

Ouma: Y yo a ti, Saihara-chan.

Al poco tiempo anunciaron su boda, la cual fue festejada sin temor a los rumores, aunque no sea bien vista la raza demonio Saihara supo como unirse a ese demonio que desde el primer momento lo enamoró.

Fin.