Capitulo 25 ( final ultima parte)

155 13 10
                                    

Ya más tranquilo su novio logro soltar todo lo que le acomplejo en aquel momento, he incluso saco el nombre de quién se atrevió a dañar a su rosa, ya esa noche no podía hacer nada pero mañana pondría el grito en el cielo si era necesario por Albafica. Es más iría a encarará a ese maldito niño rico que se atrevió a propasarse con su novio, le pagaría cada lágrima con creces el hacer llorar a su rosa no sé lo perdonaría a nadie.
Llegado la mañana se arregló y dejando al sueco dormido en la cama y unas compresas frías en su muñeca para que la hinchazon bajará partió a la llamada empresa de los Bucciarati, entro como si nada y ni la recepcionista lo pudo detener, de que esté atravesará todo el lugar en dirección a la oficina del dueño y ahí estaba, un Sísifo tratando de detener su andar pero no llego a nada este igual entró donde se encontraba Sage
- donde está la escoria de tu hijo - pregunto con enojo
- ha ver me bajas el tono, mocoso esta no es tu casa - declaró Sage quien se molestó por el trato que dió a su hijo
- perdón donde están la bestia de su hijo - formuló nuevamente no tenía otra forma de referirse al italiano
- empezando porqué necesitas a la bestia de mi hijo - le siguió el juego mientras Thanatos estaba dispuesto a defender a Sage si es que el menor intentaba algo
Tomo un respiro podía estar enojado, pero el padre de este no tenía la culpa - pienso colocar una demanda ante su hijo - comunico al mayor quien se asombro ante tal osadía
- y por qué sería tal demanda - su voz sería se sintió en toda la habitación
- por intento de violacion, y heridas leves
- está divagando - con sorna, este chico se había vuelto loco su hijo no podía hacer eso - y a quien se supone que trato de violar - reía ante tal estupidez
- sonará raro, pero se propaso con mi novio - confesó para llevar sus dedos al tabique de su nariz
- mira tú cómo se yo que no le tendiste una trampa - volvía a decir incrédulo - los abogados como tú hacen lo que sea para llegar rápido a la cima
- no sacrificaría a mi novio, aparte tengo las pruebas aquí - saco de su bolso un par de fotos que mostraba su muñeca y algunas partes de su cuerpo que había sido tomadas con fuerza - eso es suficiente prueba
- eso lo podría haber hecho cualquiera, incluso tu - minos sintió como su garganta se cerraba ese hombre defendía a su hijo con los ojos cerrados
- yo no haría algo así - comenzó a molestarse
- veamos cuánto quieres entonces, para que dejes de molestar
- quiero... - le miró con rabia - que su hijo le pida una disculpa a Albafica y no vuelva a acercarse jamás en su vida a él es más conseguiré una orden de alejamiento
El de cabellos blancos tubo una puntada en el pecho cuando escucho el nombre del aludido, esas fotos eran de Albafica, es más eso lo había hecho su hijo, no Manigoldo no haría algo así - dios Manigoldo que hiciste - susurró pero fue oído por Thanatos, quien noto como ente comenzaba a alterarse saco al más joven a regañadientes, el cual seguía gritando desde afuera que no dejaría que ese maldito se saliera con la suya, tantos volvió a dentro y pidió a los guardias sacarán al noruego, solo segundo y Aldebaran ya lo arrastraba fuera del edificio, mientras Sage sentía que su cabeza explotaria. Tomo su teléfono y marco a su hijo el cual se oía apenado
- Manigoldo anoche que hiciste - pregunto con temor a su respuesta
- yo cometí un error terrible ayer... Lo perdí
- un joven dijo que pondría una demanda de alejamiento a tu nombre hoy
- no lo permitas por favor, no dejes que me aleje más de Albafica - rogaba a su padre entre llantos necesitaba disculparse necesitaba sentir los brazos de sueco ya no aguantaría más y si lo alejaban, y si el no quería volver a verle, no lo resistiría
- sabes que hiciste algo grave
- si, y estoy arrepentido, pero no quiero perderlo
Dió un largo suspiro, su hijo le rogaba para que lo ayudase pero, las fotos se veían horribles se verdad fue su hijo quien había causado eso, era una estúpida idea ayudarlo a estar con Albafica y más después de eso. Su pequeño niño podía ser violento, y por primera vez lo demostraba por qué si se había enamorado de verdad, no podía permitir que el sueco saliera lastimado pero tampoco quería ver a su hijo sufrir.
No sabía que hacer, colgó el teléfono y si al final no era tan mala idea que ellos dos estubieran separados, sacudo esas ideas de su cabeza y busco alguna solución a ese problema.

Mia bella RosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora