yoonmin; ‹ mi querido esposo.

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Años atrás

Yoongi había despertado con algo de cansancio pues sólo había dormido dos horas y todo por estar hablando con el pelirosa casi toda la noche, aún así, no se arrepentía de nada.

Sintió que algo rodeaba su cuello, y ahí estaba su gran lindo esposo, el cual lo apresó con sus brazos y piernas, parecía un pequeño koala.

Su regordeta mejilla estaba aplastada al pecho del mayor y sus manitas acariciaban de vez en cuando su espalda, su ceño levemente fruncido y su boquita un poco abierta. Sus labios estaban hinchados y algo rojos, todo esto a consecuencia de algunos cuantos besos dados la noche anterior.

Tan sólo fueron minutos en los que se tomó observar a Jimin, siendo flechado por su belleza. No podía ni siquiera despegar sus ojos de él, realmente era muy atractivo y lindo a su vista.

—Hyung...—escuchó su voz viendo como poco a poco empezaba a abrir sus ojos, dedicándole una tierna sonrisa.

—Buenos días, pequeño— besó sus labios encontrándose con el dulce sabor a vainilla que éstos tenían. Jimin todas las noches antes de ir a dormir se aplicaba bálsamo labial de vainilla.

—Otro— se acercó a él, dándole varios besitos seguidos en sus labios, cosa que lo hizo reír.

—Te amo, realmente lo hago— dijo con voz ronca.

—Usted es realmente muy cursi— besó su cuello— Yo igual lo hago, Hyung. Lo amo demasiado.

Rió acariciando las hebras del cabello de Jimin dando mimos en la zona, en aquel momento se sintió realmente muy feliz, tenía muchas ganas de seguir despertando de la misma manera. Viendo a su pequeño de cabellos rosas todos los días, darle muchos besos y apapacharlo.

Quería guárdalo en una pequeña cajita y protegerlo de todo mal, Jimin era su más preciado tesoro.

🐤

Algo cursi porque si uwu~