Still the one - Segunda parte de 'ALIVE'

Capítulo 16. Inferior

Viernes 31 de enero de 2014

[Punto de Vista Judi]

Tanto Julia como yo nos sentamos en el sofá de tres plazas que se encontraba frente a la televisión, justo en el medio del salón. Louis prefirió continuar de pie, mirándonos en la distancia, apoyado en la pequeña columna que atravesaba una de las esquinas de la estancia acabando con la seriedad que guardaba el resto de la vivienda. Se cruzó de brazos, apoyó la planta del pie en la parte inferior de la construcción, y fijó su mirada en nosotras, con cara de pocos amigos.

- Ignoraré que uno de los aquí presentes quiere asesinarme y te explicaré todo lo mejor que pueda -comenzó Julia, dejando escapar después un suspiro-. He ido a hablar con Zayn -Louis tosió y ambos intercambiaron una mirada-. ¿Me dejas continuar? -Preguntó, de mal humor.

Louis tendió su brazo derecho hacia ella.

- Por favor, insisto -dijo, ahorrándose él también todo el buen humor.

- Gracias por tu beneplácito -suspiró. Era más que evidente el mosqueo existente entre ambos, pero yo no era capaz de centrarme en otra cosa que no fuera aquello que tenía que contarme y que afectaba a Zayn-. He ido a hablar con Zayn. Y le he visto mal -sólo eso bastó para que el corazón se me encogiera-. No sé exactamente cuáles son los motivos que le obligan a mantenerse alejado de ti, porque no los entiendo ni quiero entenderlos, pero te quiere, Judi.

Tragué saliva. Tres veces consecutivas. Doblé mis dedos en un gesto nervioso, haciendo que un chasquido saliera de todos ellos. Esperé a que Julia continuara, pues me veía incapaz de pronunciar una sola palabra sin romper a llorar. ¿Me quería? ¿Era eso cierto? ¿Desde cuándo me quería?

¿¡Y por qué no me lo decía!?

- He intentado hacerle ver que con su decisión lo único que está consiguiendo es hacerte daño a ti, hacerse daño a sí mismo, está engañando a Perrie y está haciendo que todo esté de una manera opuesta a como tiene que estar. Vosotros dos debéis estar juntos, porque os queréis.

Más temblores, por todo el cuerpo. Suspiré, bajé la mirada y me sentí brevemente mareada. Todo eso, así de repente, era algo que jamás me hubiera esperado. Había empezado a acostumbrarme a mi rutinaria y aburrida vida sin él, a mí soledad y a mí desánimo cuando se trataba de encontrar a otra persona que pudiera complementarme como lo había hecho él. Empezaba a habituarme a todo eso, y esa noticia, esa confesión, hizo que mi mundo se tambaleara como si una bomba hubiera caído justo en el centro de mi máximo sustento para seguir con vida.

- Si todo esto es verdad... ¿Por qué no está conmigo? -Sollocé y Julia atrapó al instante mi mano.

Louis caminó finalmente hasta donde nos encontrábamos y se sentó junto a mí. Pasó un brazo por mi espalda, dándome el consuelo que necesitaba y que esperaba de él.

- Tiene miedo, eso es todo.

- ¿Miedo a qué?

Julia negó con la cabeza.

- No lo sé exactamente.

- ¿Entonces cómo estás tan segura?

- Porque lo vi, Judi -sonó rotunda, convencida de lo que decía-. Vi cómo hablaba de ti, y de su estúpida relación con Perrie. Él no quiere estar con ella.

- ¿¡Entonces por qué no la deja!? -Grité, completamente desgarrada por dentro, abandonándome al llanto-. ¿¡Por qué me está haciendo esto!? ¿¡Por qué me está haciendo daño si me quiere tanto como dices!?

Julia tanteó a Louis con la mirada, quizá buscando unas palabras de apoyo. Me llevé una mano a la boca al tiempo que tosía. Notaba un profundo dolor en la garganta por las voces que acababa de propinar y por el llanto angustioso que se agolpaba en mi cuerpo deseando salir.