TODO SOBRE NOSOTROS // YOONMIN - ADAPTACIÓN

EPÍLOGO

YOONGI

2 AÑOS DESPUÉS

He sido un hombre de mundo. Fui educado en las mejores escuelas y aprendido de las mejores empresas. He conocido a toda clase de gente y me he relacionado con toda clase de personas a mi beneficio. He aprendido y he cultivado relaciones durante todos mis años. No solo a nivel profesional, sino que también a nivel personal. He sabido vivir mi vida y no me quejo. ... Hasta ahora.

Estoy sentado en un asiento de avión de clase económica en camino a Seúl. ¿La situación? La cancelación de mi vuelo en primera clase ayer por la noche. Y todo gracias al mal clima. Estaba desesperado y sumamente irritante, pero solo había un culpable y ese era mi nuevo asistente. Kim Taehyun

Si, tenía un nuevo asistente. Y, a decir verdad, era alguien bueno. Pero no tanto como para ponerme en un vuelo directo a casa anticipando el clima. Definitivamente tendrá serios problemas luego de que termine mis semanas sabáticas.

Y es que sí, una vez más regresaba a casa luego de un largo viaje de dos semanas fuera. La empresa estaba cerrando un negocio multimillonario que nos traería muchas ganancias, y yo como su presidente, era el indicado para hacerlo. No es que fuera a dejar esto en otras manos.

En fin, las negociaciones fueron estupendamente y las cosas se desarrollaron más fáciles de lo que había previsto. Estaba de mucha suerte, y lo único que quería hacer era regresar a casa. Pero al parecer, el universo estaba en mi contra, dejando que me sentara aquí en clase económica. Atrapado entre una anciana y un hombre sumamente nervioso por el vuelo. Iba a asesinar a alguien. Eso es seguro.

Luego de un par de aspirinas y un vaso de agua, permanecí en silencio pensando en lo que haría al regresar. Hace dos años que mi vida había dado un giro de 180 grados y sí que me había sorprendido al respecto. Pensar en eso solo hizo que una sonrisa apareciera mi rostro. Y a pesar de que estaba en medio del caos, recordar que dentro de algunos minutos estaría de nuevo junto a él, valía la pena.

Para cuando quise darme cuenta el avión ya había aterrizado y los demás pasajeros se disponían a salir. Como pude, logré salir de mi encierro y tomar mi equipaje para irme lo antes posible. Para mi sorpresa, Kim Namjoon estaba esperándome y no estaba solo, mi pequeño, no tan pequeño, hermano está ahí con él, sujetando su mano. Aún no me acostumbro a su relación y por más que le dije que era algo ilógico a ninguno de los dos les importó mucho.

_ Es bueno verte hermanito. ¿Qué tal el viaje? _ pregunto Seokjin luego de abrazarme.

_ Detestable. ¿Sabías que en clase económica no ofrecen absolutamente nada de comer excepto solo jugos y aguas? ¡Es un infierno! _ ambos se miraron para luego soltar en carcajadas, señalando el gravísimo error de haberles dicho algo.

_ Hermano, así es como viaja la mayoría de gente. No armes un gran escándalo, solo porque viviste unos minutos como la plebe.

_ Si, Min. Además, una vez al año no te hará daño _ soltó Namjoon dándome un apretón en mi hombro.

_ ¡Solo cállense y llévenme a casa! Estamos perdiendo tiempo y no puedo esperar para verlo.

Ambos siguieron riendo todo el camino, mientras que trataba de calmar las ganas tan grandes que tenía de ahorcarlos. Esperaba llegar pronto, porque de no ser así, sería culpable de una masacre.

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Al entrar a la sala de aquella casa que se había convertido en mi segundo hogar, una calidez me invadió por completo. Haneul apareció estrechándome en un abrazo acogedor. Verla de nuevo me hacía sentir muy feliz. Aún no creo como fue que terminé de esta manera, pero estaba más que feliz por ello. Ella era una mujer extraordinaria y luego de varias charlas y discusiones al fin pudimos entablar una relación fuerte y duradera. Hasta el punto de adoptarme como un hijo más.