La cabina de besos

Capítulo trece: Hora de recuperarla, otra vez.

Winter

Días más tarde me encuentro muy animada tras la noticia que me dan mamá y Charlie. 

¡Nos vamos de vacaciones a Francia!

Entre los que vamos, estamos mamá, tío Marshall, Lucas, Ashton, Daisy, Luke, Liz, Andrew (el padre de Luke), Ben, Jack (hermanos del susodicho), y yo.

Estamos en un lindo veranito. No mucho calor, ni mucho frío.

Me ducho, me seco, me coloco la ropa interior y me pongo un vestido sin mangas de top blanco con falda azul y blanca a rayas, unos zapatos negros de charol, un poco de maquillaje, peino mi cabello y ya estoy lista.

─ ¡Winter! ¡Ya debemos irnos! ─ Anuncia mamá desde la planta baja. 

─ ¡Ya voy, mami!

Mis maletas ya están en el auto y solo resta ir al aeropuerto.

Luke

Luego de recojer todo lo necesario para el viaje (por el cuál estoy muy emocionado), desayunamos con mis hermanos.

─ ¡Luke, Ben y Jack! ¡Vengan ahora mismo! ¡Llegaremos tarde! ─ Vocifera mi madre desde la sala de estar.

─ ¡Ya vamos! ─ Grita Ben.

Llevo mis típicos jeans, unas zapatillas blancas, una playera blanca con dibujos extraños, y mi chaqueta.

Ayudo a subir las maletas al auto y luego subo en él.

Minutos más tarde

Llegamos al aeropuerto, ayudo a mamá a bajar las maletas y entramos al aeropuerto a encontrarnos con la familia de Winter y a Ashton con su novia.

Cuando los encuentro, quien primeramente capta mi atención es ella. 

Se ve preciosa con ese atuendo.

─ Hola familia Diamond, Ashton y Daisy. ─ Dice mamá. 

─ Hola. ─ Responden ellos. 

Veo que Winter se va a a sentar así que voy con ella.

─ Hey, Wins. ─ La saludo mientras me acomodo a su lado.

─ Hola, Luke. ─ Me saluda simpática.

─ ¿Como estás?

─ Bien. ¿Y tú? ─ Dice y la noto incomoda. Bueno, yo también lo estaría si hubiese sido ella quien me besó.

─ Bien.

─ Oye, Luke. Ven, acompáñame. ─ Me tiende su mano luego de ponerse de pie. 

─ Okay. ─ Digo y la sigo. 

Winter

Estoy decidida. Le diré que lo perdono y que aún le quiero, aunque el no me quiera como antes. Debo sacarme ese peso de encima, debo decírselo.

Lo llevo a la azotea del aeropuerto. De tantos viajes que hice, tuve rato para conocerlo.

Llegamos y me pongo más nerviosa..

─ Wow, Wins. Lindo lugar. ─ Admira. 

─ Si... Lo sé...─ Pauso y respiro. ─ Oye... Debo decirte algo... ─Confieso nerviosa.

─ Lo que quieras, Wins...

─ Yo...─ Sabía que esto sería complicado de decir, así que lo beso. Tal vez así captea la indirecta.

Luke

¡Ella me está besando! ¡Me está besando, carajo! ¡Me está besando!

Eso quiere decir que aún me quiere... ¿No?

Cuando nos separamos, la miro de cerca.

─ ¿Por qué fue eso? ─ En realidad yo ya lo supongo, pero tengo ganas de molestarla.

─ Para probarte que fuiste un idiota gigante, pero que aun así te quiero. ─ Admite. 

─ Yo también te quiero, Wins. ─ Sonrío feliz. ─ A parte, lo presentí. ─ Digo, altanero.

─ ¡Eh, señor ego! ¡Baje que Luke sube! ─ Ríe ella. 

─ Muy graciosa. ─ Saco la lengua hacia ella. 

─ Tan maduro... ─ Rueda los ojos. 

Winter

Unos minutos más tarde volvemos con la familia a esperar el abordaje. Una vez dentro del avión mis padres se sientan juntos, la mamá de Luke con su esposo (Quien ya se había dormido), Lucas con una chica, Ashton y Daisy juntos, Ben y Jack juntos y Luke y yo juntos.

El viaje es un poco largo, así que aprovechéo para dormir un poco...

Horas más tarde

─ Despierta, bella durmiente. Despierta. ─ Dice Luke, besuqueándome. 

─ Ya, Luke. ─ Río. ─ Ya desperté.

─ Qué bien, porque ya llegamos. ─ Dice sonriente.

─ ¿Tú no has dormido nada? ─ Pregunto mientras me desperezo. 

─ Si, pero la azafata me despertó recién. ─ Afirma y asiento. 

En cuanto bajamos, tomamos nuestras maletas y nos vamos directo al hotel. Nos estamos hospedando en un bonito hotel con fachada muy moderna. 

Al llegar, Luke y yo decidimos volver a dormir ya que ambos estábamos cansados, pero los demás deciden ir a hacer turismo. 

Al llegar a mi cuarto me preparo para descansar, pero alguien toca a mi puerta.

─ ¿Quién es? ─ Pregunto. 

─ Lukey. ─ Dice el susodicho detrás de la puerta.

─ Ah, pasa. Está abierto

Trata de abrir la puerta y no puede. Me río a carcajadas.

─ ¡Caíste! ─ Me río mientras tomo mi vientre entre mis manos.

─ Venga... ─ Dice rezongando. ─ Abre. 

─ Ya, ya. ─ Paro de reír y le abro la puerta.

─ Eres mala. ─ Dice mirándome desafiante.

─ Muy mala. ─ Admito dándome la vuelta. Oigo la puerta cerrarse, por lo que intuyo que ha entrado. 

─ Si, pero eres mi mala. ─ Me agarra de la cintura y se acerca a mi oído. ─ Mía. ─ Susurra lentamente, provocando que una corriente eléctrica viaje por mi columna vertebral.

─ Si, si Luke. Ahora dime, ¿qué quieres? ─ Digo riéndome ya que había comenzado a besarme el cuello y me hace cosquillas.

─ Quiero dormir contigo, estoy muy solo en mi cuarto. ─ Dice haciendo un mohín. 

─ Bueno. ─ Ruedo los ojos. ─ Eres demasiado tierno, no puedo decirte que no.

─ Lo sé. ─ Dice sonriente, aproximándose a mis labios.

─ Luke. ─ Susurro en sus labios.

─ ¿Si?

─ Te quiero.

─ Y yo a ti, princesa. ─ Dice y me besa.