UN LUGAR... ¿MEJOR?

El gran hotel de Santa Ana.

Pasado... (5 años antes)

Narrado en primera persona...

-¡Mira querida!, ¿Ya te enteraste?.- decía mi papá muy emocionado.

-No, ¿Qué ocurre?.- preguntó mi mamá algo confundida.

-¡El gran hotel que se construyó...!.

-¿El qué será dueño el señor Cruz?.

-¡Sí ese!, Adivina como se va a llamar.

-No se, ¿Cómo?.

-¡Se llamará como la colonia!- le dijo mi papá emocionado.

-¿Soconusco?.

-¡Sí!.

Sin embargo a mi mamá no parecía importarle ni lo más mínimo, simplemente le daba igual.

-¿Qué pasa?, ¿No te causa emoción?.

-¿Por qué?, No le encuentro la emoción de que un simple hotel se llame como la colonia.

-¡Pero no es un simple hotel! Será el hotel más importante y lujoso de toda la ciudad. Solo gente importante o adinerada podrá quedarse ahí.

-¡Y yo te pregunto!, ¿Eso en qué beneficiará a la ciudad?, O mejor dicho, ¿Cuánto nos costará?.

Decía mi madre, yo tampoco le tomaba tanta importancia, al fin y al cabo era solo un hotel, tal vez muy lujoso pero nosotros ni en sueños entraríamos a ese lugar.
Escuché que mi papá le comento a mamá que la inaguración la estaban transmitiendo en vivo a lo que yo por simple curiosidad fuí, encendí la televisión y busqué el canal local.

Narrado en tercera persona...

A los pies del gran hotel que habían decidido llamarle "Soconusco", se encontraba el señor Cruz, a su lado izquierdo el presidente Antonio (presidente en ese tiempo) y a su derecha el Padre Victor Zarraga Gumer, párroco de la colonia, en ese momento tomó la palabra el presidente Antonio:
-¡Estimados ciudadanos de esta hermosa ciudad!, Me honra presentarles el final de este gran proyecto, aquí tienen al hotel "Soconusco", un hotel 5 estrellas y me da un gusto darle la palabra al señor Juan Cruz, el cual inició, llevó el control y ahora concluye con esta obra, que será también el dueño y encargado de este hotel.

Todos los allí presentes aplaudieron para recibir al señor Cruz el cual agradecido y emocionado tomó la palabra.

-¡Amigos y compañeros!, Primeramente le doy las gracias al presidente Antonio el cual sin duda, apoyo en este proyecto y me dio su confianza, claro también hay que agradecer a los presidentes anteriores que autorizaron la construcción, pero presidente Antonio, cuando esto estaba a punto de cancelarse, usted nos ayudó a retomar y concluir, enserio, sin usted nada de esto hubiese sido posible.- es ese momento los presentes comenzaron a aplaudir y a vitoriar nuevamente, -Les puedo decir que hoy es un día muy importante para la ciudad- continuó -En los cuartos de este hotel se quedarán grandes figuras públicas y reconocidas y no solo eso, también el turismo aumentará ayudando a la economía de esta ciudad.

Nuevamente todos los presentes comenzaron a aplaudir llenos de gusto y emoción, ese hotel era increíblemente lujoso y tenía un total de 70 pisos, el hotel quedaba en la misma calzada de la Constitución no muy lejos del palacio presidencial.

-Ahora- comenzó a hablar Antonio -Vamos a permitir al Padre Victor para que bendiga el lugar.

Y así sucedió, el Padre junto con el presidente y el nuevo encargado del hotel entraron a este mismo para bendecirlo.
Al final de la ceremonia se realizó un gran banquete en el restaurante del hotel donde participaron en su mayoría personas de la alta sociedad, después una especie de fiesta privada que duró hasta el amanecer.

No tardaron muchos días para que el hotel ya estuviese casi lleno, en su mayoría, por personas que llegaban de vacaciones, personas de negocios y hasta algunos pocos por la simple razón de darse el lujo de estar ahí a pesar de que los precios eran algo caros pero variables.

Tal vez al construir ese lugar se mejoró en cierta manera a la empresa turística de la ciudad, sin embargo en las calles de la ciudad muchas personas estaban sin dinero, sin comida, sin hogar.

Muchas personas estaban en desacuerdo con la construcción de ese hotel con el argumento ¿Por qué no se hizo un lugar para las personas sin familia? Lo cual tenía bastante sentido, nunca se ha construido un albergue para pobres y era una petición casi a diario por más de 2 años, sin embargo nunca se recibió ninguna respuesta, existía una pequeña en la catedral de la ciudad pero era un lugar muy pequeño, aún así el obispo y todos los sacerdotes sin rendirse pedían una y otra vez la autorización para el albergue pero de igual manera, una y otra vez, este era rechazado...