Aprendiendo a Vivir

✎06✎

 —Elizabeth, siento el daño que te he hecho— decía la mujer abrazándola mientras se agachaba junto a Betty, la cual se estaba desplomando en el piso.

—La perdí a ella, no quiero perderlo a él— dijo negando.

Alice se separó y le corrió el cabello de la rubia que se pagaba en su cara por las lágrimas y el sudor.— ¿A quien cariño?— preguntó con lágrimas.

—A Jughead, no quiero perderlo.

—¿Quién es?

Betty solo negó para seguir llorando, sin contestarle a su madre sobre la pregunta.

(...)

—¿Qué diablos pasa por tu cabeza, Andrews?— habló Sweet pea.

Fangs por otra parte, se intentaba comunicar con su amiga, pero no respondía.

—Dios, vamos— rogaba Fangs.

—¿Acaso sabes lo que es estar en el lugar de ella?— preguntó Sweet pea— Ninguno de nosotros tiene idea. Eres un imbécil y egoísta.

—Familiares de Jughead Jones— habló la enfermera.

Todos miraron a la enfermera— Él se encuentra bien. No puede respirar aún por si solo, pero se ha sacado la máscara y ha pedido a Betty. Quiere ver a Betty— dijo la enfermera, la cual claramente conocía a la rubia de verla constantemente en el hospital.

Todos se miraron—¿De verdad crees que Betty le hace mal a Jughead?— preguntó irónico Sweet pea a Archie— Porque despertarse y murmurar primero su nombre, incluso corriendo el riesgo de dejar de respirar, no es algo menor. Betty es mas importante que tú para Jughead.

Fangs fue correspondido la llamada luego de tantos intentos.

—Fangs— soltó Betty.

—Oh dios— dijo mientras todos lo miraron, esperando tener una señal de Betty para cumplir el pedido de Jughead— ¿Dónde estás?

—En mi casa, con mi madre— dijo con la voz quebrada.

—Se ha despertado— le dijo— Betty, quiere verte. Eres a la única que quiere ver.

—Yo lo voy a lastimar— soltó.

—Oh claro que no, Betty— dijo Fangs negando— . Él te necesita, eres la única razón por la que él respira, ¿no lo entiendes?

— Él lo tiene a todos ustedes, ¿Por qué a mi?

—Porque te ama, Betty, ¿acaso no te has dado cuenta?— un silencio se produjo en la linea y Betty cortó la llamada con lágrimas.

Fangs se retiró el teléfono y los miró a todos, para luego negar.

—Archie, debes irte— habló Fangs. —Jughead no va a estar feliz de verte.

Archie solamente bajó la mirada y se fue de ahí. Y así, los padres y la hermana de Jughead entraron a la habitación junto a Fangs y Sweet pea. Él los miró, medio adormilado y frunció su ceja. Se dispuso a quitarse la máscara pero su madre le tomó de la mano.

—Ella está bien hijo, descansa— murmuró.

El mundo de Jughead pareció derrumbarse al no verla, al que ella no este ahí. No quería perderla, pero parece que ya lo había hecho. Suspiró y miró a su familia, y luego a su hermana. Sus ojos parecían cerrarse, pero no lo quería hacer, quería ver a su familia, a sus dos amigos.

—La conocí— dijo JB mientras le tomó la mano a su hermano—, es hermosa le sonrió con lágrimas.Jughead asintió medio dormido.

No podía cerrar sus ojos, sabía que en el momento que lo hiciera todos en la habitación iban a desaparecer. Quería hablar, quería gritar; tenía mucha impotencia dentro de él. Quería decir que la amaba, que en ese poco tiempo, ella era su esperanza, pero... ella no estaba.

La puerta se abrió y todos giraron su cabeza, para ver pasar a una rubia totalmente devastada. Todos se miraron e intentaron no sonreír. Jughead la miró y abrió un poco más sus ojos, cansados.

Fangs y Sweet pea salieron y Betty se acercó a Jughead.

—Nosotros nos iremos— dijo el padre de Jughead saliendo de la sala junto a su mujer y su esposa.

Jughead fue a sacarse la mascara para hablar, pero Betty se lo negó y le tomó la mano para sentarse en la camilla en su lado.

—Yo también te amo— dijo mientras le besaba su mejilla.Jughead no evitó cerrar sus ojos, pero su mano busco a la de Betty y una vez que la encontró, la tomó—. Descanza, ¿si?— dijo Betty mientras Jughead escuchaba su voz antes de caer en un sueño—. Aún cuando despiertes, estaré aquí . Siempre lo estaré.

Betty suspiró y le besó la frente para luego recostarse a su lado, en sus brazos y eso fue lo último que Jughead notó antes de dormirse, con miedo,a no volver a despertarse jamás.

(...)

Se removió y demoró en abrir sus ojos. Cuando lo logró hacer, notó que estaba en su usual habitación. Demoró en caer en la realidad y cuando logró ubicarse completamente, observó a una rubia mientras ordenaba su escritorio el cual estaba siempre con los lápices en cualquier lado, pero ahora estaban todos ordenados. Observó las flores y el aroma que tenía su habitación.

Fue a hablar pero este aún tenía la máscara por lo que se la sacó— Estás aquí — murmuró mientras se sentaba.

Betty se giró con una sonrisa y lo miró— A lo tuyo si lo llamo dormir.— sonrió mientras avanzaba — Te he dicho que no me iba a ir a ningún lado.

—Betty—la llamó y la rubia lo miró— yo te amo— soltó.

La rubia sonrió—También te amo, Jug— correspondió.

Esta se sentó en la cama y acercó su rostro— ¿Puedo besarte?— le preguntó, pero Betty cortó la distancia para besarlo. Dejó una mano de ella en la mejilla de él y por una vez en la vida, ambos se sintieron completos. Como si nada más faltara, pero en realidad, aún faltaban muchas cosas dado que ambos estaban aprendiendo a vivir.

Ambos se separaron y sonrieron, Betty lo miró sonrojada y le tocó la mejilla—Eres bonito— dijo con una sonrisa burlona.

—¿Crees que soy bonito?— preguntó con una ceja alzada y una sonrisa.

—Claro que lo eres.

—Oh Elizabeth, está claro que no me conoces— dijo negando.

Y fue por un momento, donde ambos se encontraban acostados. Betty acurrucada en el pecho de Jughead y esté con su cánula nuevamente pero a nadie le importaba, y a ellos tampoco les importó el hecho de que sea mediodía y estén a punto de dormir, ni tampoco que una enfermera entrara.

Ya no les importaba nada más que el otro; la otra mitad, la otra parte, y no, no estamos hablando del corazón , estamos hablando de la vida.

Jughead no era la otra parte del corazón de Betty, era la otra vida, y así viceversa.

Eran la mitad que necesitaban para completar sus vidas.