I will not hurt you

012

Develando la realidad (2)

Había llegado al parque solo minutos después de recibir la llamada, su padre trabajaba lo que le facilito salir sin problemas.

Contuvo la respiración cuando noto que Derek ya se encontraba sentado en una de las bancas, muy poca gente transitaba por el lugar, si acaso una o dos personas además de ellos.

Los ojos verdes lo miraron con temor, con duda, pero sobre todo con arrepentimiento.

- ¿Derek? - pregunto metiendo ambas manos a su sudadera aproximándose al chico.

Este se puso de pie en cuanto lo vio llegar, solo quería evitar todo aquello.

- ¿Pasa algo? - pregunto nervioso de saber la respuesta, pero este no respondió, permaneció en silencio y sin medir palabra lo retuvo entre sus brazos causando el asombro del humano - Derek que pasa me estas asustando.

- No tienes idea de cuánto te amo - dijo en su oído.

Maldijo el momento en que todo se había complicado, en que su naturaleza complicara su vida.

Se alejó un poco para guiarlo a la banca, la noche era fresca, las estrellas brillaban tan intensamente y los faroles alumbraban su encuentro.

- Debo decirte algo - dijo en susurro.

El castaño lo miraba atentamente, deseoso de saberlo, pero temeroso de que no le agradara, era como una duda que lo carcomía lentamente.

Pero como la suerte no estaba de su lado el aroma de Theo se coló entre el aire causándole un estremecimiento de pánico.

- Buenas noches - dijo apareciendo frente a ellos con total naturalidad.

El ceño de Derek de repente cambio a uno sin comprender, ¿Porque estaba ahí?, ¿Porque parecía no temerle en absoluto?

- ¿Theo?, ¿Qué haces aquí? - pregunto el castaño.

- Bueno, venia de camino de la casa de nuestro amigo Derek y la verdad es que estoy asombrado - sonrió complacido ante la reacción del lobo.

- Theo, no - pidió el de ojos verdes.

Fue cuando el castaño lo miro preguntando que sucedía.

- ¿Qué pasa? - pregunto Stiles mirándolos a ambos.

- Bueno, Derek es algo distinto a nosotros - señalo - Le gusta juguetear en las noches cuando nadie lo ve.

- Basta - advirtió.

- ¿Pero por qué?, ¿No es sano decir la verdad en todo momento?

No pudo retener más su coraje, jamás fue de contenerse y simplemente en ese momento Theo lo había desquiciado en tan corto tiempo lo que provoco que su lobo saliera a flote.

- ¿Que? ... - dijo el chico apartándose de su lado asustado de lo que veía.

- ¿No se lo has dicho?, que mal Derek, eso no se hace – hablo Theo con una notable sonrisa de satisfacción en su rostro.

El moreno solo podía mirar al chico delante con notable preocupación, podía percibir el corazón del humano latir más de lo que era costumbre.

No quería seguirle mintiendo, más cuando comenzaba a enamorarse del humano.

Su hermana se lo había advertido demasiadas veces, pero el temor de perderlo por saber lo que era le lastimaba más que cualquier cosa.

La última vez que había tenido el valor de contarlo había desaparecido de su vida y el simplemente no estaba preparado para perder a Stiles.

Pero ahora no tenía como evitar aquello, el castaño había quedado en completo Shock al verlo con sus garras y colmillos expuestos, todo por dejarse llevar por las provocaciones de Theo.

- Tu ... - quiso hablar el chico, pero simplemente no tenía palabras para decir ante semejante escena.

- Stiles, por favor – suplico calmando a su lobo – Solo déjame explicarte.

- ¿Qué explicaras?, ¿Que eres un hombre lobo o que lo has engañado desde un principio? – exclamo Theo sin aun moverse detrás del chico.

- ¿Hombre lobo? – repitió el castaño.

Este agacho la mirada avergonzado, no quería que se enterara de esa manera.

- Lo siento, quería decírtelo, iba a hacerlo ...

- ¿Cuándo? – pidió el chico con lágrimas en su rostro - ¿Cuándo me enamorara de ti y no pudiera alejarme de tú lado?, ¿Por eso insistías en que fuera tu novio?, para calmar tu estúpido remordimiento – exclamo con rencor.

- No es así, solo déjame que te explique por favor ... - hizo amen de acercarse, pero el castaño se apartó impidiendo su acercamiento.

- Pues lo has logrado, me he enamorado de ti, de un hombre que creí era sincero conmigo por primera vez y solo termino mintiéndome como todos, sabes cómo murió mi madre, ella fue atacada por criaturas como ustedes, siempre pensé que podía confiar en ti, pero ya veo que no – sentía el dolor incrustado en su corazón.

- Stiles – pidió una última vez antes de que el humano se marchara del parque con el olor en el viento de dolor, un dolor que el mismo había provocado.

- Es todo Derek, has perdido, el jamás te perdonara y sabes porque, porque detesta a las criaturas como tú, el jamás podrá amarte o verte como tú quieres que lo haga, olvídate de el – menciono Theo dejando al lobo en la oscuridad de ese parque, su corazón marchito bombeaba más de lo que creía posible, había perdido la única razón por la que había decidido quedarse en ese pueblo que le traía demasiados malos recuerdos y ahora no tenía nada, salvo su hermana Cora y su tío Peter.

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Después de eso había intentado llamarlo, de hecho, había dejado cientos de mensajes en el buzón de su celular hasta el punto de saturarlo, después de eso marco a su casa y el sheriff solo le indicaba que Stiles no le había comentado nada, pero solo no quería hablar con él.

Había ido a su casa cada día, al colegio en el descanso y salida y solo lo evitaba.

Había conseguido el teléfono de Scott y este solo negaba al castaño aun sabiendo que estaba a su lado, no tenía más opciones, Stiles simplemente no quería saber de él y la verdad lo comprendía, pero eso no evitaba sentirse miserable.

- Necesitas controlarte sobrino - dijo Peter detrás de él.

- No interesa - señalo cruzado de brazos, había rentado un departamento en Nueva york en el que pensaba pasar unos días, pero aquella decisión solo duro unas semanas, lo justo para entender que no podía estar más lejos del humano del que le permitía.

- Cora me dijo que no has vuelto a salir de casa - señalo.

- No me importa ya - su ánimo había decaído de nuevo.

- Escucha Derek, sé que es difícil para ti todo esto, pero piensa en lo que perderás si te quedas de brazos cruzados.

- Ya lo perdí - apunto.

Negó con la cabeza.

- No me refiero a eso exactamente, el lazo se puede fracturar y con ello causar que todo sentimiento desaparezca - esta vez sí que lo vio.

- No quiero lastimarlo más y si es la única manera de no hacerlo lo entenderé - respondió con serenidad, resignado, deprimido, temeroso, pero sobre todo con tristeza.

Stiles era lo único bueno de su vida, y ahora era lo que perdía.

Próximo capítulo llega el final...