8_ Dulces sueños

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El presente.

En la habitación de Marinette todo estaba oscuro y en silencio mientras cierto héroe felino, veía el cielo nocturno y pronto sonrió al suponer que Marinette estaba entrenando al país de los sueños.

Con cuidado de no hacer mucho ruido, abrió la entrada que daba al balcón de ella, recordando que no cerraba bien por que ella se tropezó y rompió el seguro, según lo que le dijo a Alya mientras le mostraba un chinchon en su frente que hicieron que él se ría y ella lo vea con los ojos llorosos, evitando ella en hablarle todo el día.

Aún ahora, él se preguntaba como podía meter tanto la pata y lastimar los sentimientos de Marinette.

¡Pero en su defensa, se quiso contener la risa y sólo rió por que a su Marinette una vez le pasó algo similar!

Con cuidado, aterrizó sobre su actual amiga la cual efectivamente faltaba poco para que duerma.

-Que tengas dulces sueños, bella Marinette. - susurro.

-Gracias... gatito... igualmente.

Y Marinette se durmió, creyendo que lo de hace un rato fue parte de su sueño.

El chico vio como su futura amada, se durmió profundamente y dio un suspiro agotado.

-¿Por qué en mi primer semana de casado? No sé vale.

¿Era normal tener celos de él mismo?

Seguro que en ése momento, su versión más inmadura, debía estar durmiendo como nunca antes gracias al estar siendo abrazado por su Marinette... sí no metió la pata y ahora debe estar durmiendo en el sofá.

Chat noir miró a su futura prometida con una sonrisa.

-Bueno... ella tiene el sueño pesado, así que...

Con cuidado, se puso a un costado de ella y acercó su rostro para darle un beso en los labios, suave para que ella no despierte.

Separó sus labios y se contuvo la risa al ver que estando dormida, la chica estiraba sus labios, deseosa de más.

En verdad, ella era única y él era un tonto.

-¿Cómo es que en el pasado nunca quise probar estos hermosos y deliciosos labios?

Se preguntó mientras se acomodaba a su lado y la abrazaba.

Podía dormir tranquilamente con ella, después de todo, Marinette no depertaria en la noche y él se despertaria temprano para irse.

-Garras fuera.

Susurro mientras, volviendo a ser Adrien y Plagg lo miró molestó por que parecía no estar por darle queso.

-Pidele comida a Tikki.

Ordenó mientras cerraba sus ojos para dormir y el kwami se sorprendido al escuchar el nombre de Tikki.

Entonces lo que cambió en su portador es que su mente era del futuro...

Bueno, no le importaba realmente.

Continuará...
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¡Hola!

¡Wow! Está historia la hice creyendo que nadie la leería, haciendo sólo 10 capítulos pero veo que me equivoque.

¿Por qué les gustó? Me da curiosidad saberlo.

No creó que disfruten que Marinette y Adrien del futuro se aprovechen de su pareja en versión más joven ¿verdad?

Espero que les haya gustado el capítulo.

Gracias por su tiempo.

Volveré...

Presente y futuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora