Capítulo 36

460 51 9
                                    

Conan: Papá - Este se quedó sorprendido al llegar allí también.

Shinichi: Conan, Luna.. - Este dejó a Keita en manos de mi madre y fue para abrazar a sus hijos, estos parecían estar muy contentos por verle.

Kaito: ¿Shinichi como esquivaste a los hombres de negro?

Shinichi: Usé esto.. - dijo mostrando mi pulsera de Moon.

Kaito: Que listo.. - dijo riendo.

Shinichi posó su mirada de mi hermano a mi, se fue acercando a mi, yo estaba escondida detrás de mi padre, sabía como se iba a comportar. Mi madre apartó a mi padre de ahí para que Shinichi pudiera verme.

Shinichi: .... - Este se veía muy serio y enfadado, estaba mostrándome la nota que dejé - ¡Pensé que te iba a ocurrir algo tonta! ¡Podrían haberte matado! ¡Acaso no recuerdas que Gin fue quien casi te mata una vez!

Tn: ¿Crees que no lo sé? - dije poniéndome seria - Pero merece la pena morir si consigo proteger a los que quiero, por eso decidí adentrarme en la noche pues sabía que Gin estaba esperando a que apareciéramos de noche.

Shinichi: Por que siempre tienes que hacer las cosas tu sola.. - dijo mientras agachaba la mirada - Es que no entiendes que no quiero volver a verte casi muerta.

Tn: ....

Shinichi: ¡Soy yo quien debe protegerte! ¡El que debe dar la vida por ti y por ellos soy yo! Así que si alguien tiene que morir protegiendo a alguien seré yo, no tu.. - dijo serio.

Tn: Shinichi.. - Mis lágrimas empezaron a salir.

Shinichi: Se que estabas sufriendo mucho pero no te vuelvas a alejar de mi como aquella vez.. - dijo mientras me limpiaba las lágrimas que salían de mi - Si mueres te prometo que te seguiré en el otro mundo - dijo mientras me abrazaba.

La tensión se notaba en aquél lugar, todo lo que había dicho Shinichi iba enserio. Ya me lo dijo una vez antes de casarnos y tener hijos, si yo llegara a morir el no podría vivir tranquilo, no podría vivir con aquél sufrimiento..

Luna al oír la conversación empezó a llorar.. Conan la miró e intentó consolarla.

Luna: ¡No, no quiero que muráis ninguno! - dijo entre sollozos.

Tn: Luna..

Shinichi: Pequeña..

Conan: ¡Prometemos no salir a la calle sin vosotros pero no muráis! - dijo también, por su rostro se le escapaba alguna que otra lágrima.

Shinichi y yo nos miramos, los dos nos acercamos a los niños pues se les notaban muy tristes. Cuando toda esa tormenta de sentimientos se calmó llamé a mi abuelo.

LLAMADA CON EL ABUELO

Abuelo: ¿Si?

Tn: Abuelo soy yo, Tn.

Abuelo: Ohh Tn, ¿por que llamas tan tarde? - dijo preocupado.

Tn: Necesito que me hagas un favor.

Abuelo: Dime.. - Parecía serio en aquél momento.

Tn: Me gustaría que consiguieras una casa nueva y con mucha vigilancia para nosotros.

Abuelo: ¿Una casa nueva? ¿Es que acaso la tuya no tiene la vigilancia suficiente?

Tn: ¿Te enteraste de que tus bisnietos fueron secuestrados?

Abuelo: Si.. ¿Los habéis encontrado?

Tn: Si pero los de la organización saben donde vivo.. por eso necesito tu ayuda.

Abuelo: Ya veo.. entonces haremos una cosa.

Tn: ¿Que cosa?

Abuelo: Vamos a poner otra medida de seguridad en la casa, una eléctrica.

Tn: ¿Eléctrica? - Los que estaban allí se les notaba muy extrañados.

Abuelo: Si intentan entrar en tu casa serán electrocutados con unos cuantos miles de amperios.

Tn: Pero eso durará días ¿no?

Abuelo: Que va.. ese dispositivo ya se lo añadí a tu casa hace tiempo, por si alguna vez ocurría algo así.

Tn: Entiendo..

Abuelo: Ve tranquila a casa, hay como un pequeño ordenador que detecta quienes vivís en casa y a quienes soléis dejar pasar por eso no pasará nada una vez que yo lo conecte.

Tn: Esta bien..

Abuelo: Espero que consigáis resolver este nuevo caso.

Tn: ¡Si, dalo por hecho!

Abuelo: ¡Nos vemos!

FIN DE LA LLAMADA CON EL ABUELO

Shinichi: ¿Seguro que eso..?

Tn: Tendremos que confiar en él.. además aprovechemos ahora que Shuichi está entreteniendo a los de la organización.

Me disfracé de Moon y tomé prestado mi pulsera para que no me reconocieran, toda mi familia se volvió a poner sus disfraces bien.

Mi hermano tomó en brazos a Luna mientras que mi padre tomó a Conan y mi madre sacó su nuevo ala delta y llevaba con ella a Keita, en cambio Shinichi se agarró con su cinturón a mi, así no tendría que ir cogiéndole por el camino.

Hice aparecer mis alas, agarré a Shinichi de la cintura y nos dejamos caer los dos del edificio agarrados, empecé a usar aquella velocidad para poder volar mejor con Shinichi, a este por supuesto le di una gorra para que no le vieran el rostro.

Mientras que íbamos volando sentí que este veía mucho los alrededores, parece que no estaba muy acostumbrado a volar conmigo, pero si con mi hermano cuando él era Edogawa.

Al llegar a casa nos quitamos el disfraz y con la llave en la mano empecé a caminar con miedo hacia casa, a primera vista no parecía que estuviera protegida con varios de miles de amperios pero.. el abuelo dijo que funcionaría así que vamos a confiar en él ¿no?

Mi familia entró también a la casa, sería mejor que lo que quedaba de noche la pasaran aquí..

Mi madre y mi padre dormirían en una de las habitaciones de invitados y Kaito en otra, mientras que los niños les pedí que se cambiaran y se fueran a dormir.. En cambio como Keita todavía dormía con nosotros pues dormiría en la cuna que hay en nuestro cuarto.

Después de haberlo dormido me cambié yo y me quedé rendida en la cama, Shinichi estaba despierto mirándome, parecía preocupado.

Tn: Sabes que te amo ¿no? - dije mientras me acercaba a su rostro.

Shinichi: Y sabes que si te acercas tanto no podré resistirme ¿no?

Tn: Lo sé pero.. - miré a un lado para ver a un Keita dormido - Solo quiero dormir abrazada a ti hoy, además ya con tres vamos bien - dije mientras me reía un poco.

Shinichi: Si.. - dijo este mientras se reía y me colocaba para que pudiera dormir pegada a él. Mientras que estábamos abrazados el me acariciaba la cabeza, mierda mi punto débil.. el pelo, sabe demasiado, me duermo más rápido cuando me acarician el pelo. - Eres como la joya que no deseo compartir con ningún otro chico, ni que tampoco quiero perder cueste lo que cueste. Como un misterio irresistible al que no puedo dejar de investigar, como una adicción, una droga para mi.

Mi VerdadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora