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Había pasado exactamente un mes, y a Jimin no podía estar yéndole mejor con el psicólogo.

El peliazul no duró mucho en tomarle la suficiente confianza para contarle absolutamente todo, desde el fondo de su corazón y sin tapujos.

Y lloró, absolutamente en todas las consultas que había tenido al momento, porque escuchar de un tercero, de una persona quien no lo conocía en absoluto, lo que siempre quiso oír era muy tranquilizador.

Si, Tae lo había estado ayudando desde el momento que lo conoció, pero era distinto. Tae siempre había sido así de suelto, sin importarle nada de lo que las personas pudieran creer de él.

Jimin sin embargo, creció con esa desconfianza, ese gran parche que su padre le pedía que pusiera cuando se trataba de mostrar su personalidad. Su personalidad y actitudes poco masculinas.

Y si, este lo decía para protegerlo, pero de cualquier forma, Jimin creció actuando una personalidad que no era real, y era muy difícil sacársela así nomás.

Así que hoy finalmente podría por fin confiar un poco de aquellas palabras que iba recolectando de las personas que terminaron siendo muy cercanas a él, y ponerlo en práctica como tantas veces había hecho en su habitación.

Cuando llegó a la práctica, saludó a todos rápidamente, yendo directamente a su profesora de danzas, quien se encontraba cerca del escenario, indicándole a una de sus compañeras que tenía que hacer.

-Profesora- Dice este un poco agitado. Esta lo mira sorprendida, Jimin normalmente no hablaba mucho- le quería pedir un favor- agrega, mirándola tímidamente.



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Hasta yo se esto, Jungkook. Vamos, concéntrate- le reta el mayor pasándole la mano por delante de los ojos- ¿Estás conmigo? Hola hola.

-Si Yoongi, estoy aquí- suspira, mirando nuevamente a su cuaderno- solo estaba pensando.

-Tendrías que pensar en el examen que tenemos en dos días- le reprocha este, volviendo a su anotaciones. Cuando se da cuenta que el contrario todavía no se había ni movido, lo vuelve a mirar, encontrándoselo en la misma posición que antes- ¿Estás bien?- agrega ahora un poco más preocupado.

-Sí, tranquilo, no es nada- responde mirando de reojo las hojas de su cuaderno.

-Sabes que puedes decirme lo que sea ¿No? No me molestaría, nunca- Jungkook lo mira, y el mayor le sonríe de lado, para luego volver a su trabajo.

Se quedan unos minutos en silencio, en donde uno estaba concentrado en el examen, mientras que el otro seguía pensando seriamente en soltarlo todo.

-No me siento bien- suelta este finalmente, sin mirarle todavía- Con Danbi Noona, creo que las cosas no están funcionando. Al menos no para mí.

-¿Y qué piensas hacer al respecto?- pregunta segundos después.

La inesperada lluvia [Taekook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora