⛓️ 𝐂𝐮𝐥𝐩𝐚𝐛𝐥𝐞 ⛓️ | ꜱᴇᴠᴇɴᴛᴇᴇɴ × ᴡᴏᴏᴢɪ

Capítulo 2: Condena.

Jihoon se encontraba por primera vez en su vida, nervioso. Siempre estaba tranquilo porque estaba seguro de que siempre de iba a salir con la suya, pero nada pasa hasta que pasa.

Maldijo ese momento en que su alma irracional se liberó y dejó de ser astuto como un zorro a ser agresivo como un lobo.

Simplemente estaba esperando fuera acompañado del policía, mentiría si negará que lo miró más de un par de veces y que era muy guapo. Entonces cuando le avisaron el guardia colocó su mano en su hombro haciendo que se sobresaltara para acompañarlo a la sala de los juzgados.

Allí abrió los ojos cómo no tenía ni idea, su sistema nervioso dejó de responder, sus pulmones de recibir oxígeno, sus ojos de pestañear y su cerebro de recibir información.

Estaba aquel pobre al que humilló y robó todo su dinero, al propietario al que molestó, su compañero de clase al que hacía bullying, al enfermero y al conocido que chantajeó, al profesor que acosó por la calle, al afectado del cierre de su negocio familiar y su profesor que le bajó la nota a quien también molestaba. Todos tenían una sonrisa que se hizo más grande al notar cómo temblaba el pequeño.

—¿Por qué estás tan nervioso? —preguntó Mingyu con un tono burlón.

—¿S-se conocen? —preguntó Jihoon como si fuera la última pregunta que haría.

—No solo nos conocemos todos, si no que nos hemos vuelto más cercanos todavía al saber que... Algo nos une. Y sí, ese algo eres tú.

—M-mierda...

Jihoon apartó la mano del moreno y se fue corriendo hacia la puerta donde justamente acababa de entrar el abogado y el juez.

Al blanquecino casi le da un paro cardíaco al saber que el abogado es el mismo hombre al que intentó estafar y el juez al que le robó la cartera.

Se echó para atrás lentamente hasta que el oficial lo acorraló para sentarlo en la silla, los ojos de todos estaban puestos en él. Podía sentir la satisfacción y la sed de venganza de todos los de la habitación.

—Bueno, la verdad es que es innecesario nombrar todos los cometidos de el señor Lee contra todos los presentes incluyéndome —dijo Seungcheol en alto.

Todos asintieron, era una falta de tiempo. Por lo que sería, el primer juicio que se llevaría por libre, con sus propias reglas.

—Lee Jihoon —le nombró en alto.

El chico dejó de resistirse y atendió al juez.

—¿Tiene algo que decir a su defensa? ¿Sus padres saben de esto?

—No tengo padres —respondió, haciendo que toda la sala quedara en silencio.

—Eso explica muchas cosas en su comportamiento... —pensó—. Bien, teniendo en cuenta que; es menor de edad, no cuenta con tutores legales y tiene que pagar por todos los daños sufridos... Su castigo va a ser... Seguir con tu vida normal, terminar los estudios y no vas a ir a ningún sitio como centro de menores, con la gran diferencia de pasar un periodo de aproximadamente seis meses de servicio comunitario para todas las víctimas.

—Solo eso, pues vaya... —se burló y sacó la lengua.

—Eso sí, cualquier cosa que te hagamos. No nos haremos responsables, es más, será legal.

—¿Qué quiere decir con eso?

—¿Alguien se opone? —lo ignoró.

Nadie levantó la mano a favor de Lee Jihoon, todos querían que pagara por todo lo que les hizo.