Capítulo 4

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POV Alex
¡Mierda! ¿Ahora qué hago? Clio no se puede enterar de que Nicole está aquí. Piensa Leoni, piensa.

Alex: no quiero que hagas ruido ¿Entendiste? – susurré –. Si no obedeces no querrás saber lo que te voy a hacer.

Nicole: ¿Por qué no le dices a tu…? – le tapé la boca y la metí al baño dónde le puse un pañuelo en su boca.

Alex: no quiero hacerte daño. Así que te quedarás aquí hasta que Clio se vaya.

Salí del baño y seguida salí de la habitación. Ahí estaba Clio con una cara de pocos amigos.

Clio: ¿Que hacías ahí?

Alex: dándole indicaciones a la mucama. Tendrá que pagar lo que gasté en ella.

Clio: ¿Te parece si salimos hoy? – no.

Alex: ¿No tenías salida hoy con tu padre?

Clio: ¡Es cierto! Pero puedo cancelar.

Alex: no amor, siempre estás aquí. Es justo que le dediques tiempo a tu familia – ya por favor que se vaya.

Clio: tienes razón – me abrazó –. Nos vemos bebé – me besó y salió de mi casa.

¡Al fin! Me liberé de ella, ahora debo de ver a Nicole y sacarla del baño. Me dirigí a la habitación pero mi hermana me detuvo a mitad del camino.

Emma: ¿Por qué mi llave de la habitación de Nicole no abre? ¿Y por qué no me responde?

Alex: cambié la cerradura y está en el baño con mordaza.

Emma: ¿Que? ¿Por qué lo hiciste?

Alex: no estoy para dar explicaciones. La iré a liberar.

Emma: pero tú estás loco. ¿Cómo se te ocurre?

Alex: era eso o qué gritara con Clio aquí.

Emma: quiero verla. Dijiste que podría ser su amiga.

Alex: no había visto las posibilidades de que conspiraran contra mí.

Emma: Alex, soy tu hermana.

Alex: ¿Y? Pueden hacer muchas cosas. También Christian.

Christian: ¿Que yo que? – dijo saliendo sin camisa y miré a Emma.

Alex: bueno, viendo lo bien que la pasaron anoche, no quiero interrumpir su felicidad. Nos vemos.

Seguí mi camino y entré a la habitación del fondo dónde Nicole se encontraba, entré al baño y estaba ahí, llorando. Por un momento sentí que necesitaba abrazarla pero no, no puedo dejar que estos sentimientos me controlen.

Alex: listo – le quité el pañuelo de la boca y le ayudé a levantarse.

Nicole: ¿Por qué no me dejaste aquí? – salió del baño.

Alex: ¿Por qué no te has cambiado de ropa? – cambié la pregunta.

Nicole: hay puras batas de hospital.

Alex: pude haberte puesto solamente lencería – me acerqué –, deben de verse bien en ti – me dió una bofetada.

Nicole: ni en sueños soy una de tus putas – reí.

Alex: yo sólo mantengo una relación con Clio. Y tú te cambiarás y te pondrás una bata de hospital.

Nicole: sólo déjame ir y ya.

Alex: cuántas veces te lo diré. Solo saldrás de aquí cuando estés muerta.

Salí y cerré con llave, un día de estos si no la mato la terminaré besando. Esperen, ¿Que dije? No, Alex, ella es sólo tu garantía y tal vez sólo te diviertas con ella, sólo eso.

Cártel LeoniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora