Narrado en primera persona...
-¿Qué está pasando Martha?, ¿Por qué todo ese ruido en las calles?- le pregunté.
-¡Mira!- me señaló hacía un televisor que se encontraba en la sala principal del hotel, -Es otra vez Eric, quiere que la mayoría de la ciudad esté en la calzada del palacio, todo el ruido de afuera son su gente sacando a las personas de sus casas.
-¿Otra vez el?, ¿Ahora con que nos va a salir?- dije un tanto molesto, pero a la vez preocupado y asustado, en eso escuchamos a don José diciendo: -¡Rápido!, ¡Bloqueen todas las entradas del hotel!, Apaguen todas las luces y fuentes de energía, ¡Todos vallan a sus respectivas recámaras!.
Todos los que estábamos ahí tapamos todas las entradas de modo que nadie de los purificadores pudiese entrar, mientras otros apagaban las televisiones
-¡Vallan a sus recámaras!- repetía don José -¡Aseguren sus puertas muy bien y cubran las ventanas!.
-¡Oliver, vamos a tu recámara!- me dijo Martha, a lo que yo accedí, subimos lo más pronto posible e hicimos todo lo que nos ordenó don José, mientras subíamos otras personas apagaban las luces de la sala, recepción, restaurante, entre otras cosas de modo que nadie sospechara que el hotel estaba habitado, no sabíamos el por qué Eric quería una congregación aunque apostaría que no sería para algo bueno, llegamos a mi recámara, aseguramos la puerta y tapamos la ventana que daba hacia la calle, pudimos escuchar a la gente asustada y a los purificadores.
Martha encendió la televisión y lógicamente lo puso a un volumen bajo pero suficiente para que los dos lo escuchemos, una vez más el canal local y todas las antenas de Santa Ana estaban siendo interrumpidas por los mismos mafiosos y en el centro del palacio... Estaba Eric Peña, nuevamente vestido de manera muy elegante a punto de dar un mensaje supuestamente "importante", pero... ¿Qué era importante para el?... Hasta que recordé lo que me dijo don José...
Narrado en tercera persona...
En la explanada del gran palacio municipal se encontraba Eric contemplando a las personas que habían traído su gente, en su mano traía una memoria USB, había mandado a poner distintas pantallas, dos en cada esquina, en las cinco cuadras de la calzada y cuatro pantallas en la explanada principal del palacio.
-¡Muy buenos días señores ciudadanos de esta ciudad!- inició, -¡Me da muchísimo gusto que estén presentes en este lugar!.
Todo la ciudad escuchó atemorizada.
-¿Piensan acaso que vine a destruir esta ciudad?, ¡Claro que no!, Yo estoy aquí para restaurarla.
-¡Pues creo que un genocidio no es una buena restauración!- tomó valientemente la palabra una persona que se encontraba cerca de Eric.
-A veces hay que sacrificar unas cuantas cosas, confíen en mí y esta ciudad será la más importante del país...
-¡Yo nunca confiaré en un mafioso!- dijo el mismo hombre -¿Piensas que te aceptaré como mi presidente?-, Eric solo se quedó callado, molesto. -¡El auténtico presidente de Santa Ana es el presidente Emilio!.
Mientras tanto Emilio, su esposa y la gran parte de su gabinete, a excepción de algunos incluyendo a don Mateo, estaban en el buker también viendo esa transformación.
-¿Ya ves?- le dijo su esposa, -¡Aún tienen su confianza en ti!.
Emilio asintió alegre y más tranquilo, pero de pronto su sonrisa desapareció cuando escuchó a Eric:
-¿El presidente Emilio?, ¿Crees que tu héroe es Emilio?- dijo Eric mientras comenzaba a reír, -¡Ciudadanos!, Lamento informarles que han vivido en un engaño, en un gran y miserable engaño.Todo el pueblo se quedó confundido, al igual que la esposa de Emilio, unas 5 personas de las 12 de su gabinete que se encontraban con el, Oliver también quedó confundido, en resumen toda Santa Ana.
-¡En esta USB,- continuó Eric con sarcasmo, -traigo unos vídeos que creo les gustarán!- acto seguido le dió a su ayudante la USB, este la conectó a una computadora donde abrió una carpeta que contenía un vídeo y un audio donde se comenzó a reproducir el primero, donde se podía ver a Emilio y el oficial Arturo con el doctor Alberto, el cual Eric había matado unos días antes, grabados por lo que se suponía era una cámara oculta...
-Señor presidente, oficial..., ¿Acepta esta propuesta de dejarme libre a cambio de todo esto?- dijo mientras le mostraba un maletín con dinero en su interior,
-¡Déjenme continuar fabricando drogas y que mi gente las venda ustedes ganarán $50,000 al menos!, ¿Qué dicen?.
-¡Es una oferta tentadora doctor!- dijo el oficial Arturo, -¿Podemos aceptarlo señor presidente?.
-Si nos compartes de tu producto tenemos un trato- dijo Emilio.
-¡Me parece muy bien!- respondió el doctor -¡Todos salimos ganando!.
-Así es- continuó Arturo -Solo ten más cuidado para no ser descubierto, ¿Ok?.- dijo mientras los tres comenzaban a reír...
-¡Emilio!,- le dijo su mujer casi gritando.
-¡Apaga esa televisión Victoria...!.
-¡De ninguna manera!,- le dijo -¡Quiero ver escuchar lo demás!
En el audio se podía escuchar la voz de Emilio.
-¡Señor Salinas!, Soy directo, ¿Cómo van las votaciones?-¡Pues verás!- le dijo el señor Jorge Salinas, que era el presidente de la organización electoral de Santa Ana, -te supera por 1,739 votos el candidato Francisco Garduza...
-¡Don Salinas!, ¿Cuánta probabilidad hay para que yo gane las elecciones?.
-¡Por favor Emilio!, Si quieres ganar la presidencia, es un precio bastante caro...
-¿Algo así como... Cuatro millones de pesos?...
-Podría ser...
-¿Ya vieron a su "héroe"?- dijo finalmente Eric mientras toda la ciudad estaba impactada y a la vez enfurecida, -¡Han sido engañados todo este tiempo...!, Y yo quiero que todos estos paguen, ahora les pregunto: ¿Están dispuestos a ayudar?- preguntó Eric a lo que la ciudad molesta le contestó casi en coro que sí.
-¿Quieren que estos desgraciados sufran y paguen sus delitos?.- a lo que toda la ciudad volvió a responder que sí.
-¡Me alegra escuchar eso!, Ahora Emilio está escondido en alguna parte de la ciudad y con el su gabinete, ¡Ayúdenme a encontrarlos y así podremos hacerlos pagar!, ¿Quieren la mejora de Santa Ana?, Pues bien ¡Ahora Santa Ana les pertenece!, Y el castigo de ellos será la elección de ustedes...
Todas las personas que se encontraban allí y los que vieron la transmisión en sus casas no podían estar más molestos, ahora dándole la razón a Eric comenzaron a buscar al presidente Emilio y a su gabinete para según Eric Peña: hacerlos pagar por todo lo malo que hicieron.
Fue así cuando comenzó una especie de revolución dirigida por Eric, buscando al presidente, su familia, a los del gabinete y a sus familias, con el único fin que era: hacerlos sufrir...
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UN LUGAR... ¿MEJOR?
AcciónPiensa esto... ¿Cómo puedo hacer de este mundo un lugar mejor? ¿Acaso se puede hacer una diferencia? ¿Qué se sentirá vivir sin miedo? Esta es la historia de una ciudad, aterrorizada por una guerra entre el bien y el mal, con la única cuestión: ¿Cómo...